martes, 24 de abril de 2012

Final four Istambul 2012

Brevísima historia de la Copa de Europa

En 1954, el periodista francés Gabriel Hanot había acudido a cubrir para el periódico L´equipe el encuentro de fútbol entre el Honved de Budapest y el Wolverhampton y emocionado por lo visto, decidió proponer a su director la organización de un torneo europeo entre clubes. La ida resulto todo un éxito, y de esa particular manera surgió la copa de Europa de fútbol. Ante el éxito inmediato de la competición, la FIBA decide imitar el sistema y encarga a la federación checoslovaca el estudio de una formula atractiva de competición. En Junio de 1957, durante el transcurso del eurobasket de Bulgaria, se aprueba definitivamente el germen de la nueva competición que comenzara en los primeros meses de 1958.





Como curiosidad hay que recalcar que el diario francés dono el trofeo que se otorgaría al campeón durante muchos años, una preciosa canasta (hoy en día se entrega al campeón de la eurochallange).

A lo largo de los años el sistema de competición iría cambiando, y con ello su desenlace: pasando de la final a doble partido (con repetición en caso de empate), a la final a partido único o a la actual final four (que ya se experimento a finales de los años 60).

En lo deportivo la competición arranca con un claro dominio soviético, el AsK Riga dirigido por Gomelsky y liderado por el gigantón Krunmich se alza con los tres primeros títulos y caen en la cuarta final ante el TSKA.






En 1962 se disputa la primera final a partido único que se salda con victoria de los georgianos del Dinamo de Tbilisi ante el Real Madrid. El año siguiente se recupera la final a doble partido, e incluso se necesita partido de desempate, ya que el TSKA vence en Moscú por 17 puntos la misma renta que traía de desventaja de Madrid. En el desempate los 26 puntos de Volnov se tornan decisivos. En 1964 el Real Madrid es el primer equipo no soviético que se alza con el torneo, en parte porque los soviéticos al ser año olímpico habían declinado participar. Por fin, e 1965 un equipo de la URSS, el TSKA, es derrotado y el Madrid se alza con su segunda copa de Europa. En lo que queda de década lo haría por dos veces más (1967 y 68) completando el palmares el Milán del “senador” Bradley (1966) y de nuevo el TSKA (1969, la única final con prorroga (s) de la historia.




Hablar de la Copa de Europa en los 70, solo puede remitir a un nombre: Varese. En una racha difícilmente igualable, los varesinos disputaron las 10 finales de la década, consiguiendo 5 títulos. Dirigidos por el mítico profesor Nikolic primero (3 títulos) y por Sandro Gamba después (2 títulos) el mítico Ignis ejerció un dominio absoluto. El sobrio base Aldo Ossola y el gran Dino Meneghin permanecieron en el equipo los 10 años (Dino se perdió la final del 75 por una lesión en la mano), y junto a ellos la rapidez del mexicano Raga, el tiro de Morse o la calidad de los Yelverton, Flaborea o Bisson fueron dando cuerpo a la hegemonía más absoluta que la copa de Europa ha conocido. El Real Madrid (74 y 78) y el TSkA (71), mantuvieron su status y, a finales de la década, el Maccabi de Berkowitz y el Bosna de Delibasic se sumaron al palmares.



Los 80 arrancan con un nuevo triunfo madridista gracias a un gran Rafa Rullan y continúan con un nuevo éxito macabeo. A los israelíes los suceden en el palmares los italianos del Cantu, representantes de una ciudad pequeña pero para nada inexpertos, entre el 73 y el 81 habían disputado 8 finales (3 de Korac y 5 de Recopa), dirigidos por el gran Marzorati y que repetirian titulo en medio de la polémica. La FIBA tenía decidido suprimir la invitación de participar en la edición del año siguiente al campeón, si este no lograba plaza en su competición domestica, con el fin de evitar finales con representantes de un mismo país (a día de hoy en sus competiciones, cuando dos equipos de una misma liga llegan a una final four deben enfrentarse, por).
Pues bien, al final decidió dilatar la medida (la idea ya había partido de Stankovic cuando Joventut y R.Madrid coincidieron en la liguilla del 79), con tanta fortuna que el Cantu (que había sucumbido en el tercer partido de los cuartos de final de la LEGA ante el Synudine de Bolonia por 100-102) y el Milan se encontraron en la final del 83, con una nueva victoria de los de Cantú. El dominio trasalpino continuo en el 84, donde la “libélula” Wright comenzó a sentar las bases de la maldición barcelonista en la máxima competición europea.

Los dos años siguientes, 85 y 86, el gran protagonista sería Drazen Petrovic que guiaba a la Cibona a dos títulos y al que la nueva norma, impedía defender el tercero tras caer en la competición domestica ante el Zadar de los Petranovic, Vrankovic o Popovic. La última edición pre-final four deparó la victoria de los “viejos” del Tracer de Milan, coronando la gran labor de un Dan Peterson que ponía, temporalmente como hemos visto recientemente, punto y final a su carrera.

10- 1987 LA GRAN REMONTADA





Cerraba el breve repaso a la historia de la Copa de Europa, con el triunfo del Tracer de Milan, un triunfo cuyo momento más delicado estuvo…. en la eliminatoria previa a la liguilla semifinal. Por increíble que parezca, la mayor hazaña de los milanistas esa temporada, llego en una eliminatoria a cara de perro con el Aris de Salónica. En la ida jugada en Grecia, los Gallis y cia acumularon una ventaja de 31 puntos en medio de un ambiente infernal (98-67), que daba paso a todo tipo de comentarios acerca del ocaso de Meneghin o de la decadencia de McCadoo. Pero los italianos siempre se guardan un as en la manga, y en un Palatrussardi a reventar y con una presión que rayaba lo ilegal (el gran karate-press) consumaban la mayor remontada de la historia de la copa de Europa (83-49) y ponían la primera piedra de sus dos títulos consecutivos.



9- 1965 LA PRIMERA DERROTA SOVIETICA

En 1964 Real Madrid había tenido el honor de ser el primer equipo no soviético en levantar la Copa de Europa, pero sin embargo aquella victoria llevaba un pequeño asterisco y es que, como sería habitual a lo largo de toda su singladura, los soviéticos declinaban participar en las competiciones europeas los años olímpicos. Con estas premisas la final del 65 entre el TSKA y el Real Madrid llegaba cargada de expectación, y con una novedad: esta vez el primer partido se disputaba en Moscú. Con un enorme Clifford Luyk (28 ptos.) los madrileños resistían y se traían de vuelta una desventaja de tan “solo” 7 puntos. En la vuelta, con un frontón de Fiesta Alegre (no confundir con Vistalegre) abarrotado la velocidad de Emiliano rompía a los rusos y permitía el primer título con mayúsculas de un Real Madrid que con el 76-62 final, podía proclamarse ya a ciencia cierta como el mejor equipo de Europa.


8- 1963 UNA FINAL A TRES PARTIDOS


No, no es que la final se jugara en formato play-off, pero casi se le podía considerar un antecedente. Por aquel entonces la final se disputaba a doble partido, y en caso de empate, se celebraba un nuevo encuentro que había de dirimir el campeón. En estas premisas el Real Madrid viajaba a Moscú, con una renta de 17 puntos adquirida en el primer partido, que no parecía tanta si se tiene en cuenta que los blancos habían llegado a disponer de hasta 30. En Moscú, el TSKA salio a por todas y a falta de 20 seg., parecía ser el campeón gracias a los 20 puntos que ya acumulaba de ventaja, pero el pequeño Durand anotó un tiro libre y tiro a fallar el segundo de tal manera que Burgess se hizo con el rebote ofensivo y forzó el tercer partido, y con él, aunque los moscovitas no dieron opción en el desenlace, la final pasaba a la historia como la más “larga” de la historia.


7- 1965 RADIVOJ KORAC, EL CHAMBERLAIN EUROPEO





Si bien es cierto que el baloncesto es un deporte de equipo, no lo es menos el hecho de que las grandes hazañas individuales lo hacen más grande. Cuando, el dos de Marzo de 1965, Wilt Chamberlain le endosaba la friolera de 100 puntos a los Knicks, entraba de lleno en la historia del deporte y su mítica foto levantando el dedo índice mientras sujetaba un cartel con el número 100 se convertía en la imagen más recordada de la época.
Pocos años después, el genial ala-pivot zurdo del OKK Belgrado, Radivoj Korac, emulaba a Chamberlain y sometía al impotente equipo de Estocolmo anotando la friolera de 99 puntos en un record que permanecerá por siempre en los anales de oro del basket europeo. Tras anotar “tan solo” 34 puntos en la primera mitad, el mítico pelirrojo se desataba en una segunda parte de locura donde solo la ignorancia del registro impidió una cifra aún más notable.

En lo que al resto de competiciones europeas se refiere, el record lo ostentan los 144 puntos que Zdenko Babic (incluidos 28 triples) le endosaba en 1985 al Happoel Limasol…en un encuentro cuya intrahistoria es mucho más apasionante que el propio record anotador. A nivel de clubes, y aunque es difícil precisar según que registros, caben destacar los 153 puntos anotados por el actual técnico del Cholet, el turco Erman Kunter allá por 1988 cuando militaba en el Fenerbahce.




6- 1962 LA PRIMERA “FINAL”

En una época en la que las finales se disputaban a doble partido, una cláusula daba lugar a la primera final como tal propiamente dicha. Cansada de problemas diplomáticos, la FIBA había estipulado que, en caso de problema, la final se celebraría en campo neutral, así que cuando, una vez más, el general Franco se negaba a que un equipo soviético viajara a España, se opto porque la final entre los georgianos del Dinamo de Tbilisi y el Real Madrid se disputara en Ginebra. Los soviéticos montaron en cólera, pero una generosa indemnización del siempre sibilino Raimundo Saporta calmo los ánimos permitiendo la primera final a partido único de toda la historia. Al final, victoria soviética por 90-83 y acercamiento de posturas, que permitió que al año siguiente el “ejercito rojo” del TSKA jugara en España.

5- 1979 LA GRAN RACHA (LOS LIBRES DE PRADA)

Si hay un record difícil de igualar, ese es el del conjunto del Varese que durante los años 70, disputo la 10 finales del máximo torneo continental sumando 5 títulos. De todas las clasificaciones para las finales, la más agónica, sin duda, fue la del 79 (aunque como final la del 72 ante la Jugoplastika no tuvo precio). En la última jornada de la liguilla semifinal, Real Madrid y Varese se disputaban el paso a la final, el vencedor la disputaría y el perdedor se iría a su casa. En medio de una guerra de nervios (el Varese se presentó de blanco aduciendo haber olvidado su uniforme titular, obligando así al Madrid ha jugar con su uniforme reserva), una canasta de Yelverton mandaba el partido a una prórroga en la que el marcador se movía con cuentagotas. De tal manera que a falta de un solo segundo y con un punto abajo, el pivot donostiarra Prada era objeto de falta. Por aquel entonces aun permanecía en vigor la regla del 3*2, con lo que Prada tenía hasta tres oportunidades, con un acierto una nueva prórroga, con 2 la gloria…. Y sin embargo, fallo los tres con lo que el Varese cerraba su década mágica accediendo a una nueva final.

4- 1979 DELIBASIC METE A VARAJIC EN LA HISTORIA




Tras el claro dominio soviético en los años 60, Yugoslavia había tomado el relevo generacional aupada por el talento de los Slavnic, Kikanovic, Cosic o Dalipagic, pero le faltaba la guinda a nivel de club, ya que si, bien había sumado 5 títulos de la Korac y uno de la Recopa, la Copa de Europa seguía resistiéndose de tal manera, que el subcampeonato de la Jugoplastika en 1972 era el mayor éxito hasta la fecha. Nada hacia presagiar que la edición de 1979 fuera a ser diferente, pero contra todo pronostico el sorprendente y joven Bosna Sarajevo de Bogdan Tanjevic conseguía colarse en la final, aupado por su trío mágico: Delibasic, Varajic y Radovanovic. Sin embargo el partido decisivo pasaría a la historia, y no solo por el primer triunfo yugoslavo sino por la mayor exhibición individual que una final viera: Zarko Varajic anotaba 45 puntos, por dos motivos fundamentales: su gran tiro exterior y, sobre todo, la impagable colección de pases magistrales que el mago de Tuzla, Mirza Delibasic, le tenía a bien brindar sin por ello descuidar el ataque (30 puntos)

http://www.youtube.com/watch?v=XLNpvzyBxmI&feature=related

3- 1986 EL GRAN DUELO

La URSS versus Yugoslavia, Lituania vs. Croacia, Zalgiris contra Cibona pero sobre todo Petrovic contra Sabonis, la final de 1986 disputada en Budapest concentraba la mayor expectación posible. Frente a frente, las dos grandes potencias europeas pero sobre todo los dos grandes iconos baloncestisticos de los 80. Por un lado el genial Drazen, que ya había saboreado las mieles del triunfo el año anterior, y por otro el zar lituano que buscaba su consagración absoluta tras su exultante Eurobasket el año anterior. El partido discurría con más tensión que juego, igualdad en el marcador y cierta ventaja para Sabonis en el duelo particular, hasta que estallo la tormenta: Nakic robaba un balón y en pleno contraataque recibía una falta de Krapikas, a la que respondía soltando el brazo cuando de la nada aparecía Sabonis para tomarse la justicia por su mano golpeando al pivot croata lo que le suponía la descalificación y ,lo que es peor, enterraba las opciones del Zalgiris abriendo de par en par las puertas de la revalidad para los de Zagreb.




2- 1962 LA AUTOCANASTA DE ALOCEN


Que Pedro Ferrandiz ha sido uno de los grandes genios del basket europeo nadie lo puede negar y menos repasando alguna de sus “creaciones”. A principios de los 60, las eliminatorias a doble vuelta contaban con una particularidad: pese a que lo que importaba era el resultado global, si en el primer partido había empate se disputaba una prorroga. El 18 de Enero de 1962, Varese y Real Madrid se enfrentaban en el primer partido de los octavos de final, y tras más de 30 minutos los blancos dominaban con cierta holgura. Pero los problemas de faltas y el cansancio unidos a la gran actuación del húngaro Toth llevaban la igualada al marcador a falta de 2 segundos, ante lo que Ferrandiz decidía solicitar un tiempo muerto. Con el americano Hightower lesionado y con varios jugadores eliminados, la perspectiva de una prorroga se revelaba inquietante. Así pues, Don Pedro ordeno la jugada clave, saque de fondo para Alocen que anotaba en su propia canasta y una leve derrota por dos puntos, fácilmente recortables en la vuelta. Los varesinos tras unos primeros instantes de júbilo, montaron en cólera pero sus protestas solo sirvieron para que la FIBA, enunciara un nuevo artículo por el que una autocanasta sería sancionada con gravedad. Años más tarde el belga Dierckx intento repetir la historia propiciando que definitivamente se adoptara el modelo actual.



1. 1969 LAS PRORROGAS PARA LOS “LOCALES”

Desde que en 1966 la FIBA adoptara definitivamente el modelo de final a partido único, solo una ha tenido que recurrir a la prorroga para dilucidarse. Esa final no es otra que la de 1969, que, para más emoción, se vio abocada a una doble. Los dos mejores equipos del momento, TSKA y Real Madrid, llegaban a la final de Barcelona con una autoridad incontestable. Dada la rivalidad entre blancos y “cules”, se esperaba que el público local tomara partido por los moscovitas, pero al contrario de lo esperado se volcaba desde inicio con los locales hasta que algo sucedió…. Tras forzar Lipso la prorroga con una canasta en el último segundo del tiempo reglamentario, esta comenzaba con ligero dominio blanco pese al dominador juego de Andreiev. Tras un clamoroso fallo de Aiken y una perdida de Emiliano, un claro contraataque ruso era frenado por los árbitros señalando unos inexistentes pasos, lo que daba pie a otra prorroga. Los jugadores rusos montaban en cólera y con ellos, el público hasta entonces madridista viraba sus ánimos y convertía la segunda prorroga en un infierno para los merengues que acababan por ser superados 103-99, en una de las mejores finales de la historia.

LA FINAL FOUR



En 1988 la FIBA decide tomar, a imagen y semejanza de la NCAA, la idea de una final a cuatro. La idea ya tenía antecedentes ya que a finales de los 60 ya se había experimentado (bajo el nombre de fase final), aunque la idea no cuajo ante las protestas de los equipos que veían menguadas sus taquillas al perder el encuentro de semifinales.

1966 Milan-Bolonia

Sf Slavia Praga 103 AEK Atenas 73 (Zidek 31???)
Simenthal Milan 68 TSKA Moscú 57 (¿? )
3 y 4º TSKA 85 AEK 62 (¿?)
Final Milan 77 Slavia 72 (Thoren 21 Vianello 21 Zidek 22)

1967 Madrid

Sf Simenthal Milan 103 Slavia Praga 97 (Robbins 33 Zednicek 23)
Real Madrid 88 Olimpia Ljubiana 86 ( Aiken 31 Daneu 24)
3 y 4º Slavia Praga 88 Olimpia 83 (Zednicek 29 Daneu 39)
Final Real Madrid 91 Simenthal Milan 83 (Emiliano 29 Chubin 32)

Así pues en 1988 nace la moderna final four. El sistema de competición permanece casi intacto, tras sucesivas eliminatorias una liguilla entre los mejores da paso al acto final, y si hasta entonces los dos mejores se disputaban el título ahora pasaban a 4. Como curiosidad cabe resaltar que los dos primeros clasificados de la liguilla (Partizan y Aris) quedaron eliminados en semifinales, cuando de haberlo echo el año anterior hubieran disputado la gran final. La primera final four fue todo un éxito y deparó un nuevo titulo milanista liderado por el gran McCadoo.

[b]1988 Gante[/b]
Sf Maccabi 87 Partizan 82 (Magee 34 Divac 21)
Tracer Milan 87 Aris 82 (McCadoo 39 Gallis 28)
3 y 4º Partizan 105 Aris 93 (Gallis 41 Divac 31)
Final Tracer 90 Maccabi 84(McCado 25 Jamchy 24)

Tras el éxito del Tracer, llegaría el dominio balcánico: primero global con los tres títulos consecutivos de la Jugoplastika y el del Partizan, y posteriormente desde los banquillos. Aferrados a un baloncesto control y excesivamente mecanizado, Maljkovic, Obradovic e Ivkovic monopolizan los títulos del 93 al 97 (Limoges, Joventut, Madrid y Olympiacos). La racha la rompe el Kinder Bolonia de Messina, aunque lo hace aferrado a las mismas armas. Hay que resaltar que en 1992 había nacido la Liga europea, dando un nuevo paso hacia la globalización baloncestistica al permitir la participación de varios equipos de un mismo país.



[b]1989 Munich[/b]

Sf Maccabi 99 Aris 86(Magee 29 Yannakis 25)
Jugoplastica 89 Barcelona 77(Kukoc 24 Sibiliio 15)
3 y 4º Aris 88 Barcelona 71(Gallis 36 Norris 18)
Final Jugoplastica 75 Maccabi 69( Radja 20 Jamchy 25)

[b]1990 Zaragoza[/b]

Sf Barcelona 104 Aris 83(Epi 24 Gallis 26)
Jugoplastica 101 Limoges 83 (Perasovic 24 Ostrowski 21)
3 y 4º Limoges 103 Aris 91 (Ostrowski 26 Gallis 43)
Final Jugoplastica 72 Barcelona 67 (Kukoc 20 Norris 18)

[b]1991 Paris[/b]

Sf Barcelona 101 Maccabi 67 (Montero 25 Horton 16)
Pop 84 Split 93 Scavolini 87 (Savic 25 Daye 29)
3 y 4º Maccabi 83 Scavolini 81 (Jamchy 22 Cook 19)
Final Pop 84 Split 70 Barcelona 65 (Savic 27 Trumbo 12)

[b]1992 Estambul[/b]

Sf Joventut 91 Estudiantes 69 (Villacampa 28 Pinone 18)
Partizan 82 Milan 75 (Danilovic 22 Dawkins 21)
3 y 4º Milan 99 Estudiantes 81 (Rogers 20 Winslow 21)
Final Partizan 71 Joventut 70 (Danilovic 25 Pressley 20)

[b]1993 Atenas[/b]

Sf Limoges 62 R.Madrid 52 (Young 20 Sabonis 19)
Benetton 79 PAOK 77 (Rusconi 23 Prelevic 21)
3 y 4º Paok 76 Madrid 70 (Barlow 20 Biriukov 16)
Final Limoges 59 Benetton 55 (Young 18 Teagle 19)

b]1994 Tel Aviv[/b]

Sf Olimpiakos 77 Panathinaikos 72 (Paspalj 22 Volkov 32)
Joventut 79 Barcelona 65 (Villacampa 20 Epi 23)
3 y 4º Panathinaikos 100 Barcelona 83 (Gallis 30 Roberts 19)
Final Joventut 59 Olimpiakos 57(Ferran 17 Paspalj 15)

1995 Zaragoza

Sf Madrid 62 Limoges 49(Sabonis 21 Kempton 12)
Olympiakos 58 Panathinaikos 52 (E. Johnson 27 Paspalj 17)
3 y 4º Panathinaikos 91 Limoges 87 (Alvertis 29 Young 24)
Final R.Madrid 73 Olympiakos 61(Sabonis 23 Volkov 15)

[b]1996 Paris[/b]
Sf Panathinaikos 81 CSKA 77 (Wilkins 35 Karaseev 23)
Barcelona 76 R.Madrid 66 (Karnisovas 24 Arlauckas 22)
3 y 4º CSKA 74 R.Madrid 73(Vetra 22 Savic 22)
Final Panathinaikos 67 Barcelona 66 (Alvertis 17 Karnisovas 23)

[b]1997 Roma[/b]
Sf Olympiacos 74 Olimpija Ljubljana 65 (Rivers 28 Stepania 12)
Barcelona 77 Villaurbane 70 (Djordjevic 17 Rudd 20)
3 y 4º Olimpija 86 Villaurbane 79 (Milic 17 Digbeu 22)
Final Olimpiakos 73 Barcelona 58 (Rivers 26 Jimenez 16)

[b]1998 Barcelona[/b]

Sf Kinder 83 Partizan 61 (savic 23 Brkic 17)
AEK 69 Benetton 66(Anderson 21 Williams 22)
3 y 4º Benetton 96 Partizan 89 (Williams 24 Drobnjak 22)
Final Kinder 58 AEK 44 (Danilovic 13 Lasa 7)

Tras los años de racaneria, el sorprendente Zalgiris (quizás no tanto ya que venía de ganar la Saporta de manera brillante el año anterior) insuflaba un soplo de aire fresco, con su basket de conceptos libres y tiro exterior liderado por el mágico Tyus Edney, bien apoyado en Bowie y Stombergas. El 2000 traía un nuevo varapalo para el Barcelona y un nuevo título para Obradovic.

[b]1999 Munich[/b]

Sf Zalgiris 87 Olimpiakos 71 (Bowie 19 Tarlac 15)
Kinder 62 Teamsystem 57 (Nesterovic 16 Myers 18)
3 y 4º Olympiakos 74 Teamsystem 63 (Komazec 13 Jaric 17)
Final Zalgiris 82 Kinder 74 (Bowie 17 Rigadeau 27)

[b]2000 Salonica[/b]

Sf Maccabi 65 Barcelona 51 (Huffman 24 Goldwire 13)
Panathinaikos 81 Efes Pilsen 71 (Bodiroga 22 Turkoglou 15)
3 y 4º Efes Pilsen 75 Barcelona 69 (Besok 22 Rentzias 29)
Final Panathinaikos 73 Maccabi 67 (Rebraca 20 Huffman 26)

Tras años de enfrentamientos, la FIBA y la ULEB rompían sus relaciones y organizaban torneos separados. La Suproliga de la FIBA, poseía menos nivel medio, pero conservaba la final four y a tres de los participantes del año anterior en Salónica. En Paris, y con el Panathinaikos como claro favorito, el Maccabi con un gran Mcdonald y un dominante Huffman daba la sorpresa

[b]2001[/b]
Euroliga Kinder Bolonia 3 Tau 2 (Play off)

[b]Suproliga Paris[/b]

SF Panathinaikos 74 Efes Pilsen 66(Bodiroga 22 Mulaomerovic 25)
Maccabi 86 Cska 80 (Mcdonald 17 Kirilenko 23)
3 y 4º Efes Pilsen 91 CSKA 85 (Drobnajk 25 Kirilenko y Morgunov16)
Final Maccabi 81 Panathinaikos 67 (McDonald 21 Bodiroga 27)

La mayor bonanza económica de la ULEB, hace que finalmente los clubes se agrupen en su Euroliga. La primera final de la reunificación cuenta con el Kinder como claro favorito, pero en una gran segunda parte el Panathinaikos le da la vuelta y se hace con su tercer titulo. El año siguiente el Barcelona cierra su mala racha (5 subcampeonatos) y ante su público logra su primer titulo de la mano de Bodiroga. En 2004 el Maccabi, también como local, se lleva el título con una gran exhibición ofensiva y en 2005 lo revalida haciendo gala de un basket alegre y rápido. Los macabeos llegan a soñar con ser el tercer equipo en conseguir un tercer titulo consecutivo, pero el CSKA se interpone en el camino. En 2007, en una final plena de intensidad el Panathinaikos volvía a lo más alto ante un CSKA, que recuperaba un año después su titulo en Madrid, volviéndolo a perder un año después en una extraña final ante el Panathinaikos del omnipresente Obradovic.

Finalmente, en 2010, el Barcelona lograba su segundo título de una manera incontestable dominando la competición como pocas veces se ha visto (solo dos derrotas) y desplegando un baloncesto cercano al “total”.





[b]2002 Bolonia[/b]

Sf Kinder Bolonia 90 Benneton 82 ( Charlie Bell 19 Jaric 18)
Panathinaikos 83 Maccabi 75 (Bodiroga 26 Burnstein 18)
Final Panathinaikos 89 Kinder 83(Kutlay 22 Ginobili 27)

[b]2003 Barcelona[/b]

Sf Benetton 65 Siena 62(Garbajosa 14 Stefanov 17)
Barcelona 76 CSKA 71 (Fucka 21 Holden 21)
3 y 4º Siena 79 Cska 78 (Ford 19 Songaila 15)
Final Barcelona 76 Benetton 65 (Bodiroga 20 Edney 16)

[b]2004 Tel Aviv[/b]

Sf Maccabi 93 CSKA 85 (Parker 27 Marcus Brown 23)
Skipper Bolonia 103 Siena 102 (Delfino 27 Thornton 26)
3 y 4º CSKA 97 Siena 94 (Brown 27 Vanterpool 18)
Final Maccabi 118 Skipper 74 (Parker 21 Vujanic 21)

[b]2005 Moscu[/b]

SF CSKA 78 Tau 85 (Holden 20 Macijauskas 23)
Maccabi 91 Panathinaikos 82 (Sharp 20 Kutklay 17)
3 y 4º Cska 91 Panathinaikos 94 (Brown 21 Batiste 28)
Final Maccabi 90 Tau 78(Jasikevicius 22 Scola 21)

[b]2006 Praga[/b]

SF Maccabi 85 Tau 70 (Baston 20 Scola 15)
CSKA 84 Barcelona 75 (Williams 24 Papaloukas y Holden 19)
3 y 4º Tau 87 Barcelona 82 (Drobnajk 17 Fucka 20)
Final CSKA 73 Maccabi 69 (Papaloukas 18 Solomon 20)

[b]2007 Atenas[/b]

SF CSKA 62 Unicaja 50 (Langdon 13 Cabezas 13)
Panathinaikos 67 Tau 53 (Batiste y Becirovic 15 Erdogan 11)
3 y 4º Unicaja 76 Tau 74 (Tusek 18 Rakocevic 16)
Final Panathinaikos 93 CSKA 91 (Siskauskas 20 Papaloukas 23)

[b]2008 Madrid[/b]

SF Siena 85 Maccabi 92 (McIntyre 26, A. García 17)
Tau 79 CSKA 83 ( Rakocevic 19, Andersen y Siskauskas 16)
3 y 4º Siena 97 Tau 93 (K. Lavrinovic 19, Mickeal 15)
Final CSKA 91 Maccabi 77 (Langdon 21, Bynum 23)

[b]2009 Berlín[/b]

SF Olympiacos 82 Panathinaikos 84 (Greer 18, Pekovic 20)
Barcelona 78 CSKA 82 (Andersen 24, Siskauskas 29)
3 y 4º Olympiacos 79 Barcelona 95 (Greer 19, Andersen 20)
Final CSKA 71 Panathinaikos 73 (Spanoulis y Fotsis 13, Holden 14)

[b]2010 Paris[/b]

SF Barcelona 64 CSKA Moscú 54 (Fran Vazquez 11, Siskauskas 19)
Olympiacos 83 Partizan 80 (Kleiza 19,McCalebb 21)
3 y 4º CSKA 90 Partizan 88 (Langdon 32, Roberts 18)
Final Barcelona 86 Olympiacos 68 (Navarro 21, Childress 15)
2011 Barcelona
SF Maccabi 82 Real Madrid 63 (Eidson 19, Tomic 17)

Panathinaikos 77 Siena 69 (Calathes 17, Kaukenas 13)



3 y 4º Real Madrid 62 Siena 80 (Llull 23, Lavrinovic 17)

Final Maccabi 70 Panathinaikos 78 (Eidson 17, Batiste 18)




[b]10 GRANDES MOMENTOS DE LA HISTORIA DE LA FINAL FOUR[/b]

[b]10- 1966 EL SENADOR SE LLEVA LA PRIMERA[/b]



Adoptada como modelo experimental y llamada entonces fase final, la primera final a 4 tuvo lugar a caballo entre Milán y Bolonia y terminaría con el primer título para el basket italiano. El Milán había diseñado un equipo competitivo, aunque sin opciones claras para llegar lejos cuando un golpe de suerte cambio su sino. Bil Bradley, mejor jugador de los juegos del 64, venía a completar sus estudios a Oxford. Tras unas intensas gestiones, los milanistas conseguían que Bradley viajara los días de partido para jugar la Copa de Europa. Sin entrenar, sin apenas conocer a sus compañeros, el enorme talento de Bradley se sobrepuso a todo y llevo a los lombardos a lo más alto.

http://www.youtube.com/watch?v=sDhqNR3Y_ik&feature=player_embedded
Un año más tarde se repetiría experiencia con el Real Madrid imponiéndose como local al propio Milano y en la semifinal al Olimpija de Ljubljana de un heroico Ivo Daneu.

[b]9- 2005 EL TRIPLE DE MACHE[/b]



Tras perder dos final four de manera consecutiva ante los anfitriones (Barcelona 2003 y Maccabi 2004), el CSKA había conseguido llevar a Moscú la celebración de 2005. Con un equipo construido con una sola idea, durante más de 40 partidos permaneció invicto mostrando una solidez inédita en Europa desde los tiempos de Sergei Belov. La racha terminaba por romperse en un intrascendente partido ante el Barcelona, pero nada parecía poder hacer sombra a la máquina rusa en la final four. La primera victima para el ansiado título debía ser el Tau, pero un enorme Scola y el “carácter Baskonia” mantenían la incertidumbre. Con los locales al borde del colapso, un saque de fondo con apenas unos segundos de posesión derivaba en un monumental triple lateral de Macijauskas que confirmaba una de las grandes sorpresas de la historia de la final four.



8- 2003 EL FIN DE UNA MALDICION




Cuando la “libélula” Wright y sus imposibles driblings hundieron al Barcelona en la final de 1984, comenzaba una maldición que tardaría casi 20 años en quebrarse. 5 subcampeonatos y 7 final four después el carácter ganador de Dejan Bodiroga en la pista y de Sveteslav Pesic en el banquillo barría todos los fantasmas del pasado en medio de un Palau Sant Jordi abarrotado y preso de la euforia.


7- 1994 EL GRAN CORNY



Si hay una plaza eminentemente baloncestistica, esa es Badalona, adalid eterna del juego de la canasta entendido como un ejercicio de cantera, juventud y riesgo. Dos años atrás la penya se había quedado a las puertas de la gloria, pero en Tel Aviv y en medio de un mar de nervios, el enorme (en todos los sentidos) Corny Thompson se elevaba a falta de unos segundos y clavaba el triple crucial que hacia justicia a la ciudad del basket.

[b]6- 2007 LA GRAN FINAL[/b]




Tras las semifinales de 2007, el viejo regusto al caduco basket-control de los 90 había dejado un poso de desconsuelo en una audiencia ávida de algo más que exiguos resultados. Con las dos mejores plantillas de Europa frente a frente, la final habría de borrar las malas sensaciones del penúltimo acto. Tensión, nervios, dureza, tiros imposibles, defensas al límite pero sobre todo calidad brindaron más de 2 horas de un espectáculo único: La versatilidad de Siskauskas, el carácter de Diamantidis, la obstinación de Papaloukas o el “hambre” de Smodis fueron los ingredientes de una de las mejores finales de la historia.


[b]5- 2002 TOCALA OTRA VEZ ZELJKO[/b]



Bolonia estaba preparada para que la final four de la reconciliación, fuera también la de la consagración de su escuadra. La potente Kinder de 2001 se había reforzado con Becirovic y Granger que, unidos a Jaric, Ginobili, Smodis... conformaban un equipo poco menos que intratable. Enfrente el Panathinaikos de Obradovic, que esta vez parecía menos fiero, impresión que parecía confirmarse cuando los boloñeses se marchaban por 13 puntos de diferencia. Pero Zelimir siempre guarda otra vuelta de tuerca más: Bodiroga o Alvertis de falsos cuatros y todo el espacio de la zona para el joven Papadopoulos. El joven center, inédito durante casi toda la temporada, se hacía el rey de la zona mientras que Bodiroga, bien secundado por un inspirado Kutlay, tomaba el mando para dar un nuevo título al mejor entrenador de Europa.



[b]4- 1999 UN SOPLO DE AIRE FRESCO[/b]



La inesperada victoria del Limoges en 1993, había alimentado el nacimiento de un nuevo concepto baloncestistico apoyado en el absoluto control del ritmo, el uso de las manos y, en definitiva, el cercenamiento de la creatividad. Liderado por los técnicos balcánicos, Etore Messina había tomado el relevo ganando la edición del 98 con unos miserables 58 puntos y su equipo, el Kinder de Bolonia, llegaba a la final four de Munich como claro favorito. Pero, por suerte, no siempre los pronósticos se cumplen y un descarado Zalgiris liderado por Edney, enloquecía la final y a base de contraataques llevaba 15 puntos de diferencia al descanso. La tímida reacción boloñesa en la segunda parte fue estéril y el título viajo a Kaunas acompañado por el corazón de los románticos del deporte. Para el recuerdo queda la memorable retransmisión de Ramón Trecet en RTVE “cotangente de Pi…”



[b]3- 1996 LA GRAN POLEMICA[/b]



Dotado de unas condiciones innegables para el juego pero indolente hasta la desesperación, Stojan Vrankovic fue el protagonista de la jugada más polémica de la historia de la final-four, cuando en un acto impensable ,dada su habitual desidia, se levantaba de su caída en medio campo para correr hasta su aro y poner el tapón más famoso que se recuerde. La historia había arrancado mucho antes con el morbo en el duelo entre Maljkovic y Aito, que parecía tener controlado el primero con su juego lento y pausado. Pero a falta de unos pocos minutos y con 10 puntos abajo, Reneses daba entrada a dos bases y conseguía cambiar el ritmo del partido. Así a falta de unos segundos, Montero robaba el balón decisivo, trastabillaba, cometía unos pasos que no se señalaban y cuando dejaba la bola de la victoria en el tablero aparecía el enorme brazo de Vrankovic para hurgar más en la vieja herida cule. El tapón fue manifiestamente ilegal, pero lo más curioso del caso es que nada de aquello debería haber valido porque, en el anterior ataque, los griegos habían consumido 34 segundos sin que nadie se percatara de que la bocina hubiera saltado. La indignación fue grande e incluso la FIBA dio la razón al Barcelona, pero el trofeo voló a Atenas.


[b]2- 1989 JUVENTUD DIVINO TESORO[/b]



Es posible que los ya inmortales versos del poeta nicaragüense resulten un tanto manidos, pero no lo es menos que nada mejor para describir la maravillosa irrupción que Munich vivió en 1989. Llegaba el Barcelona como absoluto favorito a la final four cuando en semifinales se cruzo un grupo de jovenzuelos de Split, liderados por Bozidar Maljkovic y que interpretaban un juego preciso y preciosista como pocos. Así durante tres años, la Jugoplastika, que en 1972 ya se había quedado a las puertas del título con un postrero lanzamiento de Solman, labro su merecidísima condición de equipo de leyenda, creando tendencia y anunciando una nueva era para el baloncesto europeo con un equilibrio entra la solvencia defensiva y el talento individual no visto anteriormente. Los tres títulos consecutivos emulaban a los pretéritos triunfos del ASK de Riga, pero la dureza de la época daba especial significado a la hazaña de los croatas, convirtiéndolos, muy probablemente, en el mejor equipo de la historia del basket europeo.




[b]1. 1992 A SANGRE FRIA[/b]





A lo largo de la historia, multitud de jugadores han destacado por su especial sangre fría en los momentos más difíciles. De entre todos ellos quizás sea Djordjevic uno de los más recordados. Corría el año 92 y la final four viajaba a la maravillosa Estambul que bañada por sus tres mares olía a especias y magia, a caos y belleza, olía en definitiva a algo grande. Cuando a falta de pocos segundos para el final, Tomás Jofresa anotaba una suspensión frontal toda Europa daba por seguro que el título viajaba a Badalona, pero el Partizan saco rápido y entonces Aleksandar emprendió una carrera suicida que le llevo a la esquina, desde donde se levantó y con un escorzo imposible anotaba el triple ganador más espectacular que se recuerde.






FINAL FOUR 2012


LA CIUDAD:



Veinte años después de acoger la final four que culmino la primera Liga europea de la historia, Estambul se dispone a acoger la gran cita del basket continental por segunda vez en su historia. Puente entre dos mundos, Istambul ofrece jun sinfín de posibilidades al visitante tanto a nivel histórico, arqueológico o cultural (espectaclar su oferta musical). Santa Sofía, el Dolmenbahce, la mezquita azul o sus bazares son su cara más reconocible, pero cada rincón de tan inmensa ciudad guarda innumerables encantos para todos los gustos.



Baloncestisticamente, Estambul acogerá la final four con la pequeña decepción de no contar entre sus participantes a ninguno de sus tres representantes en la presente euroliga, aunque con la experiencia reciente de acoger el acto decisivo de la euroliga femenina. Al margen de la final four de 1992, donde el inolvidable triple de Aleksander Djordjevic coronaba, en el Abdi Pecki, al Partizan de Belgrado, la ciudad ha sido la sede de los eurobasket de 1959 y de 2001, así como del pasado mundial de 2.010.



EL PABELLÓN:



Con capacidad para cerca de 16.000 personas, el Sinan Erdem Spor Salonu, albergara la final four tras haber sido inaugurado tan solo dos años antes con el motivo del mundial de baloncesto.



CURIOSIDADES, DATOS…



-Pocas prorrogas: A lo largo de la historia de la Copa de Europa, pocos han sido los partidos que se han decidido por prorroga. En concreto solo la final de 1969 necesito de tiempo extra (eso si doble) para decantarse. Actualmente la era final four solo había vivido 6 prorrogas, dos en el partido de consolación de 2005 entre los desolados anfitriones del CSKA y el Panathinaikos ,otra en la semifinal italiana de 2004, donde finalmente el Skipper se deshacía del Siena y en 2008, de nuevo en el partido de consolación entre Siena y Tau. Hace dos años en Paris, fiel a su espíritu insobornable el Partizan de Belgrado llevo sus dos partidos (semis y consolación) a un tiempo extra frente a los, al menos en apariencia, superiores Olympiacos y CSKA.



-¿Final monocolor?



A lo largo de la historia, solo en tres ocasiones se ha producido una final entre equipos de una misma liga. Hasta 1992 solo participaba un equipo por liga, salvo que el campeón de Europa no lograra plaza en su competición domestica. Por si fuera poco esta norma fue derogada, y, por ejemplo, la Cibona no pudo defender sus títulos del 85 y 86 (lo mismo le sucedería dos años después al Tracer de Milán) tras perder la final de la liga yugoslava ante el Zadar. Además en los años en que la FIBA organizaba la final four, obligaba a los equipos de un mismo país a cruzarse en semifinales, norma que aun mantiene en sus competiciones. En Estambul, Panathinaikos y Olympiacos coinciden por cuarta vez en una final four, aunque en esta ocasión por lados distintos del cuadro ¿final helena? Desde luego sería histórica…aunque la euroliga femenina ya acaba de vivir un duelo hispano en su final.



Finales con dos equipos del mismo país



-1960 AsK Riga-Dinamo Tbilisi *

-1961 AsK Riga -CSKA Moscú *

-1983 Cantu-Milan

* Letonia, Georgia y Rusia pertenecían a la URSS



Ninguna de ellas se dado en la era final four, aunque si bastantes semifinales y es que, aunque este año no se de así, no ha sido raro que más de un equipo de una misma liga se cuele en la gran cita







Presencia de más de un equipo de una misma liga en la final four:



-1992 Joventut y Estudiantes

-1994 Barcelona-Joventut/Olympiacos-Panathinaikos

-1995 Olympiacos-Panathinaikos

-1996 Barcelona-R.Madrid

-1998 Kinder Bolonia-Benetton

-1999 Kinder-Teamsystem Bolonia

-2002 Kinder Bolonia-Benneton Treviso

-2003 Benetton Treviso-Siena

-2004 Siena-Skipper Bolonia

-2006 Tau-Barcelona

-2007 Tau-Unicaja

-2009 Panathinaikos-Olympiacos

-2012 Panathinaikos-Olympiacos



EN BUENA FORMA: Al margen de lo evidente que es el mero hecho de estar en una cita de esta trascendencia, una buena prueba de la situación de los equipos en momentos trascendentales es su rendimiento en el torneo copero, el cual en buena parte de Europa guarda similitudes con una final four. De los 4 participantes en Estambul, solo el Panathinaikos llega avalado por haber conseguido el triunfo copero…precisamente ante el Olympiacos. Con el Barcelona perdiendo como anfitrión la final ante el Real Madrid, el dato no pasa de anecdótico al sumársele la ausencia del Cska de una copa rusa que, tras la consolidación de la VTB, ha quedado reservada para los equipos de la segunda división.



Como dato cabe apuntar que el record data de la edición parisina de 2010 cuando los 4 participantes habían sido campeones coperos, en algo que si bien a primera vista puede parecer habitual no lo es tanto ya que Barcelona y CSKA habían logrado su ultima copa en 2007 y el Olympiacos en 2002… pero lo que realmente denota lo relevante del dato es que era la 1ª vez que esto ocurría, y es que desde que en 1988 se disputara la primera final four nunca sus cuatro participantes se habían proclamado ganadores de copa.



PARTICIPANTES EN FINAL FOUR /CAMPEONES COPEROS



Junto al año aparecen en mayúsculas los participantes en la final four y entre paréntesis el campeón copero en su liga ese año siempre y cuando no fuera el mismo.



1988: PARTIZAN (Cibona), MILAN (Caserta) MACCABI (H.Galil) ARIS

1989: JUGOPLASTIKA (Partizan), MACCABI, BARCELONA (Madrid), ARIS

1990: JUGOPLASTIKA, BARCELONA (Cai), LIMOGES *ARIS

1991: POP 84, BARCELONA, SCAVOLINI (Verona), MACCABI

1992: PARTIZAN, JOVENTUT (Estu) ESTUDIANTES, MILAN (Scavolini)

1993: LIMOGES* BENETTON R.MADRID PAOK(Panathinaikos)

1994: PANATHINIKOS (Oly) OLYMPIAKOS JOVENTUT (Barcelona)

BARCELONA

1995: R.MADRID (Tau), OLYMPIACOS- PANATHINAIKOS (Paok), LIMOGES*

1996: PANATHINAIKOS, BARCELONA-R.MADRID (Tdk), CSKA*

1997: OLYMPIACOS, BARCELONA (Joventut, VILLAURBANE, OLIMPIJA

1998: KINDER BOLONIA-BENETTON (Fortitudo), PARTIZAN (Buducnost), AEK (Aris)

1999: ZALGIRIS, KINDER BOLONIA, PAF BOLONIA (Kinder), OLYMPIACOS (Paok)

2000: PANATHINAIKOS (Aek), MACCABI, EFES (Tofas), BARCELONA (Estudiantes)

2001: PANATHINAIKOS (Aek), MACCABI, EFES PILSEN, CSKA*

2002: PANATHINAIKOS (Olympiacos), KINDER BOLONIA, BENETTON(Kinder), MACCABI

2003: BARCELONA, BENETTON, SIENA (Benetton), CSKA (Unics Kazan)

2004: MACCABI, SKIPPER-SIENA (Benetton) CSKA (Ural Great)

2005: MACCABI, TAU (Unicaja), CSKA, PANATHINAIKOS

2006: CSKA, TAU, BARCELONA (Tau), MACCABI

2007: PANATHINAIKOS, CSKA, TAU-UNICAJA (Barcelona)

2008: CSKA (Khimki), MACCABI (H.Jerusalem), Tau (Joventut), Siena (Avellino)

2009: PANATHINAIKOS, OLYMPIACOS (Panathinaikos), CSKA (Unics), BARCELONA (Baskonia)

2010: BARCELONA, OLYMPIACOS, PARTIZAN, CSKA

2011: SIENA, MACCABI, PANATHINAIKOS, REAL MADRID (Barcelona)

2012: PANATHINAIKOS, OLYMPIACOS (Panathinaikos), Barcelona (R. Madrid) CSKA



*En Francia los clubes de primer nivel no disputaron la copa hasta 1.995. En Rusia la primera edición se celebro en 2000 y la segunda hubo de esperar hasta 2.002, desde el año pasado la copa la disputan clubes de la segunda categoría.



EL FACTOR PISTA



Una de las notas más relevantes de las eliminatorias de cuartos de final de la temporada pasada fue la poca relevancia que tuvo la ventaja de campo, hasta el punto de que 3 equipos presentes en la final four no gozaron de ella. Pese a los problemas del Panathinaikos, esta temporada solo el Olympiacos, uno de los damnificados el año anterior, ha conseguido levantar esa losa para llegar a Istambul.

Desde que en 2005 la euroliga retomara los play off (en las ediciones de 2002, 03 y 2004 el primer clasificado del top 16 pasaba directamente a la final four) solo en tres eliminatorias se había producido semejante circunstancia: con el Tau eliminando a la Benetton en 2005 y al Panathinaikos en 2006 (en eliminatorias a tres partidos) y con el Partizan haciendo lo propio ante Maccabi la temporada pasada.

En la primera edición de la euroliga Uleb (2000/01), el Tau alcanzo la final tras superar tres eliminatorias con el factor pista y dejando por el camino en octavos de final al Peristeri (eliminatoria a 3 partidos) y en cuartos y semifinales, ya en eliminatorias a cinco, a Olympiacos y AEK. Esa misma temporada la Benetton de Treviso también se imponía en los octavos de final al Barcelona sin la ventaja de su lado.



Cabe resaltar que esta circunstancia había sido más habitual en los años Fiba, con la edición de 1997 como la más paradigmática llegando al extremo de que los 4 participantes en la final four (Olympiacos, Barcelona, Olimpija y Villaurbane) habían tenido en su contra el factor cancha en los cuartos de final e incluso tres de ellos (con la excepción del Villaurbane de Rudd y Digbeu que se deshacía del Estudiantes) ya lo habían hecho en los octavos de final.



EQUIPOS EN FINAL FOUR SIN VENTAJA DE PISTA



1992: Partizan, Milan

1993: -

1994: Joventut, Barcelona

1995: -

1996: Panathinaikos

1997: Olympiakos, Barcelona, Olimpija, Villaurbane

1998: Partizan (a favor en cuartos pero en contra en octavos)

1999: Kinder Teamsystem (en octavos)

2000: -

2001: -Suproliga, en euroliga Tau en octavos, cuartos y semis

2002: No hubo play-off

2003: No hubo play-off

2004: No hubo play-off

2005: Tau

2006: Tau

2007: -

2008: -

2009: -

2010: Partizan

2011: Siena, Panathinaikos, Maccabi

2012: Olympiacos



ENTRENADORES BALCANICOS



Una temporada más habrá presencia balcánica en los banquillos de la final four:





1988: Dusko Vujosevic (Partizan)

1989: Bozidar Maljkovic (Jugoplastica)

1990: Bozidar Maljkovic (Jugoplastica)

1991: Bozidar Maljkovic (Barcelona), Zeljko Pavlicevic (Pop 84)

1992: Zeljko Obradovic (Partizan)

1993: P. Skansi (Benetton), B.Maljkovic (Limoges), D.Ivkovic(Paok)

1994: Zeljko Obradovic (Joventut)

1995: Zeljko Obradovic (R.Madrid), B.Maljkovic(Limoges)

1996: Bozidar Maljkovic (Panathinaikos), Z.Obradovic (R.Madrid)

1997: Dusan Ivkovic (Olympiakos), Zmago Sagadin (Olimpija)

1998: Milan Bogojevic (Partizan) , Zeljko Obradovic (Benetton)

1999: Petar Skansi (Fortitudo), Dusan Ivkovic (Olympiakos)

2000: Zeljko Obradovic (Panathinaikos)

2001: Zeljko Obradovic (Panathinaikos)

2002: Zeljko Obradovic (Panathinaikos)

2003: Sveteslav Pesic (Barcelona), Dusan Ivkovic (CSKA)

2004: Dusan Ivkovic (CSKA), Jasmin Repesa (Fortitudo)

2005: Dusko Ivanovic (Tau), D.Ivkovic (CSKA), Z.Obradovic(PAO)

2006: Dusko Ivanovic (Barcelona), Velimir Perasovic (Tau)

2007: Zelljko Obradovic (Panathinaikos), B.Maljkovic (Tau)

2008: Neven Spahija (Tau)

2009: Zeljko Obradovic (Panathinaikos)

2010: Dusko Vujosevic (Partizan)

2011: Zeljko Obradovic (Panathinaikos

2012: Dusan Ivkovic (Olympiacos), Zeljko Obradovic (Panathinaikos)



RACHAS



Solo el Panathinaikos de Zeljko Obradovic ha sido capaz de repetir presencia en la final four de entre los cuatro equipos que el año pasado la disputaron en Barcelona, quedando muy lejos de la racha más triunfal:



8: Cska Moscú (2003-2010)

4: Tau Baskonia (2005-2008)

3: Maccabi (1988-1990 y 2004-2006)

Panathinaikos (1994-1996 y 2000-2002)

Jugoplastika (1989-1991)

Barcelona (1989-1991)


COTO PRIVADO

Llegar a una final four resulta complejo es algo que raya en lo evidente, pero con los datos en la mano parece aun más claro y es que, desde que en 2002 la ULEB organizara la final four ya de manera unificada, solo dos conjuntos (considerando que el Tau en 2005 no era un debutante al uso tras su subcampeonato en 2001) han debutado en la misma: el Siena en 2003 (repetiría en 04, 08 y 11) y el Unicaja en 2007. En esta edición el Panathinaikos llega como vigente campeón, mientras que Barcelona, Cska y Olympiacos habían estado presentes en la final four de Paris de 2.010. Un año antes, en 2.009, los mismos 4 equipos que han llegado a esta final four conformaron la edición germana.


FINAL FOUR LUSTROSA



Hasta 41 presencias en la final four acumulan los cuatro equipos que estarán presentes en la final four de Estambul, conformando así la edición más clásica de la historia del evento. De entre los cinco equipos más representados de la historia solo faltara el Maccabi de Tel Aviv. Si hablamos de entrenadores, salta a la vista otro detalle: por primera vez los 4 participantes en la final four ya saben lo que es ganarla. Por si fuera poco, entre Obradovic, Pascual, Kazlauskas e Ivkovic sumaran con lo de Istambul 25 presencias, siendo 13 de ellas de un Zeljko Obradovic que supera las del club más laureado. En cuanto a jugadores, sumando las presencias acumuladas obtenemos la impresionante suma de 73 final four acumuladas…



¿FINAL INÉDITA?



Pese a la continuidad que se aprecia en las últimas ediciones de la final four, solo una de las cuatro posibles combinaciones derivaría en una final con precedente histórico: Panathinaikos-Barcelona. En la historia de la final four, la final más repetida ha sido, con 3 ocasiones, un Maccabi-Panathinaikos (2000, 01 y 11) mientras que Barcelona-KK Split, Panathinaikos-Cska y Cska-Maccabi son las otras finales que se han repetido hasta en dos ocasiones. En cuanto a la historia global de la copa de Europa, el duelo más celebrado fue el sostenido entre Varese y Real Madrid que en la década de los 70 llegaron a encontrarse en el partido decisivo hasta en cuatro veces. Una menos (3) se dio la final Varese-Cska y Cska-Real Madrid. Por su parte el Ask Riga y el Akademic de Sofía se encontraron en las dos primeras finales, Real Madrid y Spartak de Brno en las del 64 y 68 y Maccabi y Milán en el 87 y 88.



En cuanto a la Recopa/uleb/Eurocup ninguna final cuenta con más de un precedente, mientras que en la Korac Limoges y Sibenik disputaron las finales del 82 y 83 con doble triunfo galo y Cantu y Partizan las del 74 y 89. Al margen de estas finales, algún duelo europeo sabe lo que es encontrarse en finales de distinta competición, de tal forma que el Real Madrid perdía sendas finales de Recopa y Copa de Europa ante la Cibona (82 y 85), las ganaba ante el Milan (67 y 84), el Cantu le deparaba un doble disgusto al Barcelona en Korac y Recopa (75 y 81) mientras que el Maccabi conseguía en 1977 su primera copa de Europa ante el Varese, vengando así la derrota en la primera final de la Recopa de la historia (1967).



Mayores derrotas de un futuro campeón de Europa:



El año pasado el Panathinaikos no solo se proclamo campeón sino que lo hizo demostrando una solidez envidiable, hasta el punto de que su mayor derrota se produjo por tan solo 7 puntos. Con el Barcelona acumulando solo una derrota en toda la temporada ¿es significativo el dato?



AÑO CAMPEÓN PEOR DERROTA PREVIA ESA TEMPORADA



58 Ask Riga -2 ante el CWKS Legia (cuartos final)

59 Ask Riga -8 ante el Honved Budapest (cuartos final)

60 Ask Riga Invicto

61 CSKA Moscú -5 ante el Ask Riga(vuelta final )

62 Bk Dinamo Tibilsi Invicto

63 CSKA Moscú -17 ante el R.Madrid (Final ida)

64 Real Madrid -11 ante el Spartak Brno (Final ida)

65 Real Madrid -17 OKK Beograd (vuelta sf)

66 Olimpia Milano -23 Slavia Praga (liguilla ¼)

67 Real Madrid -13 Slavia Praga (liguilla ¼)

68 Real Madrid -16 Spartak Brbo(liguilla ¼)

69 Cska Moscú -11 Real Madrid (liguilla ¼ en Moscú)

70 Varese -23 Cska Moscú (liguilla ¼)

71 Cska Moscú -15 Slavia Praga (sf ida)

72 Varese -8 Panathinaikos (sf vuelta)

73 Varese -21 CSKA (liguilla ¼)

74 Real Madrid -8 Radnicki (liguilla ¼)

75 Varese Invicto

76 Varese -9 Maes Pils

77 Maccabi -23 Varese (liguilla 1/2)

78 Real Madrid -16 Asvel Villaurbane (liguilla ½)

79 Bosna Sarajevo -27 Maccabi (liguilla ½)

80 Real Madrid -10 Maccabi (liguilla ½)

81 Maccabi -17 Nashua Den Bosch (liguilla ½)

82 Cantu -15 Partizan (liguilla ½)

83 Cantu -10 Maccabi (liguilla ½)

84 Roma -9 Bosna Sarajevo liguilla (½)

85 Cibona -9 Virtus Bolonia(liguilla ½)

86 Cibona -24 Milan (liguilla ½)

87 Tracer Milan -31 Aris (ida primera ronda)

88 Tracer Milan -25 Aris (liguilla 1/4)

89 Jugoplastika -13 Scavolini (liguilla ¼)

90 Jugoplastika -18 Maccabi (liguilla ¼)

91 Pop 84 Split -21 Aris (liguilla ¼)

92 Partizan -20 Estudiantes (liguilla 1/8)

93 Limoges -13 Virtus Bolonia (liguilla 1/8)

94 Joventut -24 Panathinaikos (liguilla 1/8)

95 Real Madrid -13 Scavolini y Panathinaikos (1/8)

96 Panathinaikos -24 Benetton (2º p. ¼)

97 Olympiacos -9 Estudiantes (1ªliguilla)

98 Kinder Bolonia -16 Olimpija Ljubljana (2ªliguilla)

99 Zalgiris -15 Fenerbahce (1ªliguilla)

00 Maccabi -12 Paok (2º 1/8)

01 Euroliga Kinder Bolonia -17 Tau (4º final)

01 Suproliga Panathinaikos -12 Cska (liguilla)

02 Panathinaikos -17 Olympiacos (top 16)

03 Barcelona -17 Cibona (liguilla)

04 Maccabi -11 Unicaja (liguilla)

05 Maccabi -12 Olimpija Ljubljana (liguilla)

06 Cska -10 Panathinaikos (liguilla)

07 Panathinaikos -21 Barcelona (top 16)

08 Cska -5 Unicaja (top 16)

09 Panathinaikos -25 Siena (liguilla)

10 Barcelona -7 Real Madrid (2º cuartos).

11: Panathinaikos -7 Baskonia (top 16)

Derrotas 2012: Barcelona (-3 Siena 1ªfase)

Cska (-13 Bilbao Cuartos)

Olympiacos (-32 Cska Top 16)

Panathinaikos (-16 Cska 1ª fase)





Ranking presencia en final four (equipos):



Barcelona 12 (1989, 90, 91, 94, 96, 97, 2000, 03, 06, 09 ,10 y 12)

CSKA 11 (1996, 2001, 03, 04, 05, 06, 07, 08, 09, 10 y 12)

Panathinaikos 10 (1994, 95, 96, 2000, 01, 02, 05, 07 , 09, 11 y 12)

Maccabi 11 (1988, 89, 91, 2000, 01, 02, 04, 05, 06, 08 y 11)

Olympiacos 7 (1994, 95, 97, 99,2009, 10 y 12)

Siena 4 (2003, 04 ,08 y 11)

Partizan 4 (88, 92 ,98 y 2010)

Tau Baskonia 4 (2005, 06, 07 y 08) *

Bennetton Treviso 4 (1993, 98, 2002 y 03)

Real Madrid 4(1993, 95 96 y 2011)

Virtus Bolonia 3 (1998, 99 y 2002) *

Jugoplastica 3 (1989, 90 y 91)

Limoges 3 (1990, 93 y 95)

Aris Salónica 3 (1988, 89, 90)

Joventut 2 (1992, 94)

Milán 2 (1988 y 92)

Fortitudo Bolonia 2 (1999 y 2004)

Efes Pilsen 2 (2000 y 01)

Con 1 presencia (Unicaja, Estudiantes, AEK Atenas, Paok, Villaurbane, Olimpia Ljubiana, Zalgiris Kaunas y Scavolini Pesaro)



MAS TITULOS HISTORIA COPA DE EUROPA



Real Madrid : 8 (1963–64, 65, 67, 68, 74, 78, 80 y 1994–95)

Cska Moscú: 6 (1960–61, 63, 69, 171, 06 y 20008)

Panathinaikos: 6 (1995-96, 2000, 02, 07, 09 y 2010–11)

Varese: 5 (1969–70, 72, 73, 75 y 1975–76)

Maccabi : 5 (1976–77, 81, 2000-2001, 04 y 2004–05)

Ask Riga: 3 (1957-58, 59 y 1959-60)

Milan: 3 (1965-66, 87 y 1987-88)

Jugoplastika: 3 (1988-89,90 y 1991)

Cantu: 2 (1981-82y 1983)

Cibona: 2 (1984-85 y 1986)

Virtus Bolonia: 2 (1997-98 y 2000-01)

Barcelona: 2 (2002-03 y 2009-2010)



1 titulo para Dinamo Tibilsi, Bosna Sarajevo, Roma, Partizan, Limoges, Joventut, Olympiacos y Zalgiris.


Ranking jugadores con más presencia en final four (sin incluir 2012)



- Fragiscos Alvertis 8 (Panathinaikos)

Theo Papaloukas 8 (CSKA y Olympiacos)

- J.R. Holden 8 (CSKA)

- Derrick Sharp 8 (Maccabi)

- Matjas Smodis 7 (Kinder, Skipper, Cska)

- Aleksei Savrasenko 7 (Olympiacos y CSKA)

- Tal Burnstein 7 (Maccabi)

- Nicola Vujcic 6 (Maccabi y Olympiacos)

- Trajan Langdon 6 (Benetton y Cska)

- Victor Khryapa 6 (CSKA)

- Halperim 6 (Maccabi, Olympiacos)

- David Andersen 6 (Kinder, Siena, CSKA y Barcelona)

- Andres Jimenez 5 (Barcelona)

- Panagiotis Giannakis 5 (Aris y Panathinaikos)

- Ricardo Pittis 5 (Milan y Benetton)

- Panagiotis Fassoulas 5 (Paok y Olympiacos)

- Johny Rogers 5 (Milán, Olympiacos y Panathinaikos)

- Anthony Parker 5 (Maccabi)

- Juan Carlos Navarro 5 (Barcelona)



Con 4: Rebraca, Jamchy, Gallis, Jasikevicius, Kukoc, Epi, Vrankovic, Tarlac, Prigioni, Vidal, Splitter, Mulaomerovic, Panov, McDonald, Drobnajk, Marconato, Diamantidis, Planinic, Fotsis, Batiste, Tsartsaris…



Ranking entrenadores con más presencia en final four (incluye 2012)



- Zeljko Obradovic 13 (Panathinaikos, Partizan, Joventut, Madrid, Benetton y Partizan)

- Etore Messina 8 (CSKA, Benetton y Virtus Bolonia)

- Bozidar Maljkovic 7 (Panathinaikos, Barcelona, Jugoplastica, Tau y Limoges)

- Dusan Ivkovic 7(Paok, Olympiakos y CSKA)

- Ioannis Ioannidis 6 (Aris, Olympiakos y AEK)

- Aito García Reneses 6 (Barcelona)

- Pini Gherson 5 (Maccabi)

- Zvi Sherf 3 (Maccabi)

- Xavi Pascual 3 (Barcelona)

- Con 2 Kazlauskas, Ataman, Vujosevic, Ivanovic, Skansi, Scariolo, Pianigiani, Giannakis y Blatt.



LOS MVP



2011: Dimitris Diamantidis (Panathinaikos)

2010: Juan Carlos Navarro (Barcelona)

2009: Vasilis Spanoulis (Panathinaikos)

2008: Trajan Langdon (CSKA)

2007: Dimitris Diamantidis (Panathinaikos)

2006: Theodoras Papaloukas (CSKA)

2005: Sarunas Jasikevicius (Maccabi)

2004: Anthony Parker(Maccabi)

2003: Dejan Bodiroga(Barcelona)

2002: Dejan Bodiroga(Panathinaikos)

2001: Euroliga Manu Ginobili(Kinder )

2001: Suproliga Ariel McDonald(Maccabi)

2000: Zeljko Rebraca(Panathinaikos)

1999: Tyus Edney(Zalgiris)

1998: Zoran Savic(Kinder Bolonia)

1997: David Rivers(Olympiacos)

1996: Dominique Wilkins (Panathinaikos)

1995: Arvydas Sabonis(Real Madrid)

1994: Zarko Paspalj (Olympiacos)

1993: Toni Kukoc(Benetton)

1992: Predag Danilovic(Partizan)

1991: Toni Kukoc(Pop 84 Split)

1990: Toni Kukoc (Jugoplastika)

1989: Dino Radja (Jugoplastica

1988: Bob McCadoo( Tracer Milan)



RECORDS




Más títulos copa de Europa (total): Dino Meneghin 7 (5 con Varese y 2 con Milan)



Ranking títulos copa de Europa Jugadores:



7

Dino Meneghin (1970, 1972, 1973, 1975, 1976 Varese, 1987, 1988 Milano)



5

Clifford Luyk (1964, 1965, 1967, 1968, 1974 Real Madrid)

Aldo Ossola (1970, 1972, 1973, 1975, 1976 Varese)

Fragiskos Alvertis (1996, 2000, 2002, 2006, 2009 Panathinaikos)



4

Wayne Brabender (1968, 1974, 1978, 1980 Real Madrid)

Cristobal Rodríguez (1967, 1968, 1974, 1978 Real Madrid)

Emiliano Rodríguez (1964, 1965, 1967, 1968 Real Madrid)

Lolo Sainz (1964, 1965, 1967, 1968 Real Madrid)

Carlos Sevillano (1964, 1965, 1967, 1968 Real Madrid)

Marino Zanatta (1972, 1973, 1975, 1976 Varese)

Sarunas Jasikevicius (2003 Barcelona, 2004 ,2005 Maccabi, 2009 Panathinaikos)



Entrenador con más títulos: Zeljko Obradovic 8 (5 Panathinaikos, 1 con Partizan, Joventut y Real Madrid)



4 títulos

Pedro Ferrandiz (1965, 1967, 1968, 1974 Real Madrid)

Alexander Gomelsky (1958, 1959, 1960 ASK Riga; 1971 CSKA)

Bozidar Maljkovic (1989, 1990 Split; 1993 Limoges; 1996 Panathinaikos)

Ettore Messina (1998, 2001 Kinder Bologna; 2006, 2008 CSKA)



3

Aleksandar Nikolic (1970, 1972, 1973 Varese)

Pini Gershon (2001, 2004, 2005 Maccabi)



2

Evgeny Alekseyev (1961, 1963 CSKA)

Valerio Bianchini (1982 Cantu; 1984 Virtus Roma)

Sandro Gamba (1975, 1976 Varese)

Zeljko Pavlicevic (1986 Cibona; 1991 Split)

Lolo Sainz (1978, 1980 Real Madrid)



Más títulos Final four: Fragiscos Alvertis 5 (Panathinaikos)



Más títulos “era ULEB” Sarunas Jasikevicius 4 (Barcelona 2003, Maccabi 04 y 05 y Panathinaikos 09)



Más puntos en una final copa de Europa: 45 Zarko Varajic (Bosna Sarajevo) 1979



Más puntos en un partido : 99 Radivoj Korac 1965



Más puntos en un partido Liga Europea (desde 1992): 63 Joe Arlauckas-Real Madrid 1996



Más puntos en un partido Final four: 43 Nicos Gallis (Aris Salónica) 1990 3 y 4º en Semis Bob McCadoo 39 en 1988


Más puntos en una final (era final four): 27



Zoran Savic (Jugoplastika-1991)

Antoine Rigadeau ( Kinder- 1999

Dejan Bodiroga (Panathinaikos- 2001)

Manu Ginobili (Kinder 2002)



Más puntos en una final four Nicos Gallis 69 Aris-1990



Más rebotes en un partido de Final Four:



19 Darryl Dawkins (Milan) 1992

Stojan Vrankovic(Panathinaikos) 1994



Más rebotes en una final 15 Maceo Baston (Maccabi 2006)

Stefano Rusconi (Benetton 1993)



Más rebotes en una final four: 30 Roy Tarpley (Olympiacos 1994)



Más asistencias en un partido de Final Four: 12 Terrel McIntyre (Siena 2008)



Más asistencias en una final 9 Ariel McDonald (Maccabi 2001) y Dimitris Diamantidis (Panathinaikos 2011)



Más asistencias en una final four 18 Dimitris Diamantidis (Panathinaikos 2011)



Más triples en un partido de Final Four: 6 Gundars Vetra (CSKA) 1996

Terrel McIntyre (Siena) 2008



Más triples en una final 5 Aleksandar Djordjevic (Partizan 92)

Antoine Rigadeau (Kinder 99)

Dorom Jamchy (Maccabi 89)



Más recuperaciones en una final: 5 Antoine Rigadeau (Kinder 1998)



Más recuperaciones en un partido de final four: 6 Chuck Eidson (Maccabi 2010)



Más valoración en un partido final four (desde 2002): 36 Marcus Brown (CSKA) 2004



Más valoración en una final (desde 2002):



34 Anthony Parker (Maccabi) 2004

Manu Ginobili (Kinder Bolonia) 2002



Más valoración en una final four (desde 2002) TOP 5:



Dejan Bodiroga (Panathinaikos) 2002 60

Marcus Brown (CSKA) 2004 59

Terrel McIntyre (Siena) 2008 55

Theo Papaloukas (CSKA) 2006 51

Theo Papaloukas (CSKA) 2007 50

Trajan Langdon (CSKA) 2010 50

Chuck Eidson (Maccabi) 2011 50



RECORDS TOTALES ERA ULEB (DESDE 2001)



Más valoración en un partido TOP5



Tanoka Beard (Zalgiris) 63 (Skipper-Zalgiris 03/04)

Jaka Lakovic (Novo Mesto) 55 (R.Madrid-Novo Mesto 01/02)

Dejan Milojevic (Partizan) 55 (Partizan-Olympiacos 04/05)

Marko Popovic (Cibona) 54 (Cibona-Estudiantes 04/05)

Jaka Lakovic (Panathinaikos) 51 (Benetton-Panathinaikos 03/04)



Más valoración en una temporada: 597 Anthony Parker (Maccabi 04/05)





Más valoración carrera Top 5:



Nicola Vujcic 3.045

Marcus Brown 2.734

Juan Carlos Navarro 2.722

Jaka Lakovic 2.576

Antoine Batiste 2.532



Más puntos en un partido: 41 Kaspars Kambala

Carlton Myers

Alphonso Ford



Más puntos carrera TOP 5:



Juan Carlos Navarro 2.840

Marcus Brown 2.715

Jaka Lakovic 2.524

Nicola Vujcic 2. 444

J.R. Holden 2.388





Más rebotes en un partido: 24 Antonis Fotsis (Dinamo Moscú)



Más rebotes carrera: Mirsad Turckan 1.287



Más asistencias en un partido: 14 Theo Papaloukas

Tyus Edney



Más asistencias carrera: Theo Papaloukas 937



Más triples en un partido: 9

Saulius Stombergas (9/9)

Thomas Kelati (9/19)

Mirza Teletovic (9/13)



Más triples carrera: Gianluca Basile 381



Jugador con más presencia en TOP 5: Jaka Lakovic, puntos, asistencias, valoración y triples.



Máxima anotación equipo Top 5:



123 Panathinaikos

118 Panathinaikos, Maccabi, Zadar

117 Fortitudo Bolonia



Más puntos anotados (equipo):



Baskonia 20.526

Maccabi 19.582

Barcelona 19.554





GALARDONES


MVP TEMPORADA



2001: Nate Huffman (Maccabi Tel Aviv) Dejan Tomasevic (Buducnost)

2002: Mirsad Turckan (Cska)

2003: Joe Blair (Ulker) Fase regular Mirsad Turckan (Siena) (Top 16)

2004: Arvydas Sabonis (Zalgiris Kaunas)

2005: Anthony Parker (Maccabi Tel Aviv)

2006: Anthony Parker (Maccabi Tel Aviv)

2007: Theo Papaloukas (Cska Moscú)

2008: Ramunas Siskauskas (Cska Moscú)

2009: Juan Carlos Navarro (F.C.Barcelona)

2010: Milos Teodosic (Olympiacos)

2011: Dimitris Diamantidis (Panathinaikos)



MEJOR DEFENSOR



2005: Dimitris Diamantidis (Panathinaikos)

2006: Dimitris Diamantidis (Panathinaikos)

2007: Dimitris Diamantidis (Panathinaikos)

2008: Dimitris Diamantidis (Panathinaikos)

2009: Dimitris Diamantidis (Panathinaikos)

2010: Victor Khryapa (Cska Moscú)

2011: Dimitris Diamantidis (Panathinaikos)

2012: Andrei Kirilenko (Cska Moscú)



NIJT


Como en los últimos años, la fase final del NIJT será uno de los platos fuertes del fin de semana y un escaparate inmejorable para contemplar las evoluciones de alguno de los mejores jugadores junior de Europa. Tras los torneos previos de, Belgrado, Roma, Kaunas y Hospitalet el cartel ha quedado configurado de la siguiente forma:



Grupo A: Estrella Roja, Anadolou Efes, Barcelona y Lietuvos Rytas

Grupo B: Team China, Kk Zagreb, Zalgiris, Fenerbahce.



Los partidos se disputaran en el Api Ipecki, excepto la final que tendrá lugar en el propio Sinan Erdem.



Calendario: http://www.euroleague.net/events/nike-international-junior-tournament/istanbul



PALMARÉS DE LA COMPETICIÓN



2003 Barcelona

Campeón: Zalgiris Kaunas

Finalista: Maccabi Tel Aviv

MVP: Rolandas Alijevas (Zalgiris)



2004 Tel Aviv

Campeón: CSKA Moscú

Finalista: Montepaschi Siena

MVP: Vasiliy Zavoruev (CSKA)



2005 Moscú

Campeón: CSKA Moscú

Finalista: Zalgiris Kaunas

MVP: Vasiliy Zavoruev (CSKA)



2006 Praga

Campeón: CSKA Moscú

Finalista: Zalgiris Kaunas

MVP: Ivan Nelyubov (CSKA)



2007 Atenas

Campeón: Zalgiris Kaunas

Finalista: FMP

MVP: Donatas Motiejunas



2008 Madrid

Campeón: FMP

Finalista: Axa FC Barcelona

MVP: Dejan Musli



2009 Berlín

Campeón: FMP

Finalista: Lietuvos Rytas

MVP: Dejan Musli



2010 París

Campeón: INSEP

Finalista: FMP

MVP: Livio Jean-Charles



2011 Barcelona

Campeón: KK Zagreb

Finalista: Zalgiris Kaunas

MVP: Dario Saric


FC BARCELONA-OLYMPIACOS








Dos años después de protagonizar la final de de Paris, Barcelona y Olympiacos vuelven a encontrarse en una final four, tras una temporada en la que han mostrado caminos muy dispares. Por un lado un Barcelona casi intratable desde el inicio en Europa pero perseguido por ciertas dudas sobre su juego y por el otro un renovado Olympiacos que tras un titubeante inicio de temporada llega a Estambul en su mejor momento. Dos plantillas largas y experimentadas parecen asegurar una semifinal de alto voltaje físico y alta exigencia mental.



Precedentes:





Esta temporada: Inédito

En Final four: 2-1 Barcelona

Historia copa de Europa: 9-4 Barcelona

Otras competiciones europeas: Inédito











Si nos atenemos a los precedentes, el Barcelona Regal presenta un balance favorable en sus enfrentamientos al Olympiacos, en un dominio sustentado especialmente en sus últimos cara a cara. El primer enfrentamiento entre cules y el equipo del Pireo data de la temporada 93/94, donde en la liguilla de octavos ambos equipos se repartían los triunfos como locales: 73-69 en el Palau (21 tantos de Epi y 29 de Paspalj como máximos anotadores) y 82-64 en el Pireo con 26 tantos de Roy Tarpley. La temporada siguiente la historia se repetiría con un nuevo reparto de triunfos locales: 99-78 en Atenas con 27 puntos de Eddie Johnson y 79-64 en la ciudad condal con 16 tantos de Darryl Middleton. En la era Uleb, el primer duelo data del top 16 con doble triunfo blaugrana, siendo especialmente vital el 55-58 en el Pireo donde 17 puntos de Gregor Fucka encarrilaban el pase a la final four del conjunto de Sveteslav Pesic. En esta nueva era, el único triunfo del cuadro rojo se remonta a la 2005/06, cuando los jugadores de Kazlauskas se imponían por 80-68 con 18 tantos de Zizic en el encuentro de la primera fase, en una temporada donde el Barcelona se llevaría sus otros tres enfrentamientos (volvían a coincidir en el Top 16). Pero evidentemente, la historia del duelo catalana-heleno ha vivido sus páginas más trascendentales bajo el manto de la final four donde se han enfrentado tres veces, una de ellas, eso sí, poco menos que intrascendente como fue la victoria cule en el partido de consolación de 2009. Los otros dos cara a cara tuvieron lugar en sendas finales. La primera de ellas en 1997 tras una temporada irregular de ambas escuadras hasta el punto de que Barcelona y Olympiacos arrancaron ya desde los octavos de final con el factor pista en contra derrotando respectivamente a Alba de Berlín y Partizan. En la final tras un primer tiempo igualado, la segunda parte fue de claro color rojo donde los hombres de Dusan Ivkovic perfectamente dirigidos por David Rivers se alzaban con su primera euroliga derrotando al Barcelona por 15 puntos (73-58) en lo que era la mayor diferencia en una final desde la de 1963 (e incluso en aquella ocasión hubo de celebrarse partido de desempate). Trece años después, el F.C Barcelona se resarcía de aquella derrota destrozando al Olympiacos por 86-68, culminando así una temporada realmente excepcional.







F.C. BARCELONA













Campeón de Europa: 2 (2003 y 2010)

Subcampeón de Europa: 5 (1984, 90, 91, 96 y 97)

Final Four: 12ª (1989, 90 ,91, 94, 96, 97, 2000, 03, 06 , 08 y 10)

Otros títulos europeos: 4, 2 Korac (1987 y 99) y 2 Recopas (1985 y 86)

Ligas: 16

Copas: 21



Esta temporada:



Fase regular: 1º Grupo D 9-1

TOP 16: 1º Grupo H 6-0

Cuartos de final: 3-0

Total: 18-1





Tras la decepción de quedarse fuera de “su” final four la temporada pasada, el F.C.Barcelona llega a Istambul convertido en el equipo con más presencias en la historia del torneo y lo hace además avalado por unos números excelsos. Llegar a la final four con el mejor balance desde que el Cska alcanzara la de 2005 (19-1…el ultimo campeón invicto se remonta al Varese de 1975), haber encajado más de 70 puntos solo en tres ocasiones o ser el único equipo capaz de solventar como invicto el top 16 y la serie de cuartos de final, deberían ser argumentos poco menos que definitivos como para colocar al Barcelona como el gran favorito para llevarse la final four. Sin embargo el conjunto cule sigue suscitando alguna que otra duda más relacionadas con el juego que con los resultados. Intachable en Europa, la clara derrota en la final copera ante el R.Madrid o el hecho de encadenar dos derrotas consecutivas en la liga acb ante equipos más modestos (Banca Civica y Gran canaria) pesan ligeramente en la imagen de un equipo que en cierta medida pelea contra si mismo o al menos contra la maravillosa imagen que proyecto en 2010.



Con unos números defensivos espectaculares, el equipo de Pascual se muestra extremadamente sólido atrás pero salvo momentos puntuales ha adolecido de la agresividad exterior que tan buenos réditos le diera en el pasado. A consecuencia de ello, el conjunto blaugrana ha tenido problemas para jugar en transición lo que unido a una vocación por un juego más controlado ha derivado en una versión menos arrolladora y en cierta dificultad para cerrar algunos partidos francamente cómodos. Al margen del estilo de juego, los problemas físicos de sus aleros, la inadaptación de un Marcelino Huertas algo incomodo y la novedosa política de descartes en el ámbito domestico (los dos últimos años las lesiones de Barton y Mickael facilitaron la gestión del overbooking) han sido otro de los aspectos que bien pudiera haber evitado el definitivo vuelo barcelonista. En el aspecto positivo, la excelente temporada de Erazem Lorbek y la progresiva aportación de la segunda unidad han facilitado las cosas a un equipo donde Juan Carlos Navarro parece en vías de recuperar sus mejores sensaciones. Por lo demás, sensaciones subjetivas aparte, resulta evidente que la longitud de plantilla, la calidad del esqueleto base y la probada solvencia defensiva convierten al club blaugrana en un enemigo temible, dispuesto a mostrar su mejor cara en el momento clave del año.





EL APUNTE HISTORICO



EL ÉXITO DE LA CONTINUIDAD













Fundado en 1.926 la sección baloncestistica del FC Barcelona nunca tuvo una

singladura fácil, de tal manera que incluso en 1961 estuvo al borde de la desaparición. Sin peso en los primeros años, el Barcelona se establecería como una de las potencias baloncestisticas de los años 40, logrando cinco copas y la primera liga disputada a nivel nacional, aunque esta finalmente quedara en el olvido y ya no se retomara con el formato definitivo hasta 10 años después.

En el seno ya de la Liga nacional, el Barcelona se llevaría su tercera edición, la de 1959 de la mano de históricos como Canals, Bonareu, Buscato, Miro o los Martínez. Sin embargo, lejos de ser un presagio de tiempos mejores, el titulo liguero fue el comienzo de una larga travesía del desierto. Tras un par de dobletes madridistas, el presidente del club, Enrique Llaudet, decide disolver la sección ya que esta no estaba en condiciones de competir por los objetivos mínimos estimados por la directiva. Finalmente, el club continúa en categorías inferiores y logra el ascenso de nuevo a la liga nacional, pero en 1964 vuelve a perder la categoría, esta vez en la pista. Tras recuperar de nuevo su status, los blaugranas pasan sin pena ni gloria por el torneo hasta que en 1972, con Xavier Añua en el banquillo logran el subcampeonato liguero. Mediados de los años 70 y de la mano de Eduardo Portela en la dirección y de Ranko Zeravica en el banquillo, el Barcelona comienza a priorizar su cantera y a sembrar las semillas de sus primeros éxitos. Con todo, y tras varios subcampeonatos, el primer título no llegaba hasta 1978

en forma de copa con Kucharski en el banquillo. Convertido en dominador copero, el primer titulo liguero llega en el 81, el siguiente no se hace esperar tanto y llega en el 83, dando paso a la Copa de Europa de 1984, donde ante la Roma, el Barcelona se topa con su primera gran decepción en la máxima competición continental. Antes, la mejora domestica ya había tenido sus primeros reflejos europeos con sendas finales perdidas ante el Cantu: en el 75, todavía con Zeravica en el banco, el Barcelona abría la final cayendo en el Palau por 69-71 en un partido donde los italianos habían llegado a manejar ventajas superiores a los 10 puntos. Ya en la vuelta, los hombres del “científico” Taurisano no daban opción venciendo por un claro 110-85 con 27 puntos de Pier Luigi Marzorati. Seis años más tarde, en la Recopa, el club italiano volvía a ser el verdugo de un cuadro blaugrana, ahora entrenado ya por Antoni Serra, al imponerse por 86-82, dejando en estériles los 28 puntos de Epi. Por parte de los de Bianchini, el reparto ofensivo de los Marzorati, Riva, Flowers o Boswell resultaba clave.



Tras las decepciones ante las escuadras italianas, el club blaugrana iba a conocer al fin la gloria Europa encadenando tres títulos continentales: las recopas del 85 y 86 ante Zalgiris y Scavolini y la Korac del 87 ante el Limoges. Con Manolo Flores al frente en la primera de ellas, las dos siguientes llegan ya bajo la manija de una de las figuras clave de la historia barcelonista: Aito García Reneses. Tras su buen papel en la Penya y sus dos títulos europeos, en el 87 Aito dirige al Barcelona que de la mano de la recodada canasta de Kenny Simpson reconquistaba en Badalona (los cules habían eliminado al Madrid en semifinales) el título liguero abriendo una etapa de dominio que en cierta forma dura hasta nuestros días (13 de las últimas 25 ligas). Reconquistado el poder liguero, bajo la dirección de Aito el Barcelona encadenaba por primera vez 4 títulos, la gran asignatura pendiente pasaba a ser la Copa de Europa…convirtiéndose en una herida que no se cerraría hasta 2003. La Jugoplastika por tres veces, el Joventut, los colosos griegos…el Barcelona acababa por chocar en la fase más decisiva del año abriendo un debate encendido entre los que achacaban al equipo falta de competitividad y los que valoraban el éxito de estar en la pomada año tras año. Ahora con dos títulos en las vitrinas, el viejo debate se observa con más indulgencia y el que el Barcelona se haya convertido en el club con más presencias en la final four es visto como el reflejo del trabajo bien hecho…de tal manera que quizás los verdaderos fracasos estuvieron en aquellos años en el que el club no consiguió llegar a la final four. Entre ellos, varios llaman especialmente la atención por ser especialmente dolorosos: el de la temporada pasada y el del 98 por celebrarse la gran cita en el Palau Sant Jordi y, sobre todo, la casi inexplicable ausencia de la primera final four de la historia. Con sus recientes éxitos europeos como aval, el conjunto blaugrana partía como uno de los grandes favoritos del torneo añadiendo a su extraordinaria plantilla nacional (Solozabal, Epi, Sibilio, Jiménez, Costa, Ferran...) a un Audie Norris que habías deslumbrado en sus dos temporadas en Treviso. Marcado por los problemas físicos de este ultimo, el conjunto de Aito arrancaba la competición domestica con varias derrotas que habría de unirse a las cuatro cosechadas en las primeras cuatro de la propia Copa de Europa. Tratar de analizar la trayectoria cule en este torneo obliga a tirar de calificativos tan manidos, ¿y erróneos?, como el de kafkiano. De entrada, los de Aito caían en Tel Aviv por 108-107 pese al 7/7 en triples de Sibilio, en un partido que dominaban claramente a escasos momentos del final y donde la baja de Kevin Magee acabaría de ser suplida por los 36 puntos de Ken Barlow y los 34de Jamchy. Lastrados por ese mazazo, y por los 45 puntos de Galis, el barça repetía guión en su pista ante el Aris entrando en una dinámica atroz, que incluía otra inesperada derrota en Colonia ante el Saturn. Con solo diez años de historia, el equipo alemán se presentaba como el espejo de su entrenador, un Tony Di Leo sin el que no se podría entender la singular trayectoria del Saturn. Miembro en la actualidad del organigrama de los Sixers, equipo que llevo a los play-off tras sustituir de manera interina a Mo Cheeks en la temporada 2008/09, Di Leo había llegado al club de Colonia tras dirigir al conjunto femenino del DJK Dusseldorf al que conseguía llevar a siete títulos ligueros y una Copa de Europa, a la par que se hacía con las riendas de la propia selección femenina. Tras disipar las dudas de su adaptación al basket masculino en la temporada anterior, el técnico de Philadelphia moldeaba un equipo rápido, alegre y atrevido como pocos, tan capaz de presionar a toda pista como de bombardear el aro rival sin ningún tipo de miramiento en un poético desprecio del reloj de posesión. Con una buena pareja norteamericana formada por el eléctrico Bryan Warrick y el sobrio y eficaz Ralph McPherson, el Saturn completaba su columna vertebral con el canadiense nacionalizado Richard Hunger (que había pasado por Ferrol y Alcalá de Henares) y con internacionales como Gnad, Baeck o, el que sin duda era la gran estrella del equipo, Michael Jackel. Dotado de una zurda exquisita, Jackel compartía origen canadiense con Hunger y llegaba a la presente edición de la Copa de Europa en plena madurez baloncestistica tras realizar un espectacular eurobasket en Atenas. Al igual que dos años antes, el cuadro germano había caído en los cuartos de final ante España, casi en ambos casos habría que decir ante Epi, pero a nivel individual, Jackel había llevado su juego hasta nuevas cotas, batiendo incluso el record de puntos con la selección al anotar 42 puntos en el triunfo ante Israel, en una marca que perduraría hasta el partido por el bronce del eurobasket 2001 con los 43 de Dirk Nowitzki (cinco años más tarde ante Angola, el propio jugador de los Mavs se iría hasta los 47). Con estas premisas, el Saturn comenzaba su periplo destrozando al vigente campeón (Tracer Milan)por un claro 102-78 con 32 puntos de Jackel, pese a lo cual la victoria ante los blaugrana se convertía en un verdadero bombazo.

Tras caer ante el Partizan en el Palau, el Barcelona comenzaba su salida del pozo, venciendo en Milán con un Epi imperial...antes de caer en Francia ante un pobre Pau. La segunda vuelta dejaba la mejor versión de un equipo que destrozaba a Maccabi o Tracer y que conseguía asaltar la hasta entonces, poco menos que imposible pista del Aris en un esfuerzo finalmente baldío pues cuando la situación parecía encarrilada dos derrotas consecutivas, una asumible en Belgrado y otra increíble en Holanda, dejaban al conjunto cule con la miel en los labios en favor de un Maccabi que en la ultima jornada no fallaba ante un apático Partizan.



Con la perspectiva adecuada, y sin urgencias históricas, es posible que el Barcelona y el barcelonismo, debiera afrontar la cita otomana con la mente clara, consciente de lo difícil y meritorio que es llegar a una final four, para quien sabe si así encarar en mejor disposición la gran cita del año.









LOS JUGADORES











Tercer jugador mejor valorado del Barcelona en la euroliga, Marcelino Huertas no esta teniendo sin embargo una fácil adaptación a su nuevo medio. Marcado por ciertas dificultades defensivas, el brasileño no esta consiguiendo jugar con la soltura y desparpajo habituales. Incomodo con el ritmo de juego, Huertas ha encontrado sus mejores minutos cuando ha tenido espacio para la transición, explotando su buena visión de juego o su facilidad para generar puntos en campo abierto. Mejor pasador del equipo, el brasileño esta lanzando además con bastante acierto desde el triple (43%) a la par de seguir siendo uno de los jugadores con más facilidad para conseguir canastas imposibles (bombas, tiros a una pierna…) del viejo continente. Hace algo menos de dos años, también en el Sinan Erden, Huertas puso contra las cuerdas a la Usa de Durant y a la Argentina de Scola, ahora con que solo se acerque un poco a ese nivel de frescura su papel podría ser clave. Junto al brasileño, Victor Sada conforma un puesto de base menos numeroso que en pasadas campañas, lo que quizás, junto a su participación en el eurobasket, ha llevado al catalán a mostrar una menor exhuberancia física algo que en las últimas jornadas parece haber remitido. Jugador de plena confianza de Xavi Pascual, Sada sigue mostrándose como un gran defensor en el uno contra uno a la par que el jugador indicado para cambiar el ritmo de juego desde la defensa. Dotado de un espectacular salto que le permite ayudar en el rebote, ofensivamente le cuesta tomar responsabilidades (5 puntos anotados entre el top 16 y los cuartos de final) en parte por su falta de confianza en el tiro y en parte por cierta falta de, pese a sus buenas piernas, capacidad para atacar el aro (solo 4 tiros libres lanzados en la euroliga).



Castigado por una recurrente fascitis plantar, Juan Carlos Navarro ha vivido una temporada complicada donde a los problemas físicos se le ha unido el lógico bajón mental tras su increíble eurobasket de Polonia. Tras firmar tres últimos partidos antológicos que le llevaron a un Mvp buscado, no resulta extraño que, en un jugador como Navarro que siempre se ha movido por sensaciones le haya sido complicado enchufarse a la temporada. Con todo, llegada la hora de la verdad, el mejor Navarro ya ha empezado a vislumbrase con una muy buena serie de cuartos ante el Unics de Kazan. Jugador casi sin parangón en el basket europeo por su extremada facilidad ofensiva, Navarro no esta presentando grandes porcentajes en el tiro exterior, pero su capacidad de generarse tiros desde casi cualquier rango y casi de cualquier forma, le siguen convirtiendo en una amenaza que se multiplica gracias a su facilidad para crear juego en el 2*2. Sin nada ya que demostrar, si el físico le permite llegar en buenas condiciones, Navarro tiene números para pelear por repetir el MVP de 2010, aunque para ello deberá mantener la cabeza fría ante la presumible dureza de sus oponentes. Recuperado de la lesión que sufrió en la final de la copa, Chuck Eidson se postula como otra de las claves para que el Barcelona pelee por su tercera euroliga. De extremada polivalencia, Eidson ha llegado a tener minutos como base en la primera mitad de temporada o incluso como 4 en los últimos minutos de la primera parte de la final copera (algo que sin las restricciones de cupos parece improbable en la euroliga) cumpliendo siempre con su rol aunque quizás sin la brillantez o continuidad que algunos esperaban. Excelente en la concepción del juego y el manejo de los amagos, Eidson ha visto limitado en ocasiones su rol ofensivo al papel de tirador exterior, donde nunca ha sido un especialista (pese a ello presenta un buen 18/47 en triples). Excelente defensor con una especial intuición para el robo, el norteamericano posee además un excelente tren inferior que, junto a su dominio del cuerpo, le permiten finalizar con mucha potencia. La tercera gran referencia del perímetro la encarna un Pete Mickael en plena lucha por volver a ser el jugador de hace dos temporadas. Menos potente físicamente, Mickael sigue mostrándose solvente en el apartado defensivo pero sufre más de que antaño en el poste bajo. Con dificultades para desarrollar el juego en campo abierto, el ex del Tau esta mostrando en cambio unos excelentes porcentajes de tiro exterior que unidos a su probada competitividad a buen seguro le hacen un baluarte en Istambul. Peleando por la cuarta plaza de la rotación, Joe Ingles y Xavi Rabaseda han vivido una temporada de altibajos, en la que en las últimas semanas parece salir fortalecido el australiano. Jugador muy completo, Ingles se esta revelando como un muy buen defensor lo que unido a su buena lectura de juego le convierten en un jugador cuyo papel parece ir in crescendo. Capaz de lo mejor y lo peor con su zurda desde el 6´75, la toma de decisiones sigue siendo su punto flaco. Junto a Ingles, completa la rotación un Xavi Rabaseda desaparecido en el inicio de la temporada pero al que los problemas físicos de Mickael, Eidson o Navarro otorgaron un espacio que el canterazo supo aprovechar. Potente físicamente, se muestra irregular en el tiro exterior pero muy potente en las penetraciones.



Definitivamente asentado como 4, Erazem Lorbek esta firmando una excepcional temporada que le ha convertido probablemente en el jugador más regular y fiable del actual Barcelona. Tirando de inteligencia y colocación, el esloveno ha conseguido minimizar los daños en la defensa a jugadores más rápidos a la par que en ataque domina en el poste bajo gracias a su inabarcable repertorio de movimiento de pies. Solvente de cara al aro (por encima del 40% en triples), Lorbek ayuda además a la circulación de balón gracias a su concepto de juego ya que, pese a no ser un pasador especialmente creativo, posee una muy buena lectura del 5*5. El descanso para el de Ljubljana, llega de la mano de un C.J. Wallace un tanto encasillado en su función de jugador abierto. Irregular en el tiro (31% en triples), el ex de Gran Canaria y Benetton rara ve esta usando su capacidad para poner el balón en el suelo y atacar el aro. Defensivamente sufre en el uno contra uno y tiende a padecer despistes en la defensa colectiva aunque su pelea en el rebote y su actividad le convierten, en ese aspecto, en una pieza valiosa. En el puesto de 5, la profundidad de la plantilla blaugrana ha derivado en que sus tres torres hayan tenido distintas fases de protagonismo a lo largo de la temporada, aunque finalmente su aportación estadística haya resultado muy similar (7´1 de valoración para Perovic y N´Dong y 6´4 para Vázquez). En le inicio de temporada, sobre todo en acb, Boniface N´Dong se encarno en el gran protagonista disipando las dudas sobre su renovación, mostrando un rendimiento impropio de su edad. Aunque con el paso de los meses, su juego ha caído un tanto, el senegales sigue siendo un claro activo en las continuaciones y a través de los tiros cortos. Buen taponador y aceptable intimidador, su falta de peso en el 1*1 y sus blandas manos son, quizás, su mayor handicap. Descarte habitual en las primeras semanas en la liga endesa, Kosta Perovic ha ido recuperando el tono físico hasta el punto de mostrarse como el pivot más resolutivo de los de Pascual en la euroliga (misma valoración media que N´dong pese a jugar menos minutos que este y que el propio Vázquez). Especialista ofensivo, si tiene el día puede anotar con continuidad a través de ganchos, continuaciones o tiros cortos, pero junto a momentos de fluidez alterna otros de absoluta desaparición. Defensivamente, sin ser un pilar, se hace grande y aguanta relativamente bien el contacto. Tras unos meses algo desubicado, Fran Vázquez parece llegar en su mejor momento del año a la final four. Su buena sintonía con Navarro y Huertas le permiten ofrecer una solución de contundencia, a la par que muestra una mejora en la continuidad del juego. Mejor recibiendo de cara, bien para matar o tirar de cuatro/cinco metros, el valor del gallego se medirá atrás donde, cuando esta entonado, puede ser clave por su capacidad de intimidación como bien mostrará en la final de hace dos temporadas.



EL ENTRENADOR: Tercera final four en su quinta tentativa, no cabe duda de que la carrera de Xavi Pascual dista de ser la habitual en un entrenador de tan corta trayectoria. Serio y trabajador, Pascual se ha revelado como un gran preparador de partidos amen de mantener en líneas generales una muy buena dinámica de grupo con los roles bastante definidos y de inculcar una excelente línea defensiva al equipo. En el aspecto menos positivo, en ciertos momentos le ha costado ir a contrapié lo que en momentos complicados ha terminado por afectar a su capacidad para rotar a sus jugadores. Con el desgaste propio de un club tan grande, la eliminación ante el Panathinaikos el año pasado le ha pasado cierta factura, lo que unido a un estilo ofensivo cada vez más controlado y rígido han puesto en entredicho alguna de sus decisiones. La derrota copera como anfitrión ante un Real Madrid erigido en adalid de un estilo diametralmente diferente acabo de poner más presión en una olla ahora aliviada con la cómoda clasificación para una final four, donde Pascual tendrá una prueba de fuego ante alguna de las pizarras más prestigiosas de Europa.







LOS NÚMEROS (entre paréntesis los jugadores más destacados)



PUNTOS: 75´4 (Lorbek 13´8, Navarro 13´4, Mickael 9´8)

REBOTES: 35 (Lorbek 4´7, Mickael 4´3, Eidson 3´5)

ASISTENCIAS: 15´84 (Huertas 4´6, Navarro 3´2, Eidson 2´6)

TAPONES: 3´84 (N´Dong 1´2, Vázquez 1´1, Perovic 0´9)

VALORACION: 89´52 (Lorbek 16´3, Navarro 13´1, Huertas 10´7)

TIROS DE 2 %: 50´6 %

TIROS DE 3 %: 35´5 %

TIROS LIBRES: 78´9 %



EL JUEGO



ATAQUE



RITMO: Punto recurrente al valorar al Barcelona de esta temporada. Salvo contadas excepciones (Palau ante el Siena, en Kazan la primera fase..) al Barcelona de esta temporada le esta costando ya no solo correr, algo que seguramente no busca con determinación, si no subir las pulsaciones a los partidos. Recuperar un mayor grado de riesgo/agresividad atrás, como parecen estar buscando algo más estas últimas semanas, puede ser el paso que necesiten los de Pascual para verdaderamente optar a todo



TIRO EXTERIOR: Con Huertas y Mickael mostrando porcentajes altísimos, la mejor versión de Navarro puede ser clave, pero más si cabe, lo será el acierto de “los secundarios”. La paciencia y buena circulación de balón del barça esta logrando sacar habitualmente bastantes tiros abiertos con resultados muy dispares…



ALTURA: El tamaño importa y de que manera, la posibilidad de jugar con dos aleros o el hecho de contar con Lorbek en el cuatro genera una superioridad a la que el Barcelona saca provecho con frecuencia.



TALENTO DIVERSIFICADO: Navarro, Huertas, Eidson, Mickael, Lorbek… pocos equipos presentan esa diversificación de jugadores con capacidad de erigirse en referentes en los momentos clave.





DEFENSA



Números: Es posible que las estadísticas no tengan mayor importancia, pero los números del Barcelona asustan, hasta el punto de ser el equipo que, desde que en 2001 comenzara la nueva era de la euroliga, con una menor media de ellos encajada de la historia.



AGRESIVIDAD: Quizás el mayor cambio respecto hace dos temporadas, pese a su gran estadística este Barcelona es mucho menos agresivo en el exterior y en la defensa de balón. Al margen de redundar en la falta de transiciones, permite a los contrarios respirar más de lo habitual.



INTIMIDACIÓN: Quizás ya no llame tanto la atención, pero la batería interior blaugrana sigue marcando territorio.





OLYMPIACOS











Campeón de Europa: 1 (1997)

Subcampeón de Europa: 3 (1994, 95 y 2010)

Final Four: 7ª (1994, 95, 97,99, 2009 , 2010 y 2012)

Otros títulos europeos: -

Ligas: 9

Copas: 9



Esta temporada:



Fase regular: 2º Grupo A 6-4

TOP 16: 2º Grupo E 3-3

Cuartos de final: 1-3 ante Siena

Total: 12-8



Si atendemos exclusivamente a las expectativas creadas a principios de temporada, es muy posible que la mayor sorpresa de esta final four sea la presencia en la misma del Olympiacos. Acusando la terrible situación que vive el pais heleno, el club del Pireo vivía una clara reestructuración el pasado verano, aligerando su plantilla de estrellas y apostando por jugadores de un perfil medio en busca de una idea de equipo más modesta, pero a la vez más sólida. Tras unos comienzos titubeantes, donde a la solvencia como locales se oponía su fragilidad como visitantes, el club ateniense ha ido creciendo con el paso de los meses de manera pausada pero continua a la imagen y semejanza de un Dusan Ivkovic quizás más cómodo con esta tipologia de equipo. Por otro lado, la salida del equipo de unos inadaptados Lucas y Howard y la llegada de Law y Dorsey acabaron por apuntalar a un equipo que además en la segunda mitad de temporada recuperaba a un buen Marko Keselj, quien en navidad estaba más fuera que dentro del equipo. Consolidando un futuro gracias a los minutos de los que están disponiendo jugadores como Sloukas, Mantzaris o Papanikolau, el Olympiacos es a día de hoy un equipo de extremada dureza mental, de buen tono defensivo y de una competitividad más que probada. Inferiores hombre por hombre a cualquiera de los otros tres equipos presentes en Istambul, nadie debería descartar a un equipo que a lo largo del año ha respondido mucho mejor cuando más exigido se ha hallado.



APUNTE HISTORICO



GANAR DE CUALQUIER MANERA











Fundada en el año 1925, la sociedad polideportiva Olympiacos nacía a orillas del Pireo impregnándose ya de inicio de una fuerte vocación internacional. El contacto con marineros americanos pronto sirvió como puente de un baloncesto que encontraba en jugadores como Alekos o los hermanos Spanaoudkis (Lekos tiene el honor de haber sido el primer jugador griego en practicar el tiro en suspensión) a sus primeros alumnos aventajados. Pese a este carácter pionero, el club rojiblanco permanecía a la sombra de Panathinaikos, Panellinios o Aek que por turnos se disputaban la hegemonía en una liga helena de la que el Olympiacos no podría gozar hasta 1949. Lejos de asentarse, el segundo título habría de esperar hasta 1960 y el tercero 16 años más. En esa época, finales de los 70, el Olympiacos vive sus mejores momentos de la mano de dos jugadores nacionalizados: Steve Giatzoglou y Giorgios Kastrinakis y de la estrella local Giorgios Barlas. Al título del 76 se le une el del 78 con una meritoria actuación en la copa de Europa del año siguiente. Además la creación de la copa griega en 1976, trae nuevas alegrías a los del Pireo con 4 títulos y un subcampeonato en sus primeros cinco años de existencia. Pese a los buenos augurios, la entrada en los 80 trae consigo un dominio inicial del Panathinaikos y una segunda mitad de dominio claro del Aris de la pareja Galis-Giannakis, mientras que en el Pireo lo más notable se limita a dos subcampeonatos coperos.

Con el afán desmedido de ser grande, el Olympiacos comienza a cambiar su suerte con la llegada en la 91/92 de Zarko Paspalj. Mvp en su primera campaña, el zurdo lleva en su segunda temporada al Olympiacos al quinto título de su historia abriendo un ciclo que se prolongaría cinco años. Con el dominio local a sus pies, Europa era el nuevo objetivo:

Mediados los años 90 el eje central del baloncesto heleno vira de nuevo de Salónica hacia Atenas, haciendo que el tradicional dominio en los últimos años de Aris y Paok pasara a manos de Panathinaikos y Olympiacos. A su eterna rivalidad los atenienses sumaban ahora otra y es que ambos buscaban con locura el primer cetro continental par Grecia.



Con estas premisas no es de extrañar que la semifinal que les enfrentó en 1.994 fuera tensa y competida a más no poder. Símbolo del traspaso de poder Gallis y Fassoulas, otrora lideres de Aris y Paok, lideraban ahora a Panathinaikos y Olympiacos, aunque una extraordinaria defensa de Sigalas dejaba al primero en unos míseros 8 puntos, haciendo estériles los 32 de Volkov y llevando a los portuarios a su primera final europea. Con un Paspalj, que afrontaba su tercera temporada, y el ex nba Roy Tarpley como pareja de extranjeros sólida y millonaria, poca gente concedía oportunidades a la Penya, que había entrado en la final a la chita callando. Pero cuando el inolvidable triple de Corny Thompson besaba la red y Zarko Paspalj fallaba desde el 4´60 el proyecto se desmoronaba.



De nada sirvió que llegados los play-off el equipo del Pireo se mostrara intratable y sumara el segundo titulo liguero consecutivo a costa del PAOK y que además supusiera el tercer doblete (se habían llevado la copa ante el Iraklis) de su historia (casi 20 años después del segundo), ya que la gran obsesión era Europa. Paspalj cambia de acera y se va al Panathinaikos, desde el cual recala Volkov y además Tarpley también es dado de baja. Para sustituir al americano se busca de nuevo a un jugador de cartel NBA y tras sopesar varias opciones el elegido resulta ser Eddie Johnson. Jugador elegante y sobrio se había formado en la universidad de Ilinois, para después ser elegido en segunda ronda del draft de 1981(el de Isiah Thomas o Mark Aguirre entre otros) por los Kansas City kings, franquicia en la que permaneceria durante seis temporadas promediando cerca de 20 puntos por noche (si exceptuamos su año rookie donde no llego a 10) antes de emprender un periplo por Phoenix, Seattle y Charlotte. Prueba de que pese a sus 35 años aun es un jugador valido es que en los Hornets promedia 11´5 puntos con un 40% en triples, en su última temporada previa a su aventura europea. Como curiosidad cabe recordar que Johnson había sido elegido mejor sexto hombre justo un año después de que lo hiciera el propio Tarpley. Con la guinda de Johnson, el equipo del Pireo creía acariciar el sueño europeo, más aun al comprobar la rápida adaptación de este, que en el tercer partido de la temporada europea, contribuía con 32 puntos a vengar la final de la temporada pasada con la victoria del Olympiacos en Badalona.



Pese a mostrarse un tanto irregulares, los rojos acaban por asegurarse el segundo puesto de su grupo tras vencer en casa cómodamente al Kinder de Bolonia (89-64 con 34 ptos de Johnson y 20 de Volkov) en la penúltima jornada de la primera fase, lo que les garantizaba la ventaja de campo en el cruce de cuartos de final, ultimo escollo antes de la final four.



El rival resulta ser el CSKA de Moscú, 3º del otro grupo que presentaba igual balance de victorias y derrotas que los griegos, pero se había visto relegado por el basket-average tras su empate con Madrid y Scavolini. Entrenados por Eremin, los moscovitas vivían tiempos de cambio y habían iniciado la competición con dos americanos: el diminuto base Evans, eléctrico y gran pasador y el rocoso pivot Patrick Eddie, aunque eso si acabarían por ser cortados. La base del equipo la formaban parte del núcleo duro que había llevado a Rusia a la meritoria plata del mundial de Canada, destacando sobre todo Karaseev un base escolta de gran capacidad ofensiva, Koudeline un impredecible escolta zurdo capaz de armar el brazo desde cualquier lado, el efectivo Panov y el resolutivo y talentoso ala-pivot Kissourine, armas estas que en cualquier caso parecían insuficientes para detener a la millonaria maquina ateniense.



Por aquel entonces los cuartos de final de la liga europea tenían la particularidad de que el primer partido se disputaba en casa del equipo con peor balance, así pues el 9 de Marzo de 1995 se disputa en Moscú el primer partido de la serie. Hasta el descanso todo transcurre con normalidad (45-44 para los locales), pero la segunda parte se salda con una memorable exhibición ofensiva del CSKA, que con Karaseev y Koudeline anotando una y otra vez se apuntan el primer tanto por un inapelable 95-65.



Las críticas de la prensa griega fueron feroces y, exceptuando a Johnson que se había ido a los 28 puntos, no respetaban a ninguno de los componentes de la fuerte plantilla roja. Pese al lógico desencanto por la abultada derrota, más de 15.000 personas llenaron el palacio de la paz y de la amistad (o de las dos mentiras como sabiamente decía el gran Ernest Rivera) y pudieron presenciar uno de los mejores partidos del año, con grandes defensas, emoción y tres jugadores rayando a un nivel sublime: Johnson de nuevo 28 ptos, Volkov 22 y 11 reb y el moscovita Karaseev cuyos 31 puntos finales resultaban estériles en el marcador final (86-77).



Hasta este punto, y dentro de la relativa sorpresa que suponía el gran rendimiento ruso, todo marchaba dentro de unas pautas habituales pero, desgraciadamente, todo estaba a punto de quebrarse.



Tras disputar el segundo partido el Martes 14, y estando previsto el tercero para el Jueves 16, el Miércoles 15 ha quedado grabado como uno de los más vergonzosos de la historia reciente del basket europeo. Tras poco más de una hora de entrenamiento, varios jugadores moscovitas comenzaron a sentirse mal, pero lo que no parecía más que un problemilla se torna rápidamente en todo un drama: en poco más de un minuto y ante la incredulidad del cuerpo tecnico, Morgunov, Panov y Koudelin pierden el conocimiento y tienen que ser trasladados a un hospital. A medida que pasa la mañana el resto de jugadores va sintiendo distintas molestias, mareos o dolores de cabeza y apuntan a las botellas de agua que la organización les había facilitado. Examinadas las que aun no se habían abierto, se observó que presentaban varios agujeros en los respectivos tapones y se decide llevarlas a un laboratorio. El dictamen es rápido y concluyente, presentan un fuerte componente químico ajeno a la composición normal y cercano al ácido lisérgico. La situación va empeorando y Panov tiene que ser trasladado a la UCI mientras Morgunov entra en coma. Poco a poco su situación mejora, pero simultáneamente Karaseev y Kornev caen también gravemente enfermos y tienen que ser ingresados. Llegado el jueves, la estupefacción es total porque la FIBA se niega a aplazar el partido.



El CSKA llega al encuentro con solo cinco jugadores: Kissourine, Vadeev, Grezin, spiridonov y un semi-recuperado Kodelin que apenas se puede mantener en pie. En una demostración de coraje, los moscovitas llegan al descanso con tan solo 5 puntos abajo, pero en 5 minutos Koudelin cae eliminado y 10 después lo hace Grezin. Con 5 minutos por jugar, la megafonía helena pide al público que anime a los heroicos jugadores rusos, pero por entonces todo suena ya a burla y el Olimpiacos gana cómodamente. Por suerte los jugadores rusos fueron recuperándose poco a poco, pero la fechoría quedo indemne. La FIBA alego que si no había reclamación especial no podía hacer nada y desde Rusia, pese a la insistencia de Eremin, pesó más la “alianza ortodoxa” con Grecia que la sed de justicia.



De una manera ensombrecida, el Olimpiacos llegaba de nuevo a la final four, donde habría de repetir la actuación del año anterior: semifinal victoriosa ante el Panathinaikos (la FIBA obligaba, en sus competiciones a que los equipos de un mismo país se enfrentaran en semifinales), favoritismo y posterior derrota en la final ante un equipo ACB entrenado por Obradovic (esta vez el Madrid). Pese a que volvieron a hacerse con la liga, Johnson (que volvió a buen nivel a la NBA) y Volkov salían del equipo para dar entrada a Walter Berry (que regresaba) y a David Rivers.



¿Justicia poética dirán algunos? Quizás, pero si hay que buscarla quizás se encuentre en que en la nueva temporada (95-96), CSKA y Olimpiacos fueron encuadrados en el mismo grupo y pese a que al final presentaron el mismo balance (10-4) el hecho de que los moscovitas ganaran su doble enfrentamiento hizo que, en un triple empate con el Benneton, el CSKA fuera primero y el Olimpiacos fuera tercero. Lo que puede parecer irrelevante, no lo es tanto al comprobar que al amparo de su publico el CSKA lograba el pase a la final four (caerían ante un Panathinaikos con el mejor Wilkins del año, 30 ptos) mientras que los del Pireo caían ante el R.Madrid. Un año más tarde, y contra todo pronóstico, el Olympiacos lograba al fin, su anhelada euroliga tras una temporada sumamente irregular en la que se veía obligado a competir desde los octavos de final con el factor pista en su contra. Al título europeo le seguiría el domestico…empezando una sequía que dura hasta nuestros días y donde solo pequeñas alegrías coperas (2002, 09 y 10) atenuarían la desazón de los del Pireo quienes tras arruinarse a principios de la década pasada (quizás el equipo que lidera Radja en la 01 es el último grande de esa época), pasarían a vivir otra espiral de gasto brutal con un par de finals four como exiguo premio. Curiosamente, esta temporada y tras vivir otro de sus recurrentes achuchones financieros, el Olympiacos parece haberse reinventado de forma más natural y aunque es pronto para saberlo, quizás la actual (y obligada)apuesta por una base de jugadores jóvenes permita al club rojillo volver a ganar y hacerlo además con una doble satisfacción por el trabajo bien hecho.







LOS JUGADORES













Miembro de la exitosa generación helena del 90(oro en los europeos U-18 de 2008 y en el U 19 de 2009 y plata ese mismo año en el mundial), Evangelos Mantzaris esta confirmando en el Pireo las buenas sensaciones ofrecidas la temporada pasada en el Peristeri. Asentado como titular en la segunda mitad de temporada, Mantzaris muestra una gran madurez en el juego y una excelente actitud defensiva, mientras que en la parcela ofensiva sus problemas de regularidad en el tiro siguen siendo su mayor preocupación. Tras su azarosa salida del Partizan en víspera del Top 16, Acie Law ha conseguido encontrar un rol acorde a sus capacidades bajo la tutela de un Ivkovic más comprensivo de lo habitual. Excelente manejador de balón y muy peligroso en el 1*1 desde donde llegan la mayor parte de sus asistencias, Law aporta dinamita ofensiva saliendo del banquillo ofreciendo soluciones que tapan sus problemas con la dirección de juego y sus problemas en el tiro. Zurdo como Law y miembro como Mantzaris de la generación del 90, Kostas Sloukas vive su regreso al Olympiacos tras su cesión a un Aris donde su asentamiento en el juego le abrió las puertas de la selección absoluta en el eurobasket de Lituania. Comparado en su país con el propio Diamantidis, Sloukas esta siendo utilizado esta temporada más como escolta que como base. Algo falto de capacidad atlética, Sloukas posee no obstante un buen primer paso y una gran capacidad para generarse tiros. Fino en el triple (por encima del 50% tanto en euroliga como en la Heba) y con mucha personalidad, Sloukas apunta a pilar claro en el futuro Olympiacos. Por ultimo, Dimitiros Katsivelis, encarna a otra de las apuestas de futuro del nuevo Olympiacos. Grande para el puesto de base, se encuentra más cómodo jugando en transición aunque Ivkovic le ha utilizado más como revulsivo defensivo que otra cosa (por ejemplo en la remontada ante el Fenerbahce).



Tras oficiar como base toda la temporada pasada, Vasilis Spanoulis ha vuelto en esta, pese a la salida del equipo de Teodosic y Papaloukas, a la posición de escolta, dibujando una gran temporada (aunque con ciertas dudas al final, de 20´3 de valoración en la primera fase, paso a 14 en el top 16 y algo menos de 10 en play-off). Claro líder del equipo, Spanoulis es el director de facto en buena parte de los ataques de los de Ivkovic. Sin llegar a ser un especialista, Spanoulis ha mejorado en el tiro exterior y sigue siendo muy peligroso desde la media distancia con su facilidad para generarse tiros desde la media distancia, aunque su fuerte sigue siendo su capacidad de penetración donde su excelente uso del cuerpo le permite finalizar situaciones de atasco o forzar numerosas faltas. Buen pasador cuando genera ventajas, su tendencia en ocasiones a amasar en exceso el balón le impide dar una dimensión global a su juego. Con Spanoulis monopolizando el rol principal y Sloukas gozando de minutos en el 2, el papel de Martynas Gecevicius ha quedado muy reducido en la segunda mitad de temporada. Dotado de indudables cualidades técnicas, su necesidad de continuidad y confianza para rendir estad limitando las posibilidades de un jugador que sin embargo sigue mostrando destellos de enorme clase. Gran tirador, el lituano posee además una muy buena visión de juego y ha mostrado evidentes progresos en la faceta defensiva. En un equipo que habitualmente muestra problemas en el tiro exterior, la final four puede ser un momento de oro para que el ex del Lietuvos de un paso al frente. Fiel a una trayectoria donde el buen papel en equipos modestos se alterna con el ostracismo en los de primer nivel, Michalis Pelekanos esta viviendo una temporada con un protagonismo menor y que por si fuera a poco tiende a disminuir (12 minutos de media en la fase regular pero inédito ante Siena). Zurdo cerrado, el de Koridalos sufre en el manejo de balón y en el tiro exterior, dejando sus condiciones ofensivas en manos de una buena capacidad atlética que le permite a su vez mostrarse como un buen defensor, rol por el podría encontrar su papel en Istambul.



Asentado definitivamente como alero, Kostas Papanikolau es el tercer representante de la generación del 90 en un Olympiacos donde ha conseguido ganarse por segundo año la confianza de Dusan Ivkovic. Buen defensor y con capacidad de ayudar en el rebote, Papanikolau muestra una madurez en el juego notable así como capacidad para romper de fuera a adentro o incluso en el poste bajo. Muy irregular en el tiro exterior, ha evidenciado progresos en la naturalización y velocidad de su ejecución pero sigue presentando porcentajes pobres lo que, junto a su tendencia para cargarse de faltas innecesarias o su poca capacidad de pase, siguen siendo la principal laguna en su juego. Tras su espectacular mundial en la propia Istambul, el papel de Marko Keselj fue una de las grandes decepciones del Olympiacos la temporada pasada en una situación que por momentos parecía repetirse este año. Descartado en buena parte del tramo final de la temporada pasada, el serbio conseguía de nuevo hacerse un hueco en el eurobasket donde si bien estaba más irregular que en Turquia volvía a tener momentos de gran inspiración (23/48 en triples con 7 a Francia en el partido que pudo cambiar el destino de los serbios). De vuelta al Pireo, y pese a estar a las ordenes en ambos casos de Ivkovic, una lesión y problemas con el técnico, llegaron a situar a Keselj más fuera que dentro del equipo hasta el punto que a finales de diciembre el jugador llegaba a viajar a Serbia para negociar su vuelta al Estrella Roja. Finalmente y tras reconducir la situación, el alero serbio llega a la fase definitiva de la temporada con un rol exponencialmente crecido. Tirador de rachas, a nivel de club no ha conseguido encontrar el acierto que ha evidenciado en torneos cortos, pese a lo cual sigue siendo una amenaza de primer orden. Grande para el puesto, sigue sufriendo en defensa y no ayuda lo esperado en defensa. Con margen de mejora en la lectura del juego y en el manejo de balón, su otra gran baza ofensiva se fundamenta en su largo primer paso que, sobre todo tras finta en el lateral, le permite encarar el aro con gran facilidad. Por último, el inédito (solo ha llegado a “vestirse” en el cuarto partido de la serie ante Siena) Panagiotis Vasilopoulos lucha por dejar atrás su particular calvario de lesiones y criticas por su alto contrato. De dudosa presencia en la cita turca, si finalmente consigue llegar puede aportar experiencia y alternativas como 3 o 4, aunque su estado físico, importante en un jugador de sus características es toda una incógnita.



Máximo anotador del equipo en la competición domestica y segundo más utilizado en la euroliga, parece claro que Georgios Printezis ha recuperado en Atenas su mejor versión. Jugando como 4, Printezis es el encargado de abrir la pista para dotar de espacio a las penetraciones de Spanoulis o Law, a la par que genera su propio peligro. Mejorado en el tiro exterior (aunque sus porcentajes son sensiblemente mejores en la liga griega), el ex de Unicaja hace daño con sus penetraciones donde su fuerza y su capacidad para finalizar con ambas manos generan buenos puntos para el Olympiacos. Con problemas ante cuatros de gran tamaño como puede ser Lorbek, el griego suple sus carencias con mucha actividad y una muy buena intuición para las ayudas. Pudiendo alternas el puesto de 4 o el de 5, Pero Antic esta ratificando en el Pireo las excelentes sensaciones que mostrara tanto en el Spartak como en el eurobasket de Lietuva con la sorprendente Macedonia. Claro ejemplo de jugador cuyo valor esta muy por encima de sus números, el flojo porcentaje en triples no refleja el peligro real de un Antic siempre amenazante desde fuera. Buen reboteador, quizás su mejor cualidad sea la inteligencia y pausa en su juego, lo que muchas veces le lleva a ser el verdadero cerebro del ataque ateniense gracias a su excelente manejo de las fintas y su maravillosa capacidad de pase. Llegado tras una azarosa carrera desde el siempre Bamberg, Kyle Hines esta demostrando de nuevo que su falta de centímetros no le impide ser un interior de plenas garantías. Ancho y fuerte, su excelente uso del cuerpo le permite resolver cuando recibe en ventajas a la par que cargar con brutalidad el rebote ofensivo definiendo así una de las señas de identidad del equipo. Segundo máximo anotador de los de Ivkovic, Hines esta mostrando problemas en el tiro libre aunque poco a poco parece ir asentando un interesante tiro de 4/5 metros. Con problemas de faltas recurrentes, en defensa su fortaleza consigue minimizar su falta de talla. Tras su decepcionante paso por el Baskonia, Richard Dorsey ha conseguido abrirse hueco en un Olympiacos al que ha aportado un interesante tono físico. Muy limitado con el balón en las manos, su carga del rebote ofensivo y su contundencia en las finalizaciones dan a Dorsey un papel importante en la oxigenación de la pintura helena. Buen taponador y duro en el 1x1, sus problemas de faltas son su mayor merma defensiva mientras que en el plano ofensivo, su flojo porcentaje desde el tiro libre ahonda en sus carencias. Reencontrado con un Ivkovic que en el Dinamo de Moscú saco su mejor versión, Lazaros Papadopoulos esta viviendo una temporada con un rol decreciente. Muy limitado en su físico, la robotización de su juego ofensivo no impide que tenga momentos en el que reciba balones con regularidad intentando castigar a los interiores rivales. Con pésimos porcentajes en los tiros libres y tendencia a las perdidas, Papadopoulos puede, no obstante, hacer daño si no recibe ayudas a través de sus semiganchos, sus reversos o su buena visión juego. En pugna con Papadopoulos por no ser uno de los descartados, la ultima plaza del juego interior podría ser para Andreas Glyniadakis. Formado en el Panathinaikos y con breve paso por la Nba (13 partidos en los Sonics de la 2006/07) Glyniadakis es un 2´15 relativamente coordinado y ciertos recursos para sacar partido a su zurda, pese a lo cual su inconsistencia defensiva y su falta de continuidad lastran sus verdaderas posibilidades.



EL ENTRENADOR:


Tras la decepción de verse fuera de los juegos olímpicos con una selección serbia que había moldeado en busca de ese objetivo, Dusan Ivkovic vivirá en Estambul su séptima final four, dejando atrás el sinsabor de la eliminación de la temporada pasada y demostrando de paso que sigue en la elite de los entrenadores europeos. Con un equipo de menos individuales, el veterano técnico serbio ha conseguido crear un bloque con las ideas claras, gran dureza mental y una extremada competitividad en un reflejo de lo que han sido alguno de sus equipos en el pasado (Aek o Dinamo por ejemplo). Formado en el Radnicki, su primer gran éxito como entrenador llega en la temporada 78/79 cuando conduce al Partizan a un espectacular triplete, gracias al doblete nacional y a la copa Korac conseguida tras derrotar al Rieti de los Brunamonti, Zampolini o Meely por 108-98, en un encuentro donde Kikanovic se iba hasta los 41 puntos. Desde la capital yugoslava, Ivkovic pasaría a vivir su primera experiencia foránea en el Aris de Salónica permaneciendo en la ciudad “macedonia” durante dos temporadas. De vuelta a Yugoslavia, pasa por Radnicki, Sibenik y Vojvodina para, en la 91/92, volver a Salónica, aunque esta vez al gran rival de su anterior escuadra: el Paok. A las primeras de cambio, con Prelevic de estilete Ivkovic logra el título liguero tras vencer por 3-1 al Olympaicos de Paspalj, a la par de quedarse a las puertas de la Recopa tras caer en la final ante el Real Madrid por culpa del recordado robo de Ricky Brown. El éxito es rotundo y es que contra lo que se pueda pensar, el club blanquinegro distaba de ser una potencia histórica del basket heleno:



Fundado en 1926, el PAOK de Salónica creó su sección de baloncesto en 1928 formando parte de los inicios baloncestisticos de la competición griega. Convertido en un clásico europeo a partir de los años 80, el PAOK no presenta sin embargo un currículo nacional excesivamente grande ya que en sus vitrinas “sólo” se acumulan dos títulos ligueros (1959 y 1992) y 3 de Copa (1984,95 y 99).

El primer título liguero data de 1959, y fue conseguido tras derrotar en el partido decisivo a su sempiterno enemigo el Aris de Salónica por 66-58, con 25 puntos de Ikonomou y 18 de Theothoritis. Como curiosidad, hay que decir que el título se decidió por el formato triangular y que para evitar problemas la organización contrató a dos árbitros yugoslavos (Vukovic y Pastor). En cuanto al único precedente de éxito copero antes de la llegada de Ivkovic, habría que remontarse a 1984 cuando el PAOK, finalista ya un año antes, derrotaba en la final al Aris por 74-70 con 27 puntos de Stavropoulos. Eso si, cabe resaltar, que un año antes de la llegada del técnico serbio, el Paok había logrado tocar el cielo en la Recopa de Europa. Tras caer el año anterior en las semifinales de la propia Recopa ante el Knorr de Bolonia, el PAOK alcanzaba la final del 91 tras deshacerse del Dinamo Moscú en las semifinales. Su rival era un CAI Zaragoza con el que ya había compartido grupo en la liguilla previa, donde pese a vencer en Salónica por un espectacular 112-102, el PAOK no pasaba del segundo puesto ya que caía en su visita a a Zaragoza e Israel. La final sería de muy distinto signo, y tras un partido de clara iniciativa maña (65-57 a falta de ocho minutos) los acontecimientos extradeportivos que habían marcado toda la final (que llegó a estar parada por el penoso comportamiento de la afición helena) esta derivó en un cambio de rumbo en el que los 31 puntos de Prelevic acabaron por ser decisivos.



Un año después, Ivkovic guía al Paok a la primera final four de su historia peleando hasta el último instante su pase a la final antes de caer por un ajustado 79-77 ante la Benetton de un Toni Kukoc que coqueteaba con el triple doble (15 puntos, 10 asistencias y 8 rebotes). Mediada la temporada 93/94, Ivkovic abandona el club por discrepancias con sus dirigentes pasando a enrolarse durante dos temporadas en el Panionios, que le sirve de plataforma para aterrizar en el Olympiacos. Al igual que en Salónica, a las primeras de cambio Ivkovic cambia la historia del club llevándole hasta el título de la euroliga y a un doblete nacional, que a día de hoy sigue marcando el ultimo título liguero de los del Pireo. Tras dos años más en el club rojo, donde lo más destacado es la clasificación para la final four del 99, Ivkovic ficha por el Aek de Atenas cumpliendo un nuevo ciclo de dos años saldados con sendas copas griegas y el meritorio triunfo en la copa Saporta de 2000 ante la Kinder de Bolonia, vengando así la derrota de la final de la euroliga del 98. Tras un año sabático, el técnico serbio se mueve a Moscú para dirigir a un Cska que pese a contar con una pareja tan solvente como Giricek-Turckan viene de quedarse fuera de la final liguera. En el cska, Ivkovic implanta una nueva forma de trabajar que devuelve al club rojo la hegemonía local y que le lleva a disputar tres final four consecutivas. Tras caer en las semifinales de 2003 y 2004 ante los anfitriones (Barcelona y Maccabi), en 2005, y tras firmar una temporada casi impoluta, la derrota como local ante el Tau acaba por poner fin a la aventura en el Cska. Sin moverse de Moscú, Ivkovic logra un nuevo título europeo al lograr la copa Uleb con un Dinamo al que al año siguiente guía hasta los cuartos de final de euroliga. Finalmente, después de unos años apartado del ámbito de los clubes, la temporada pasada Ivkovic volvía a un Olympiacos nostálgico de su anterior etapa, logrando la copa griega, pero quedándose a las puertas de la final four.



Con todo, y pese a tan impresionante bagaje, para entender la verdadera dimensión de Dusan Ivkovic es necesario referirse a su faceta de seleccionador. Como artífice de la regeneración serbia (plata en el eurobasket de Polonia y semifinalista en el mundial de Turquia) pero sobre todo como director de la gran Yugoslavia de finales de los años 80 y principios de los 90, donde Ivkovic habría de acreditar unos números para la historia:



En lo meramente estadístico el balance de Dusan Ivkovic a nivel de selección es apabullante. Tras su paso por la selección junior, Ivkovic llega a la selección “b” para dirigir a Yugoslavia, en la Universiada de Edmonton logrando la plata tras caer en la final ante los anfitriones liderados por Jay Triano. Pese a su condición de segunda selección, aquel grupo contaba con jugadores de la talla de Drazen Petrovic, Ivan Sunara (máximos anotadores de los plavi), Goran Grbovic, Danko Cvjeticanin, Velimir Perasovic, Emir Mutapcic o Rajko Zizic.

Cuatro años después, Ivkovic volverá a dirigir a una selección yugoslava en la Universiada, aunque esta vez la historia es distinta y es que, pese al carácter de selección B, el ex jugador del Radnicki es el elegido para sustituir a Kresimir Cosic en la absoluta. En Zagreb y con un equipo espectacular (los hermanos Petrovic, Vrankovic, Divac, Cutura, Radulovic, Cvjeticanin, Grbovic…) Yugoslavia logra el oro sin conocer la derrota en los ocho partidos disputados.

Al año siguiente logra en Holanda el pase a los juegos de Seúl, cayendo solo ante la URSS, logrando en la cita coreana la medalla de plata tras caer de nuevo en la final ante unos soviéticos a los que si habían conseguido derrotar en una primera fase, donde por el contrario no conseguían hacer lo propio con Puerto Rico.

Pese a ser los anfitriones del eurobasket 89, Yugoslavia debe pasar por el tramite clasificatorio donde en seis partidos solo conoce una derrota (97-74 ante Bulgaria en un partido extraño) mientras que en las cinco victorias supera los 105 puntos…llegando a 140 ante los propios búlgaros. Una vez en el eurobasket, exhibición para el recuerdo y oro como invictos… la misma medalla que Ivkovic se cuelga al año siguiente en el mundial de Argentina, aunque en esta ocasión con una derrota a cuestas (de nuevo ante Puerto Rico en la fase previa).

Pese a ser los vigentes campeones, Yugoslavia debe volver a participar en el preeuropeo de cara al eurobasket de Roma´91, y en esta ocasión ni siquiera concede una derrota simbólica, llegando a endosar a Alemania la friolera de 231 puntos en su doble enfrentamiento. Pese a todo lo que rodea al torneo, nuevo oro y de nuevo como invictos. Tras las sanciones de la ONU, Yugoslavia con Ivkovic al frente por última vez reaparece oficialmente en el eurobasket de Atenas´95, logrando un nuevo oro sin conocer la derrota ni en la fase de clasificación (aunque Bulgaria les arrancara una prorroga) ni en los 9 partidos del torneo propiamente dicho.

Al margen de los grandes torneos el balance en los partidos amistosos es igualmente notable, sumando 52 victorias por tan solo 12 derrotas, disputados no solo en los periodos 87-91 y 95 sino que también en el periodo más oscuro.

En 1992, antes de la sanción definitiva Ivkovic trabaja con 16 jugadores de cara a la participación en el preolímpico (Djordjevic, Danilovic, Paspalj, Bodiroga, Rebraca, Dobras, Prelevic, Divac, Jankovic, Savic…) llegando a disputar dos amistosos ante Grecia y Francia con sendos triunfos. Sin poder disputar e torneo olímpico, Yugoslavia no volvería a jugar como tal en unos años…aunque en 1993 y sin nombre en la camiseta disputan dos partidos ante Grecia como homenaje a Boban Jankovic, que la federación yugoslava considera oficiales saldándole con sendas victorias de un equipo plavi que contaba con lo más granado de su basket a excepción de Divac y Bodiroga. Por último, y bajo el nombre de Serbian All Stars, Ivkovic dirige a una suerte de selección yugoslava encubierta que logra llevarse el torneo Acrópolis de 1994 y que contaba con jugadores de la talla de Djordjevic, Obradovic, Loncar, Beric, Sretenovic o Rebraca.







En total 115 victorias en 134 partidos con Yugoslavia...



LOS NÚMEROS (entre paréntesis los jugadores más destacados)



PUNTOS: 77´59 (Spanoulis 16´5, Hines 10´8, Printezis 10´3)

REBOTES: 34´25 (Dorsey 5´7, Hines 4´7, Antic 4´5)

ASISTENCIAS: 14´05 (Spanoulis 3´9, Law 2´4, Papadopoulos 2´2)

TAPONES: 3´2 (Dorsey 1´3)

VALORACION: 81´95 (Spanoulis 16´4, Printezis 11´2, Hines 10´8)

TIROS DE 2 %: 52´4%

TIROS DE 3 %: 32´6 %

TIROS LIBRES: 73´7 %



EL JUEGO




ATAQUE



ESPACIOS: Con Printezis o Antic abiertos, el Olympiacos tiende a generar mucho espacio buscando las penetraciones de Spanoulis o Law y facilitando las opciones en el lado débil del juego interior.



RITMO: Sin ser un equipo especialmente rápido, este Olympiacos tiene poco que ver con él de la anterior etapa de Dusan Ivkovic y rara vez renuncia a las transiciones.



SEGUNDAS OPORTUNIDADES: Con hasta tres hombres cargando el rebote de ataque, los del Pireo generan nuevas posesiones con relativa facilidad.



SPANOULIS: Máximo anotador, máximo asistente, pese a la larga rotación de los rojiblancos la importancia del escolta heleno es absoluta



DEFENSA



AGRESIVIDAD: Muchas rotaciones con la idea de mantener la frescura y con ella una tremenda agresividad en la defensa del balón.



INTIMIDACIÓN: La falta de centímetros de la rotación principal se ve compensada por el tamaño de los aleros y, sobre todo, por la actividad de Dorsey.



ALTERNATIVAS: En la segunda mitad de la temporada, Ivkovic ha probado en momentos puntuales a mostrar una zona 3-2 muy dinámica…



AYUDAS: Muy frecuentes en la pintura, en buena parte de los partidos optan por no realizarlas en el exterior prefiriendo resguardar el aro a saltar a los tiros.





DATOS, CLAVES, CURIOSIDADES…



LA EXPERIENCIA ES UN GRADO (PARTICIPACIONES EN FINAL FOUR)



BARCELONA



Victor Sada: 3 (campeón 2010 y sf 2006 y 09 con Barcelona)

Juan Carlos Navarro: 5 (campeón 2003 y 10, sf 2000, 06 y 09 con Barcelona)

Pete Mickael: 2 (campeón 2010 Barcelona, sf 2008 Tau)

Chuck Eidson: 1(Finalista 2011 Maccabi)

Erazem Lorbek: 3 (Campeón 2010 Barcelona, finalista 2004 y 09 con Fortitudo y Cska).

Boniface N´Dong: 1 (Campeón 2010 Barcelona)

Fran Vázquez: 1 (Campeón 2010 Barcelona).

Xavi Pascual: 2 (Campeón 2010 y sf 09 con Barcelona)



OLYMPIACOS



Vasilis Spanoulis: 2 (campeón 2009 y sf 2005 con Panathinaikos)

Panagiotis Vasilopoulos: 2 (Finalista 2010 y sf 09 con Olympiacos)

Michalis Pelekanos: 1 (sf 2009 Olympiacos)

Lazaros Papadopoulos: 1 (campeón 2002 con Panathinaikos)



* Andreas Glyanidakis y Kostas Papanikolau formaban parte de la plantilla del Olympiacos en 2010 pero no participaron en la final four. El pivot ya había vivido esa misma situación en el Panathinaikos de la 99/00 y 00/01.



MEDALLISTAS:



Barcelona



Victor Sada: Oro eurobasket 2011

Marcelino Huertas: Oro torneo americas 2009, oro panamericanos 2007Plata torneo americas 2011

Juan Carlos Navarro: Oro eurobaskets 2009 y 11, Oro mundial 2006, Plata JJOO 2004 y eurobasket 2003 y 07, bronce eurobasket 2001.

Kosta Perovic: Plata eurobasket 2009.

Boniface N´Dong: Plata Afrobasket 2005



Grecia



Vasilis Spanoulis: Oro eurobasket 2005, plata mundial 06 y bronce eurobasket 2009.

Giorgios Printezis: Bronce eurobasket 2009

Panagiotis Vassilopoulos: Oro eurobasket 2005 y plata mundial 2006

Andreas Glyniadakis Bronce eurobasket 2009

Lazaros Papadopoulos: Oro eurobasket 2005 y plata mundial 2006



Otros títulos europeos



Marcelino Huertas: Fiba cup en 2006 con Joventut

Juan Carlos Navarro: Copa Korac 1999 con Barcelona

Chuck Eidson: Eurocup con Lietuvos Rytas 2009

Martynas Gecevicius: Eurocup 2009 con Lietuvos

Lazaros Papadopoulos: Uleb 2006 con Dinamo Moscú





UNA SEMIFINAL “SINIESTRA”: Si la convocatoria de Ivkovic lo permite (es poco probable) la semifinal entre blaugranas y rojiblancos podría contar con hasta 8 jugadores zurdos: Eidson, Mickael e Ingles por parte cule y Sloukas, Law, Papanikolau, Peleaknos y Glyaniadakis por parte helena. Con todo, ninguno llega a los extremos logrados por Jure Zdovc en alguno de los amistosos previos, cuando su Eslovenia llego a juntar hasta siete en un mismo partido (Lakovic, B.Udrih, G.Dragic, Klobucar, Z.Dragic, D. Muric y Slokar).



REFERENTES: Un jugador de cada equipo ya sabe lo que es ser elegido Mvp de la final four, pero más allá de ese duelo entre Spanoulis y Navarro, el equipo de Xavi Pascual parece contar con más jugadores capaces de desatascar un partido: Pete Mickael, Lorbek o un Chuck Eidson que el año pasado lo bordo en la final four tras unos meses discretos (dos años antes ya había sido el mvp de la de la Eurocup así como de la copa lituana tras anotar 40 puntos jugando como base).



RITMO: Clave un tanto paradójica, contemplada la euroliga se puede sacar por conclusión que el Olympiacos apuesta por un ritmo algo más vivo que el Barcelona…y en cambio, todo indica que una mayor agresividad de los cules y con ella una mayor vocación de transición podría desarbolar a los del Pireo.



REBOTE OFENSIVO: Faceta claramente favorable al conjunto griego, donde la carga llegando desde fuera de Antic, Dorsey o Hines no solo facilita muchas segundas oportunidades sino que impide a los rivales salir con naturalidad al contraataque.

TIRO EXTERIOR: Faceta a mejorar por ambas escuadras, pero que puede ser más importante para el Barcelona. Con un Olympiacos que tiende a colapsar la zona, el acierto en los tiros liberados del Barcelona puede llegar a ser poco menos que fundamental.



DUREZA MENTAL: El Barcelona parte como favorito, pero el conjunto griego, a excepción de su partido en Moscú, se agarra a los partidos de manera casi estoica. Bien en los momentos clave, los de Ivkovic solo han vencido en tres partidos como visitantes…eso si, uno por fase y justo el que necesitaban para clasificarse.






CSKA-PNATHINAIKOS










Duelo entre el vigente campeón y el equipo que mayor favoritismo ha despertado a lo largo de la temporada, la reedición de las finales de 2007 y 2009 augura una de las semifinales más competidas de la historia reciente. Con el intenso precedente de esta misma temporada en el Oaka, el mayor talento del Cska se verá a prueba ante un Panathinaikos curtido en este tipo de partidos y en una de esas situaciones en las que Zeljko Obradovic parece sentirse especialmente cómodo. La vocación ofensiva moscovita frente al camaleónico Panathinaikos capaz de cualquier cosa aderezado todo ello con buena parte de las más rutilantes figuras de esta euroliga en danza, todo apunta a un partido histórico.





Precedentes:



Esta temporada: 2-0 Cska

En Final four: 4-0 Panathinaikos

Historia copa de Europa: 13-9 Panathinaikos

Otras competiciones europeas: Inédito



Duelo cargado de historia, el balance histórico favorece a un Panathinaikos que hasta las dos derrotas de esta temporada (con prorroga en el Oaka) había encadenado siete triunfos consecutivos sobre los moscovitas. La ventaja verde se hace, además, más visible en la historia de la final four con un contundente 4-0. Sin precedentes en la época dorada del TSkA, el primer cara a cara entre atenienses y moscovitas data de la fase previa de la copa de Europa de la temporada 81/82 deparando la primera gran sorpresa y es que si bien en el primer duelo el Cska se llevaba el partido por 83-80, en la vuelta los verdes daban la vuelta a la eliminatoria al vencer por 87-83, colándose así, contra pronostico, en la liguilla semifinal. Su siguiente enfrentamiento habría de esperar a la temporada 94/95, con el Panathinaikos liderando su grupo de octavos de final con una victoria de margen sobre el Cska, aunque en su duelo particular ambos resultaran vencedores como locales: 77-70 en Moscú (16 de Karassev y Koudelin y 21 puntos 12 rebotes de Paspalj como notas más destacadas) 101-77 en Atenas (26 puntos de Paspalj y 17 con 16 rebotes de Vrankovic para los locales). Al margen de la final four de 1996, su siguiente enfrentamiento se remonta a la Suproliga con nuevo reparto de triunfos locales. En Moscú el Cska se imponía por 69-57 con 16 puntos de Einikis y una gran actuación de Kirilenko (11 puntos y 17 rebotes), mientras que en el Oaka ateniense, los de Obradovic se tomaban la revancha imponiéndose por 89-81 con 21 puntos de Alvertis frente a un nuevo doble doble de Kirilenko (13+ 10).

En la nueva euroliga, el primer enfrentamiento entre Cska y Panathinaikos llega ya en la propia 2001/02, con doble triunfo de los verdes: 85-91 en Moscú (26 puntos de Kutlay para los de Obradovic y 20 de Giricek para los de Tikhonenko) y 83-80 en Atenas (31 de Mulaomerovic y 30 de Giricek). A partir de ese momento el Cska, bajo la tutela de Ivkovic, encadena cuatro triunfos consecutivos, en una racha rota en el tercer y cuarto puesto de la final four de Moscú. Es ahí, y hasta esta temporada, donde los de Obradovic comienzan su racha de siete triunfos (cuatro de ellos ante Messina, incluyendo el doble enfrentamiento de 2006). Por último, esta temporada el Cska volvía a coger la iniciativa venciendo en un durísimo encuentro en el Oaka por 76-78 (Kaimakoglou y Siskauskas como máximos anotadores), en un partido necesitado de prorroga y donde los atenienses llevaron la delantera en el marcador (+9 al descanso) hasta bien entrada la segunda parte. En Moscú, un memorable tercer cuarto del Cska (28-14) daba la vuelta al encuentro (91-75). Con Kirilenko ausente por lesión, Nenad Krstic con 31 de valoración se erigía en el lider de los de Kazlauskas.



En cuanto a los precedentes en final four, el primero se remonta a la final four de Paris 1996, en la que los pupilos de Boza Maljkovic comenzaban a construir su primer título derrotando al Cska en las semifinales por 81-71 en un memorable partido de un Dominique Wilkins que se iba hasta los 35 puntos. Nueve años después en Moscú, tras la dura derrota ante el Tau en semifinales el Cska vivía su segunda decepción tras caer en el partido de consolación por 94-91 en un encuentro que necesitaba de dos prorrogas y en el que destacaban los 21 puntos de Batiste y los 15 con 8 rebotes, 4 asistencias y 4 robos de Dimitris Diamantidis.



En 2007, en Atenas, el Panathinaikos se llevaba una de las finales más duras y apasionantes de la historia al imponerse a los moscovitas por 93-91. Diamantidis era elegido Mvp de la final bien secundado por Tomasevic y Siskauskas, mientras que en el Cska destacaban Matjas Smodis y Theo Papaloukas. Dos años más tarde, de nuevo en la final, Obradovic repetía triunfo sobre Messina rompiendo el favoritismo del Cska tras una primera parte memorable, donde la labor de Pekovic cargando de faltas a Lorbek y el extraordinario (y ofensivo) planteamiento del de Cacak, otorgaban al Panathinaikos una ventaja de 20 puntos al descanso (48-28) tras la enésima genialidad de un espectacular Jasikevicius. Tras alcanzar los 23 puntos de ventaja en el tercer cuarto, la subida del tomo defensivo volteo el partido hasta el punto de que Ramunas Siskauskas llego a disponer del lanzamiento triple que pudo haber volteado el definitivo (73-71).





CSKA MOSCÚ










Campeón de Europa: 6 (1961, 1963, 1969, 1971, 2006 y 2008)

Subcampeón de Europa: 5 (1965, 1970, 1973 , 2007 y 09)

Final Four: 11ª (1996, 2001, 2003, 2004, 2005, 2006, 2007, 2008,2009 , 2010 y 2012)

Otros títulos europeos: -

Ligas: 44 (24 Urss, 18 Rusia y 2 Vtb)

Copas: 8 ((3 URSS, 4 Rusia 1 VTB)



Esta temporada:



Fase regular: 1º Grupo B 10-0

TOP 16: 1º Grupo E 5-1

Cuartos de final: 3-1 a Bilbao Basket

Total: 18-2



Tras ocho años de presencia consecutiva en la final four, el Cska vivía la temporada pasada un imprevisible drama deportivo que le llevaba a quedar fuera incluso del top 16. Después de un inicio alentador, el empeño de Dusko Vujosevic en cambiar la forma de juego del equipo chocaba con su incapacidad de comunicación, repitiendo los problemas que el técnico montenegrino había sufrido en Granada o alguna de sus paradas en la Lega. Con el equipo envejecido, castigado por las lesiones y totalmente deprimido, la sustitución del ex entrenador del Partizan no surtía el efecto esperado y la solución interina ofrecida por Dimitry Shakulin (actual segundo) se tornaba en estéril, por lo que el club moscovita decidía apostar por un Jonas Kazlauskas, que, pese a comenzar con 4 derrotas en 11 partidos y caer en la final de la VTB, si conseguía sentar las bases de un nuevo Cska. Con Khryapa dando tomo físico al ser utilizado como alero, Kazlauskas apostaba abiertamente por Aleksey Shved y Andrei Vorontsevith logrando, a la par que el enésimo triunfo liguero, comenzar a trabajar en un Cska renovado. Las retiradas de Trajan Langdon y J.R. Holden así como la salida de Matjas Smodis rumbo al Cedevita, suponían el paso definitivo en una renovación que se tornaba ilusionante con la llegada de jugadores de la talla de Milos Teodosic, Nenad Krstic o Darjus Lavrinovic y que pasaba de ilusionante a fantástica con la contratación de Andrei Kirilenko.



Así, con una plantilla descomunal, el Cska ha pasado por la euroliga mostrándose como un rodillo cediendo solo dos victorias y ofreciendo un juego coral, ofensivo y de fuerte espíritu colectivo, hasta el punto de que ni siquiera la lesión de un Kirilenko que probablemente haya sido el mejor jugador de la euroliga, afectara en gran medida al funcionamiento del grupo. Con un tono físico espectacular, la buena conexión de Milos Teodosic con el grupo nacional encarnado en los Kirilenko, Khryapa o Shved ha acabado por conformar un Cska sin egoísmos y con vitola de claro favorito. Con todo, la irregularidad en el tiro exterior en momentos puntuales y la falta de tensión en otros dejan abierta la puerta a la duda, muy especialmente cuando enfrente se halla un Zeljko Obradovic dispuesto a olfatear cualquier signo de debilidad.



LOS JUGADORES









Recuperando el nivel que hace dos años le llevo a ser el Mvp de la euroliga, Milos Teodosic se ha asentado rápidamente en Moscú olvidando un ultimo año difícil en el Pireo donde nunca llego a encajar del todo con Spanoulis (no parece casualidad, que con la baja del griego Teodosic repitiera mvp en la final de copa griega…siendo clave así en los dos únicos títulos del Olympiacos en los últimos años). A su buena conexión con Nenad Krstic, el base serbio ha conseguido unir una muy buena química con jugadores como Alexei Shved o Andrei Kirilenko, siendo fundamental en el buen devenir del colectivo que dirige un Kazlauskas que, finalmente, confía plenamente en la labor del de Valjevo. Capaz de dominar el partido tanto anotando como sin ser el protagonista directo, Teodosic ha vuelto a asentar su tiro y si bien en ocasiones su selección es cuestionable, su facilidad para generárselo en los momentos clave resulta muy útil. Creativo y especial, la defensa sigue siendo su gran lunar pese a ciertos, y muy esporádicos, signos de mejoría. Como relevo de Teodosic, o puntual compañero de perímetro, Jamont Gordon ha dejado atrás sus problemas de la temporada pasada para adaptarse a un rol menor sin aparente queja. Encargado de subir el tomo defensivo, en ataque su potencia en campo abierto le permite finalizar en transición, mientras que en estático presenta una clara mejoría en el tiro, en especial tras bote y desde la media distancia. Con un papel muy residual en la euroliga (ha sido uno de los descartados en todos los partidos de cuartos de final) Anton Ponkrashov esta viviendo una complicada temporada donde no ha conseguido aprovechar los minutos que Kazlauskas le otorgo en los primeros meses de competición en la Pbl y la Vtb. Buen defensor cuando esta centrado (fue clave en 2007 secando en la final del eurobasket a Navarro) su buen tono físico y su capacidad para llevar a sus defensores al poste, podrían otorgarle opciones de entrar entre los 12 elegidos, pero la desidia mostrada en buena parte de la temporada, su falta de velocidad y su cada vez más errática zurda en el tiro (17% en la Pbl , 2-6 en euroliga y 25% en la Vtb) juegan en su contra.



Viejo conocido de un Kazlauskas a cuyas ordenes se colgó la medalla de bronce en los juegos de Sydney e hizo historia con el triplete del Lietuvos en 2002, Ramunas Siskauskas esta partiendo como escolta titular dotando de una mayor capacidad física al quinteto inicial de los moscovitas. Menos rápido de piernas y con un rol menos preponderante, el lituano es además el encargado de dar los breves descansos de Kirilenko en el puesto de 3. A buen nivel defensivo, Siskauskas sigue ofreciendo inteligencia en ataque y seguridad en el tiro exterior, lo que le convierten en un aval de cara a partidos como los que se esperan en Istambul. Sexto hombre habitual, aunque presente casi siempre en los momentos de la verdad, Aleksey Shved esta confirmando definitivamente, en realidad ya fue clave en la final del año pasado, todo lo que su potencial parecía apuntar. De excelente tren inferior, Shved es una flecha en la transición y un excelente finalizador. De carácter peculiar, el trabajo defensivo sigue siendo su gran margen de mejora, mientras que en el tiro, a su conocida facilidad para generárselo desde la media distancia, ha añadido una mayor consistencia desde el triple lo que junto a su espectacular uno contra uno, le convierten en una amenaza ofensiva de primer nivel. Tras su buen papel en el Cholet, Sammy Mejia no esta consiguiendo hacerse un hueco en la exigente rotación del Cska. Buen tirador, el dominicano adolece de poca claridad en el 1*1 así como de poca predisposición defensiva. Descarte habitual, su papel como revulsivo en el tiro podría abrirle alguna opción en Estambul. A diferencia de Mejia, Evgeniy Voronov ha ido ganándose un hueco en el corazón de Kazlauskas a base de tesón defensivo (no es raro verle trabajar sobre el base rival) y actividad constante, recordando al jugador que se gano un sitio en la selección rusa para el mundial 2010. Mejorado en el tiro exterior, sobre todo desde los laterales, su exhuberancia física le permite tanto encarar con fuerza el aro como emparejarse a bases o aleros.

En el puesto de 3, Andrei Kirilenko esta completando una temporada espectacular ya no solo por su calidad sino también por su carácter y compromiso con el equipo. Enorme defensor, su continua actividad y su envergadura le convierten en un aval tanto en la defensa individual como en la intimidación. Excelso reboteador, ofensivamente es capaz de aportar sin gastar un gran número de tiros. Con facilidad para forzar faltas y jugar sin balón, su falta de naturalidad en el manejo de balón y algo de lentitud en el tiro exterior son las únicas pegas de un jugador total que aspira a completar una temporada imborrable. La definitiva estancia del ex de los Jazz, ha redundado en la falta de espacio para un Nikita Kurbanov que no obstante ha aprovechado bien sus escasas oportunidades. Fuerte y con capacidad para jugar como 4, Kurbanov es peligroso jugando de fuera adentro aunque algo irregular en el tiro exterior.



Recuperado de sus problemas físicos, Viktor Khryapa vuelve a ser una de las claves del gran rendimiento de los moscovitas. Establecido como 4 tras la llegada de Kirilenko (con Kazlauskas el año anterior había vuelto al puesto de 3), Khryapa ha perdido algo de explosividad en el juego, pero ha ahondado en las características que le convierten en un jugador tan especial. Gran defensor y sólido reboteador, Khryapa puede anotar por línea de fondo o desde el triple, pero cobra su verdadera dimensión en el juego a través de su tremenda capacidad de pase. De carácter fuerte, su tranquilidad y la pausa con la que lee el juego le convierten en muchas ocasiones en un segundo base para el equipo. Con menos oportunidades que el año pasado, Andrei Vorontsevich esta tratando, en euroliga, de adaptarse a un rol que solicita aportación directa en escaso tiempo. Más irregular en el tiro de lo acostumbrado, Vorontsevich sigue siendo una amenaza de cara al aro tanto por su buena mano como por su capacidad de penetrar. Buen taponador y correcto pasador, sufre en la defensa del poste bajo y, en ocasiones, necesitaría un punto más de pausa en su juego. En la tónica de sus últimas temporadas, es decir de más a menos, Darjus Lavrinovic parece llegar a la final four en un momento delicado de forma. Capaz de alternar las posiciones de 4 y 5, en esta ultima ha sido superado en la rotación por un Kaun más limitado pero con las ideas más claras. Con todo, el jugador lituano ya demostró en Fenerbache ser capaz de aportar en el momento clave, por lo que no es descartable que Kazlauskas tire de él, buscando explotar su buena mano del exterior, su buena sintonía con Krstic o su capacidad taponadora.



Extremadamente regular, de no haber mediado el fichaje de Andrei Kirilenko, es muy probable que hoy Nenad Krstic fuera el principal candidato a llevarse el Mvp de una euroliga en la que el pivot serbio ha mostrado su mejor cara. Sobrio y eficaz, Krstic se esta mostrando sólido en el rebote, muy resolutivo en el poste bajo y acertado en la media distancia. Beneficiado de su buena sintonía con Teodosic o Khryapa y de las ventajas creadas por los exteriores, Krstic esta siendo un martillo pilon logrando unos porcentajes de tiro extraordinarios. Con más minutos según ha avanzado la temporada, Sasha Kaun ha sabido ganarse la confianza de un Jonas Kazlauskas que no parecía tener mucha fe en el ex de Kansas. Contundente en las finalizaciones y peleón en el rebote ofensivo, Kaun sufre en defensa pagando un peaje demasiado habitual en forma de faltas pero no escatima nunca esfuerzo y actividad, amen de ser duro en los bloqueos. Capaz de hacerse grande en la zona, Kaun mantiene un serio problema con los tiros libres…problema compartido por un Dmitry Sokolov, que si bien ha cambiado su peculiar mecánica de tiro sigue mostrando sus habituales carencias en la línea del 4´60. Descartado casi con toda seguridad, Sokolov es un pivot de corte clásico, torpe de movimientos y algo lento en defensa aunque capaz de finalizar con regularidad cuando recibe en ventaja en el poste bajo.



EL ENTRENADOR:



“En los últimos decenios, el interés por los ayunadores ha disminuido muchísimo. Antes era un buen negocio organizar grandes exhibiciones de este género como espectáculo independiente, cosa que hoy, en cambio, es imposible del todo. Eran otros los tiempos…”



Con cuatro derrotas en sus primeros once partidos, sumadas a la decepción de caer ante el Khimki en la final de la Vtb, no puede decirse que los comienzos de Jonas Kazlauskas fueran fáciles en el Cska. Sin embargo, con perseverancia en sus ideas el técnico lituano acabo por definir una idea de equipo que esta temporada, con mejores mimbres, esta cerca de sublimar. Amante de la fluidez ofensiva y excelente preparador de partidos, Kazlauskas gusta de otorgar cierta libertad ofensiva a sus jugadores apostando por las transiciones y las ventajas generadas a través del 1*1. Buen gestor de grupos y con más carácter del que generalmente parece atribuírsele, el técnico de Panevezys afronta una final four que puede ser decisiva en su lugar en la historia. Con el eterno agradecimiento de los que amamos el lado estético del juego por su triunfo en el 99(y la semi de Sydney), una segunda euroliga con le colocaría en el selecto club de entrenadores que lo han logrado con más de un club (Obradovic, Maljkovic, Pavlicevic, Messina, Bianchini y Gomelsky), pero una decepción en Istambul podría marcar, dada la valoración externa que se hace de la plantilla, una carrera que analizada al detalle da la sensación de estar un tanto olvidada, y que ahora, cuando la belleza del juego vive de nuevo amenazada con el mismo olvido del viejo ayunador, quizás seria justo recordar.





Nacido en Panevezys, Kazlauskas se cría baloncestistiamente bajo el cobijo de una de las figuras clave para entender el desarrollo del “Krepsinis” lituano, el excelente entrenador y formador Raimundas Sargunas (para más detalles se puede acudir a las imprescindibles “Crónicas lituanas” de Juan Carlos Gallego/Cheatum6). Tras su periodo de formación, Kazlauskas da el salto al Statyba Vilnius, permaneciendo en el club de la capital durante casi tres lustros. Tradicional segundo equipo del país, el Statyba logra en el 72 su primer triunfo en el torneo domestico, en el 74 logran el ascenso a la primera clase del basket soviético, mientras que en la temporada 78/79, logra el histórico tercer puesto en la liga de la Urss, superando al Zalgiris y quedando tan solo por detrás del Cska de Moscú y el Stroitel de Kiev. Bajo la dirección de Rimantas Endriajaitis y con una plantilla en la que figuraban jugadores como Andriunas, Urba, Balocka, Daugela, Deimantavicius, Rimas Griskis o Algimantas Pavilonis.












Tras su retirada como jugador, Kazlauskas decide emular a Sargunas y comienza su singladura como técnico, recibiendo su primera gran oportunidad al hacerse con el banquillo del Zalgiris en la temporada 94-95. Paralelamente, pasa por diversas categorías inferiores de la federación lituana dirigiendo a las selecciones U-16 y U 18 y logrando su primer gran éxito en el eurobasket junior de Tel Aviv . Tras comenzar el torneo cayendo por 79-74 ante la Eslovenia de Marko Milic y Rasho Nesterovic, Lituania vence los cuatro siguientes encuentros y accede a las semifinales, donde con un parcial de 7-20 en los últimos minutos elimina a una España donde destacan Dario Quesada, Iker Iturbe y Rodrigo De La Fuente. Ya en la final, ante la Croacia de Vujcic y Zemljic, Lituania repite el acto de fe y tras verse hasta 14 puntos abajo acaba por hacerse con el título gracias a una canasta sobre la bocina certificando un oro en el que destacan jugadores como Sestokas, Marciulionis o el propio Sarunas Jasikevicius:


Asistente de Garastas con la absoluta en el bronce de los juegos de Atlanta, el técnico de Penevezys ve respaldado su buen papel con su nombramiento como nuevo seleccionador lituano, debutando oficialmente en el eurobasket de 1997.



Si se repasa la historia baloncestistica de Lituania tras su ultima independencia, se puede observar que su gran objetivo han sido siempre los juegos olímpicos y, por extensión, los europeos previos.Tras su emancipación de la URSS, los lituanos se alzaron con un meritorio bronce en Barcelona 92 .Tras este exitazo, ni siquiera se clasificaron para el eurobasket de Alemania, quedando como consecuencia fuera del mundial de Canada. En el europeo de Atenas´95, con el billete a los juegos en disputa, se alzaron con la plata, tras la maravillosa final de Atenas, dando paso a un nuevo bronce en Atlanta 96. En esa tesitura Kazlauskas prepara el europeo de Barcelona, con las ausencias de sus principales estrellas (no acuden ni Sabonis, Marciulionis ni Kurtinaitis), y construyendo el equipo en torno a un Arturas Karnisovas (de cuyo padre, Mykolas, había sido compañero en el Statyba) que responde firmando un enorme torneo. Invicta en la primera fase, Lituania cae en el segundo grupo yéndose a un cruce de cuartos ante Yugoslavia. La vigente campeona, había sido el verdugo de los bálticos tanto en la final de Atenas como en las semifinales de Atlanta y llegaba comos segunda, pues en la primera fase había cedido en su duelo ante Italia (los de Obradovic se vengarían en la final…aunque Italia repetiría triunfo en el mundial 98 y en las semis del eurobasket 99). Como en los dos años anteriores, la maquinaria “plavi” resulta inabordable y con 21 tantos de Danilovic se impone por un claro 75-60. Con seis plazas en juego para el mundial de Grecia a disputar el siguiente verano, los de Kazlauskas se juegan el pase al día siguiente ante una Polonia que de la mano de un gran Tomczyk se había encarnado en una de las revelaciones del torneo, llegando a vencer incluso a selecciones como Croacia. Con su mejor defensa a lo largo del torneo, Lituania no da opción y con 21 puntos de Karnisovas y Einikis vence por un claro 76-55 que equivale al primer pasaporte mundialista de la historia de la pequeña republica, antes de que en la despedida, y con el quinto puesto en juego, caigan antes los anfitriones por un ajustado 94-93 en un partido donde se vuelve a lucir Karnisovas (32 puntos) bien secundado por Sarunas Jasikevicius (13 puntos y 6 asistencias).



Un año más tarde, en el mundial de Grecia 98, se repiten las ausencias pero la consolidación del bloque del eurobasket comienza a dar sus frutos. En una primera fase magnifica, Lituania cuenta todos sus partidos por victorias, incluyendo el partido ante Usa, donde los 29 puntos de Karnisovas y los 15 de Stombergas suponen la punta de lanza para que los “profesionales europeos” muerdan por primera vez el polvo (después Usa solo perdería, y de manera increíble, la semifinal ante Rusia colgándose finalmente el bronce). Ya en la segunda fase, Lituania arranca cayendo ante Australia y venciendo a Argentina, lo que convierte su duelo de la última jornada ante España en absolutamente clave: si gana será primera y se cruzara con el ganador del Puerto Rico-Italia, pero si pierde será tercera y deberá enfrentarse a Rusia, vigente subcampeona y bronce en el anterior europeo, en cuartos. Con España dominando de inicio, la vuelta a la pista de un Karnisovas que había sufrido un aparatoso golpe, mete de lleno a los Kazlauskas en el partido hasta el punto de que entran en los últimos segundos con ventaja en el marcador. Finalmente dos tiros libres de Alfonso Reyes envían el partido a la prorroga, donde la mayor frescura de los de Sainz y el acierto de Herreros dictan sentencia. En el cruce de cuartos, Karnisovas vive su peor día del torneo, lo que unido a los 31 tantos de un inspirado Karasev apean a una Lituania, que no obstante se va de su primer mundial con la frente muy alta. Un año más tarde, con el pase a los juegos de Sydney sobre la palestra, Arvydas Sabonis regresa al equipo convirtiendo a Lituania en una de las favoritas…al menos hasta que en el debut, caen de manera sorprendente ante una Republica Checa donde el 6/6 en triples del joven Lubos Barton resulta clave. Pese al varapalo, Lituania reacciona venciendo a Alemania y Grecia, para, posteriormente reafirmar su favoritismo en la segunda fase encadenando tres triunfos ante la Croacia de Kukoc, Turquia e Italia que le permiten pasar como primera de grupo. En el cruce de cuartos, espera una España que se había colado en los cruces de manera poco menos que milagrosa. Tras arrastra una dolorosa derrota de la primera fase ante Eslovenia, con Smodis destrozando la defensa española, los de Lolo Sainz caían de manera clara en las dos primeras jornadas de la segunda fase ante Francia y Yugoslavia. Virtualmente eliminada, un triple desde su propia pista de Goodes da la victoria a Israel ante Eslovenia en la penúltima jornada, resultado que permitía a los hispanos mantener sus opciones siempre y cuando vencieran a los hebreos y los anfitriones galos hicieran lo propio con Eslovenia. Con España cumpliendo cómodamente su parte, Francia termina completando el favor, remontando 13 puntos y dejando a Eslovenia con su sempiterna sensación de oportunidad perdida. Así, con el recuerdo del partido mundialista, Lituania afronta el cruce con ciertas precauciones, que pronto se ven justificadas. Liberada tras ejercer de turista en el precipicio, España despliega toda su intensidad defensiva con un Iñaki De Miguel excelso en su marcaje a Sabonis, mientras un Herreros excepcional (28 puntos) martillea el aro lituano. Con Jasikevicius como estilete (5 triples para 22 puntos…prácticamente todos al final) Lituania pelea hasta el final pero sucumbe por 74-72. Tras los bronces de Barcelona y Atlanta, el pasaporte a Sydney pasa por lograr, la menos, la sexta plaza o, lo que es lo mismo, vencer el siguiente partidos. Superada la decepción, Lituania supera con claridad a Turquia (80-56 con 16 puntos de Praskevicius y 14 de Okur) logrando el último billete para tierras australianas.

Ya en los juegos de Sydney, la plantilla, por cierto sin ningún jugador de la capital en sus filas, respecto a la presentada en el eurobasket sufre dos bajas notables: Arvydas Sabonis y Arturas Karnisovas. Para sustituirlos, Kazlauskas apuesta por dos jugadores de la generación del 78, Darius Songaila y Ramunas Siskauskas, aunque lógicamente las expectativas bajan de manera notable. Con todo, en un partido trabado hasta lo indecible, Lituania comienza dando la cara y cayendo por un ajustado 50-48 ante la Italia de Tanjevic, a la sazón vigente campeona europea. Tras la pirrica derrota, el grupo de Kazlauskas se rehace en la segunda jornada derrotando con claridad a Francia (81-63), para dos días después hacer sudar a los Estados Unidos (Gary Payton, Garnett, Carter, Mourning, Kidd…). Con solo tres puntos abajo al descanso, la buena labor de Songaila en la pintura y la excelsa dirección de Jasikevicius permiten a Lituania disputar el partido de tu a tu, hasta el punto de convertirse en la primera selección que cede por menos de 10 puntos ante una selección Nba (85-76). Ausentes Karnisovas y Sabonis, Jasikevicius se erige en el líder indiscutible de la selección, culminando una temporada fantástica (mvp de la copa eslovena con un Olimpija al que metería en cuartos de la euroliga, eliminado al Olympiacos con un 7/7 en triples en el Pireo) y creciendo según avanzan los partidos. Tras dar la cara ante Usa, Lituania cierra la primera fase imponiéndose a China y Nueva Zelanda, pasando a los cuartos de final como tercera de grupo. En los cuartos, su rival es un viejo conocido, una Yugoslavia dirigida por Zeljko Obradovic que llega al partido clave sin Danilovic (su maximo anotador hasta ese momento) y como segunda de grupo tras haber caído en la última jornada de la primera fase ante una Canada magistralmente dirigida por Steve Nash (26 puntos, 8 asistencias y 8 rebotes). Con Stojakovic y Bodiroga llevando el peso ofensivo, Yugoslavia planta cara pero en la segunda mitad la magia de Jasikevicius y la solvencia interior de un Einikis pletórico consuman la venganza lituana con un claro 76-63. En semis, espera el gigante Usa por lo que, pese a la gran imagen ofrecida en la primera fase, ni los más optimistas esperan otra cosa que la certificación de la superioridad de los de Tomjanovich, pero lo sucedido es bien recordado:







Filósofo y escritor, Jean Paul Sartre esta considerado como uno de los padres del existencialismo europeo y se mostró como un firme partidario de la literatura del compromiso. En uno de sus cuentos más famosos, el muro ambientado en la guerra civil española, relata la historia de un miliciano republicano condenado a muerte, que en la noche anterior a su ejecución toma por primera vez una conciencia física de su propia muerte. Su única opción para ser liberado pasa por delatar a sus compañeros, el se niega pero por vivir una noche mas facilita al enemigo una información falsa. La fatalidad, hace que sus aliados temerosos de que los delate, deciden cambiar de refugio huyendo hacia un cementerio. Justo al lugar falso que el reo creía enviar a sus captores. Pero lo relevante de la historia, es que el preso cree que ha mentido y que va a ser ejecutado. Por primera vez, toma verdadera conciencia de que va a morir-"ser hombre es la pasión inútil de ser Dios"- y cuando lo liberan no siente nada. Al haber tomado conciencia de su mortalidad, en cierto modo, ha muerto un poco. Los libros de historia deportiva siempre destacaran la victoria de Argentina en Indianápolis como la primera de una selección NBA, pero independientemente de que aquel tiro de Sarunas Jasikevicius no encontrara el aro (Lituania perdió el partido anteriormente con varios errores infantiles), aquella fue la primera derrota USA, porque si bien , a diferencia del miliciano, los norteamericanos no tomaron conciencia de su debilidad, el resto del mundo abrió los ojos y al igual que en otro clásico de la literatura popular exclamó que el emperador estaba desnudo…con todo, más allá de la subversiva resistencia baltica, lo mejor estaba por llegar y es que, con un espectacular 89-71 (28 de Stombergas) Lituania sumaba ante los anfitriones el tercer bronce de su historia. Pese al enorme éxito, la carrera en la selección de Kazlauskas tocaría a su fin tan solo un año después tras un decepcionante eurobasket de Turquia. Tras vencer en los dos primeros encuentros, Lituania caía en el tercer acto ante Francia viéndose obligada a jugar el cruce de repesca ante sus vecinos letones que terminaría por convertirse en uno de los partidos más duros de la historia para los seguidores lituanos. Erráticos y fríos desde el inicio (7/29 en triples con 0/7 para Jasikevicius), los de Kazlauskas eran incapaces de frenar la hemorragia de una Letonia especialmente atinada (14/22 desde el 6´25 con 25 puntos para Bagatskis) quedándose de nuevo fuera del mundial del año siguiente.

El resto de la historia es cíclica, así en el eurobasket de 2003 no solo conseguían el pase olímpico sino que se alzaban con el titulo europeo, con un despliegue ofensivo de primer nivel y sin ceder ni un solo encuentro. Tras alcanzar las semifinales en Atenas, el europeo 2005 alcanzaba el record de ausencias (solo acudia Siskauskas entre los grandes) pese a lo cual tuvieron un digno papel. Tras un discreto mundial de Japón, de nuevo la sombra de los juegos movilizaba al basket lituano que con un equipo de gala lograba el bronce en Madrid (cediendo solo un partido, la semifinal ante Rusia con un memorable duelo entre Siskauskas y Kirilenko) que abría de par en par las puertas de los juegos. El, Eurobasket celebrado en España era en cierta medida, una prueba más del interés olímpico lituano. Cuando la FIBA otorgaba el eurobasket 2007 a España, Lituania y Polonia fueron las finalistas. Dada la calidad de sus propuestas la federación internacional decidió otorgarles los dos próximos torneos ante lo que Lituania solo puso una condición: acoger el del 2011... que servirá de clasificatorio para los juegos de Londres. Semifinalistas olímpicos en China y nueva decepción en el siguiente eurobasket donde de nuevo se quedaban sin plaza para el mundial, al menos de manera directa…

Finalmente, y gracias a la concesión de una de las wild cards de la Fiba, Lituania estaba en Turquia…y aunque una vez más el número de ausencias sería notable, aunque esa ocasión el equipo dirigido por Kemzura cambiaba la historia consiguiendo un tan inesperado como merecido bronce.



Volviendo a la figura de Jonas Kazlauskas, a nivel de club, el técnico de Panevezys había conseguido mantener la hegemonía local del Zalgiris, pero donde conseguía saltar a la fama era en el ámbito europeo. Emulando al histórico Zalgiris ochentero, los de Kaunas alcanzaban de manera consecutivas las finales de la copa Saporta y la euroliga, aunque a diferencia de sus predecesores esta vez los verdes saldrían como vencedores. En el 98, un excelso Stombergas (35 puntos) decide la final de la Saporta ante un Stefanel que llegaba tras apear al Panathinaikos de Dino Radja de las semifinales, ahondando en la herida de un Ferdinando Gentile que en ese momento perdía su sexta final europea (séptima si contamos a nivel de selecciones el eurobasket del 91). Un año después, y en una Europa arrasada por el virus del baloncesto control, el Zalgiris regresaba a la máxima competición bordando un baloncesto ofensivo libre de ataduras y protagonizando una de las mayores sorpresas del torneo al llevarse la final four derrotando de manera consecutiva a los dos últimos ganadores de la euroliga: al Olympiacos en semifinales y a la Kinder de Bolonia de Messina en la final. Con todo, habría que apuntar que la trayectoria del Zalgiris no se circunscribió a la final four, ya que no en vano, los de Kaunas habían liderado las dos primeras liguillas, solventado los dos cruces previos (ante Ulker y Efes) por la vía rápida. Tras su paso por el Zalgiris, Kazlauskas regresa a Vilnius para dirigir a un Lietuvos Rytas al que lleva a protagonizar la mejor temporada de su historia. Pese a comenzar con la decepción de verse fuera de la euroliga al caer en la previa ante el KK Split, los capitalinos logran el segundo título de su historia al imponerse en la final al Zalgiris. Considerada como la mejor final de la historia del basket lituano, el Lietuvos necesitaría llegar a la prorroga del séptimo partido para certificar su condición de campeón gracias al definitivo 86-78 en el que destacaban los 31 puntos de Arvydas Macijauskas y los 25 de Ramunas Siskauskas. Por si fuera poco, el Lietuvos completa el doblete llevándose el título de la Nebl (que ese año llego a contar con representantes de hasta 19 países…). Tras otro par de temporadas a buen nivel, Kazlauskas ficha por un Olympiacos en plena crisis económica y formado de retales, pese a lo cual el lituano consigue dotarle de una sólida identidad…aunque la falta de títulos comience a difuminar un tanto su figura. Después de su paso por el Pireo, y hasta la llegada al Cska, Kazlauskas vuelve a trabajar a nivel de selección. Con China logra el título asiático en 2005, el pase a la segunda fase del mundial de Japón (dejando fuera a Puerto Rico) y el pase a cuartos en “sus” juegos, donde una dura derrota ante Lituania tapa en parte la buena imagen obtenida en los encuentros ante España (forzando la prorroga) y Usa o en la victoria clave ante la Alemania de Nowitzki. Por último, en Grecia, con las renuncias de Diamantidis y Papaloukas, Kazlauskas comienza la renovación de la selección helena, tanto a nivel de nombres como en su apuesta por un juego más directo, logrando el bronce en el eurobasket de Polonia, aunque un año más tarde, la derrota en octavos de final ante España pondría punto y final a su etapa de seleccionador.



http://uzlietuva.lt/video/1BNB2HKKHMBA/Jonas-Kazlauskas





http://uzlietuva.lt/video/1BNB2HKKHMBA/Jonas-Kazlauskas

LOS NÚMEROS (entre paréntesis los jugadores más destacados)



PUNTOS: 85´5 (Krstic 14´7, Kirilenko 14, Shved 10´7)

REBOTES: 34´7 (Kirilenko 7´3, Krstic 5´9, Khryapa 3´9)

ASISTENCIAS: 19´5 (Teodosic 5´2, Khryapa 3´3, Shved 3´2)

TAPONES: 3´7 (Kirilenko 1´9, Khryapa 0´6, Krstic 0´4)

VALORACION: 102´45 (Kirilenko 24´1, Krstic 19´6, Teodosic 11´7)

TIROS DE 2 %: 57´6 %

TIROS DE 3 %: 39´2 %

TIROS LIBRES: 78´1 %



EL JUEGO



ATAQUE



NÚMEROS: Más de 85 puntos por partido, valoraciones y porcentajes de escándalo, paralelamente a las sensaciones el Cska presenta los mejores números ofensivo de la euroliga con mucha diferencia.



TIRO EXTERIOR: Con cerca de un 40% en triples no debería ser un problema, pero por momentos el Cska ha abusado del tiro y de sus rachas ha dependido en momentos puntuales de algún partido.



ESPACIOS: Con los 4 abiertos, el cska abre mucho la pista para que los exteriores puedan generar ventajas desde el 1*1.



EQUILIBRIO: Con 4 jugadores por encima de los 10 puntos de media, el Cska presenta una amenaza ofensiva tanto desde la distancia como en la pintura.



CIRCULACIÓN: Por estilo de juego no llega a los niveles mostrados en la época Messina, pero hasta el momento el Cska no ha renunciado al pase extra.



DEFENSA:



INTENSIDAD: Con picos brutales, a los moscovitas les ha costado encontrar sus señas defensivas de manera continuada. Habitualmente con unos minutos les sobra, pero en una final four…



LA LÍNEA EXTERIOR: Cuando coincide Teodosic y Shved, la defensa colectiva del cska sufre lo suyo para mantener el aro cerrado. En el lado opuesto la pareja Khryapa-Kirilenko ahoga espacios y tapa agujeros con una facilidad pasmosa.



INITIMIDACIÓN/TAMAÑO: Quizás el número de tapones no llame especialmente la atención, pero con Kirilenko ayudando a los pivots, anotarle al Cska al poste bajo resulta muy complicado.



ALTERNATIVAS: Muy puntualmente, Kazlauskas ha enseñado una zona en la que la movilidad de Kirilenko y Khryapa ahogaba los espacios.



CAMBIOS AUTOMATICOS: En buena parte por la versatilidad y físico de sus aleros, el cuadro moscovita no duda en cambiar sin importarle en demasía los emparejamientos.





PANATHINAIKOS












Campeón de Europa: 6 (1996, 2000,02, 07 ,09 y 11)

Subcampeón: 1 (2001 Suproliga)

Final four: 10ª (1994, 95, 96, 2000, 01, 02, 05, 07, 09 , 11,y 12)

Otros títulos europeos: -

Ligas: 32

Copas: 13



Esta temporada:



Fase regular: 2º Grupo B 7-3

TOP 16: 1º Grupo G 4-2

Cuartos de final : 3-2 al Maccabi

Total: 14-7



Rompiendo con la ciclotimia que había presidido buena parte de su última década, el Panathinaikos tendrá ocasión de defender su corona de campeón de Europa repitiendo por primera vez desde 2002 presencia en la final four por dos años consecutivos. Tras un verano de incertidumbre económica, el club del trébol se presento en la casilla de salida menos debilitado de lo que los augurios vaticinaban ya que, si bien perdía piezas clave como Fotsis o Nicholas, la continuidad de Zeljko Obradovic en los banquillos y de Dimitris Diamantidis en la pista, sustentaban un proyecto al que regresaba Sarunas Jasikevicius y al que se incorporaban jugadores como David Logan o Steve Smith. Con un Diamantidis de nuevo excelso, la consolidación de Calathes y el regreso de un Jasikevicius con un rol limitado en el minutaje pero clave en el aspecto ofensivo, han permitido a Obradovic retomar su idea de jugar con dos o hasta incluso tres bases en pista, dotando al equipo de un mayor control del juego. La solvencia de Sato, la recuperación en el tramo de final de Perperoglou y el asentamiento también en euroliga de Kaimakoglou, han sustentado a su vez un tono físico completado por la gran temporada de Mike Batiste. De menos a más durante el año, el Panathinaikos llega a Estambul con una rotación asentada de hasta 12 jugadores útiles, Obradovic ha reinventado por enésima vez al Panathinaikos, dotando a los atenienses de una indudable solvencia defensiva y una clara vocación de transición. Capaz de jugar a dos ritmos, el exceso de sobrepases por falta de punch en el tiro y ciertos apagones ofensivos son alguna de las lagunas de un equipo que, avezado a estas lides, y con el mago Zeljko en el banquillo no renuncia a nada.



PEQUEÑO APUNTE HISTORICO



Dominadores de nuevo-Los años oscuros



Que el Panathinaikos es a día de hoy uno de los grandes dominadores del panorama cestita en el viejo continente es una obviedad que llega avalada por unos impresionantes números que incluyen 6 euroligas en los últimos 16 años (5 en la pasada década). A este periodo de fortaleza continental el Panathinaikos le ha unido en las últimas temporadas el de una competición helena que domina con una autoridad casi aplastante. Ganador de 13 de las 14 ultimas ediciones ligueras (con la única excepción de 2002 donde caía en semifinales y donde finalmente el AEK de Zisis sería campeón), el Panathinaikos vive el que es su segundo gran reinado en la HEBA y lo hace tras superar la peor racha de sus historia…



Fundado en 1922 como parte de la estructura del PAO, entidad polideportiva fundada ocho años antes como una escisión del Panellinios (la primera significa para los atenienses por el más genérico para los helenos de la segunda…aunque el motivo del cisma vino por la negativa de estos últimos a desarrollar una sección futbolística), el Panathinaikos logra su primer grane éxito con la consecución del título liguero de 1946 que revalida al año siguiente. Ganador de otros 7 títulos en las dos décadas siguientes, es sin embargo en la década de los 70 cuando el Panathinaikos se erige en el gran dominador de la competición helena, de tal manera que entre 1971 y 1984, los verdes se llevan 11 títulos ligueros. Dirigidos desde el banquillo por entrenadores de la talla de Mouroutzis o Kostas Politis (clave como jugador en los éxitos de la etapa anterior y seleccionador de la mítica Grecia de 1987), el Panathinaikos alcanza además las semifinales de la Copa de Europa cayendo ante un Varese, que a la postre se proclamaría campeón tras derrotar por un solo punto a la Jugoplastika de Split en la final.

Pero la liga del 84, y con un único alivio en forma de victoria copera en el 86 ante el odiado Olympiacos, marca el punto final a la primera hegemonía “verde” virando el poder hacia una Salónica donde a siete títulos consecutivos del Aris (a los que hay que sumar 6 coperos y tres presencias en la final four) le sigue el segundo entorchado en la historia del Paok.



Llegados los años 90 el club ateniense se rearma económicamente y en el verano de 1992 da el que parece el gran zarpazo contratando a Nicos Gallis al que une a la antigua pareja del Zadar Arijan Komazec-Stojan Vrankovic. Dirigidos por un doble campeón de Europa (86 con Cibona y 91 con Pop 84) como Pavlicevic, los verdes se llevan el título copero pero en liga y en protesta por lo que consideran unos arbitrajes partidistas se niegan a disputar el quinto encuentro de la final dejando en bandeja el título al Olympiacos de un excepcional Zarko Paspalj.

Con la salida de un Komazec cuyos buenos promedios anotadores tapan un montón de problemas personales (de nuevo recomendable acudir a “sueños robados..” en busca de más detalles) el Panathinaikos sigue apostando fuerte y contrata a Aleksander Volkov.

De nuevo la temporada parece bien encaminada, pero tras derrotar en los cuartos de final al Limoges y alcanzar la primera final four de su historia, el Panathinaikos cae ante un Olympiacos sin que los 32 puntos de Volkov puedan con la pareja Paspalj-Tarpley. A la desilusión europea se aúna la domestica donde esta vez el techo son las semifinales antes de que para mayor escarnio el equipo del Pireo sume otro nuevo entorchado liguero.

Los movimientos no cesan, y tras un cambio de cromos con el Olympiacos Paspalj-Volkov, el Panathinaikos adquiere también al otro gran icono heleno un Panagiotis Giannakis que llega al equipo en el momento en el que, por la puerta de atrás, sale su antiguo compañero Nicos Gallis. A esta base se le une la posibilidad de contar en Europa con la presencia de Miroslav Mylonas, quien no es otro que el antiguo campeón del mundo junior Miroslav Peckarski que superados ya los años de rigor como nacionalizado ya puede ocupar esa condición también en el ámbito europeo.

Aunque ya comentada en diversas ocasiones, la movida de las nacionalizaciones en aquella época dio lugar a situaciones realmente extravagantes, como la ya relatada en su día por estos mismos lares (la pego por si a alguien aún le interesa):



Fenómeno global, pero especialmente acusado en Grecia, a mediados de los años 90, la Europa pre-bosman vivió una autentica fiebre de nacionalizaciones que en muchas ocasiones dieron lugar a polémicas de lo más dispares y también, por que no decirlo, a simpáticas confusiones. Sin, ir más lejos jugadores como Petar Naumoski alcanzaron hasta tres pasaportes y con ellos otros tantos nombres ( Polat en Turquia y Pezza en Italia), aunque el fenómeno fue especialmente relevante en los jugadores balcánicos . De esta guisa los Tarlac, Gurovic, Stojakovic o Nesterovic pasaron a ser, respectivamente, Konstantinidis, Malatras, Kinis o Makris, y si bien la lista podría ser interminable (Tsakalidis, Winslow, Tomic o más actuales como Turckan o Papadopoulos), pocos casos tan curiosos como los protagonizados por los estonios Tiit Sook y Aivar Kuusma. Aunque Estonia no había sido nunca uno de los principales focos de poder en el basket soviético (quizás con la excepción del Usk Tartu vencedor de la liga del 49 y subcampeón un año más tarde), en los años 80 la pequeña republica baltica comienza a despuntar y como consecuencia de ello en 1984, por primera vez es reclutado para el Cska un jugador de la capital estonia, el líder del Kalev Tallin, el gran Kheino Enden. Clave en la consecución de un nuevo título, los gestores moscovitas deciden apostar por otro de los jóvenes valores del Kalev: Tiit Sokk, aunque este permanece un último año en la disciplina del Kalev. Base con capacidad para jugar de escolta, de fuerte carácter y gran facilidad para anotar, Sokk ya había destacado en las categorías inferiores.



En el lugar equivocado



El Kalev Tallin realiza una temporada discreta, pero la atención baloncestistica en la URSS esta en otra de las republicas bálticas, concretamente en Lituania, donde el joven Sabonis, excelentemente rodeado de grandes tiradores (Homicius, Kurtinaitis, Iovaisha), guía al Zalgiris al título liguero. De esta manera Sokk llega al TSKA, en un momento delicado en el que el equipo del ejército vive con la obsesión de recuperar el trono. Pero la fuerza del zar lituano es imparable y durante dos años más el TSKA tiene que conformarse con el subcampeonato liguero. Pese a la decepción en el torneo domestico, el rendimiento de Tiik es excelso lo que le abre las puertas de la selección. Con una función más secundaria que en su equipo, Sokk se cuelga la plata en el mundial de España. En 1987 raya a gran nivel, y es una pieza clave para que el TSKA alcance los semifinales de la recopa, donde caen ante el Scavolini de Pesaro, pero queda fuera de la selección.



1988



Es sin duda el año clave en la carrera de Sokk, mejorado en su condición física muestra su mejor nivel y contribuye a la recuperación del título para el Tska, favorecida por la lesión de Sabonis. Pero lo mejor esta por llegar y el estonio, es seleccionado para acudir a los juegos de Seúl, donde se cuelga la medalla de oro, y además, con una presencia relevante (35 minutos en la final). Posteriormente aun conseguiría otras dos medallas (bronce en el eurobasket de Zagreb y plata en el mundial de Argentina).



Vuelta a Tallin



Tras cerrar su etapa moscovita, Sokk vuelve al Kalev Tallin dispuesto a liderarlo a cotas más altas y, si bien la primera temporada no da los resultados no son los esperados, lo conseguiría con creces. Junto a Sokk el Kalev logra reunir a Pehka, base sobrio y excelente defensor, al pivot Sergei Babenko , plata con la URSS en el eurobasket 87, y al joven Pert Kullamae. Sin embargo, el gran impulso llega de la mano de un jugador que habría de ligar su carrera a la de nuestro protagonista: Aivar Kuusma, escolta de físico un tanto endeble, pero con una capacidad de tiro espectacular. Kuusma se había formado en el Tallin, pero a finales del año 90 había dado el salto al Youngstown pride, equipo de la WBL, donde formando pareja exterior con Mario Elie (que posteriormente ganaría tres anillos de la NBA), logra hacerse con el título. Con su reincorporación el Kalev gana en amenaza exterior y poco a poco va creciendo en su juego, logrando encarar los play-off en una forma envidiable. Una vez en las eliminatorias el equipo sigue su ascensión y en una final vibrante, derrotan al Spartak de San Petesburgo y dan a Estonia el primet titulo de su historia.

El año siguiente el kalev debuta en la liga europea, y si bien su participación termina en la liguilla, los estonios dejan la impronta de un equipo alegre y de marcado carácter ofensivo, endosándole al Maccabi 118 puntos o superando por dos veces los 110 ante el Antibes. Sokk y Kuusma cierran su participación en la máxima competición continental promediando más de veinte puntos partidos y despertando el interés de las potencias europeas.



Él vino en un barco…



Capital de Estonia, Tallin pasa por ser uno de los puertos marítimos más importantes del báltico, lo cual iba a tener unas consecuencias inesperadas en la carrera de Sokk y Kuusma.

Acabada la temporada 91/92, Sokk finaliza su contrato, y recibe ofertas de multitud de equipos europeos, aunque de todos ellos la más potente es sin duda la del Panathinaikos, aunque sin duda es la más pintoresca. El club ateniense, alejado del título desde 1984, buscaba desesperadamente recuperar su status en la liga griega y para ello no duda en reparar en gastos y logra el gran golpe de efecto del verano al contratar a Nicos Gallis. Tras el astro heleno, llegan los croatas Komazec y Vrankovic por lo que solo necesita un base para cerrar una plantilla que aspire a todo. El elegido es Tit Sokk, pero hay un inconveniente, necesitan que se nacionalice. En un principio Sokk, rechaza la oferta, pero los atenienses duplican su oferta con la condición de que adopte la nacionalidad griega. La apuesta es arriesgada y enfocada solo a la liga griega, por aquel entonces los nacionalizados debían esperar tres años para disputar partidos internacionales, pero Sokk acepta y alega ser descendiente de griegos, pero la federación helena desconfía. Y es aquí donde la historia toma el cariz de sainete, y en un último giro brillante, la madre de Tiik comparece ante la justicia griega y firma una declaración jurada en la que afirma que su hijo es fruto de una relación extramatrimonial con un marinero griego que había atracado en el puerto de Tallin. Pese a lo rocambolesco del asunto, Sokk recibe el pasaporte griego y adopta su nuevo nombre heleno, Tout Giannopoulos. El Panathinaikos logra el titulo copero, pero se queda a las puertas del título y ya prepara una nueva inversión millonaria.

Mientras Kuusma sigue rayando a gran nivel y lidera al Kalev, que se alza con el título en la recién creada liga estonia. Al acabar la temporada, Aivar lidera a la selección que abre el eurobasket de Alemania, derrotando a los anfitriones por un concluyente 113-103 (30 de Kuusma) y termina en un meritorio sexto puesto. La cotización del Kuusma se dispara y el Panathinaikos, que busca a un tirador pues ha sustituido a Komazec por Volkov, decide repetir la operación. Al igual que Sokk, la madre de Kuusma comparece y también asegura haber concebido a Aivar tras una relación con otro marinero. Pero esta vez la situación se complica y la federación exige la acreditación del padre griego de la criatura. Cuando todo parece empantanado, el Panathinaikos localiza al padre y ambos acuden a firmar los papeles y dejan otro momento para el recuerdo: Kuusma de 1´90, extremadamente pálido, de ojos claros y cabellera rubia junto a su redescubierto padre, un estibador del puerto del Pireo, y afirmando con cierto rubor “bueno, en realidad me parezco mucho más a mi madre..”. Sokk y Kuusma compartieron vestuario durante tres años más, en los que el Panathinaikos no logro el anhelado título liguero y se tuvo que conformar con una copa y una euroliga, que Sokk y Kuusma tuvieron que ver desde la barrera. En 1997 ambos volvieron a Estonia, aunque posteriormente, Sokk aun volvería a la tierra de sus antepasados para ganar una nueva copa con el Aris de Salónica. En la actualidad ambos ejercen como entrenadores y se han encontrado en multitud de ocasiones.



Como ya se adelanta en la historia, el Pao vuelve a caer en las semifinales de la final four ante un Olympiacos que se lleva también la final liguera. Es hora de mirar hacia otro lado y la siguiente apuesta es aún más fuerte, a los banquillos llega un Boza Maljkovic que el año anterior había colado al Limoges por segunda vez en la final four y a la pista toda una leyenda como Dominique Wilkins.

Los inicios son complicados con la ex estrella de los Hawks mostrando una actitud un tanto indolente, pero tras una reunión con Maljkovic el mítico 21 reacciona y resulta clave en el título copero derrotando en la final al Iraklis que comanda otro antiguo nba de prestigio como Xavier McDaniel. Poco dado a los elogios, el técnico serbio llega a afirmar que Wilkins gana la copa griega el solo. En liga en los últimos partidos pasa varias veces de los 30 puntos, en semis de euroliga ante el cska se va hasta los 35, y en los cuartos para eliminar a la Benetton se marca tres partidazos, 32 puntos a la Cibona, 28 al Maccabi…Wilkins provoca un salto de calidad al club del trébol y es elegido MVP de una final four que supone, tapón de Vrankovic mediante, el primer entorchado continental de un club griego.

Sin embargo la historia se obceca en ser caprichosa, y con Wilkins ausente por problemas en un tobillo, el Panathinaikos cae en el quinto partido de la final en uno de los mayores ridículos de la historia (73-38 final).

Acusaciones a Wilkins de borrarse en la cita decisiva, problemas internos…todo apunta a un nuevo golpe de timón. Aprovechando la nueva coyuntura del mercado comunitario el Panathinaikos firma a jugadores como Michael Koch, Marcelo Nicola, Hugo Sconochini o Ferran Martínez, a los que rodea con otro sonoro nombre Nba el del dos veces campeón con los Pistons John Salley.

Lejos de funcionar, el equipo nunca acaba de encontrar su sitio y en los cuartos de final de la euroliga cae, pese a tener la ventaja de campo (49-69 en el primer partido), ante un Olympiacos que tras haber comenzado de forma dubitativa la temporada acaba por firmar un triplete histórico…mientras que el hundimiento del Panathinaikos llega a unos extremos tales que el club se queda fuera de la siguiente edición de la liga europea.

Maljkovic sale del club sustituido por Subotic, y al Panathinaikos llegan Byron Scott y Dino Radja. El croata, pese a sus problemas de rodilla y a haber adoptado un rol más interior, a gran nivel durante todo el año se convierte en el líder del equipo pero en las semifinales de la copa Saporta llega la primer desilusión. Tras vencer por 19 puntos en la ida con 28 puntos de Alvertis y 19 (mas 14 rebotes de Radja), el Panathinaikos naufraga en la vuelta, cayendo en Milán por un claro 86-61. Los 25 puntos de Gentile y los 21 con 14 rebotes de Kidd, dan el paso a la final a un Stefanel que una vez en ella nada puede hacer para frenar a un Zalgiris en estado de gracia. Los de Kaunas se llevaban finalmente el título por 82-67 con 35 puntos de un Saulius Stombergas que raya lo excelso.

Fuera de la final copera, el Panathinaikos afronta la final liguera ante el Paok, lleno de presión, pero en la segunda parte del quinto partido emerge al fin la figura de Byron Scott con 19 puntos en ese periodo para reconquistar el título.







Pese a ello, el que fuera punta de lanza del contraataque laker, sale del equipo dejando el hueco a Dejan Bodiroga, en el que se supone el paso definitivo para reinar también en Europa. Pero de nuevo la historia se repite, y el Panathinaikos, tras dominar las dos primeras fases con el mejor balance de la euroliga (14-2) cae en la eliminatoria de octavos ante la Fortitudo de los Carlton Myers, Fucka, Mulaomerovic o Karnisovas. Fuera de nuevo de la final copera, el PAO llega a la final liguera sin gozar de la ventaja de pista...aunque en el momento más complicado, la calidad de la pareja Bodiroga-Radja emerge con toda su fuerza venciendo en el quinto partido en la cancha del Olympiacos por 53-62, convirtiéndose en el primer equipo que logra el título sin gozar del factor pista.

Pese al éxito, Subotic y Radja abandonan el equipo y de Treviso llegan dos Zeljkos Obradovic y Rebraca. En Salónica frente al Maccabi, llega el segundo título continental y un par de meses después se ratifica con un título liguero. Si bien la copa habría de esperar a 2003, de nuevo se podía decir que el Panathinaikos era(es) el gran dominador del basket heleno sin por ello perder jerarquía continental





LOS JUGADORES




Tras ser el primer jugador de la historia de la euroliga en lograr en un mismo año el mvp de la fase regular y de la final four, Dimitris Diamantidis ha vuelto a completar otra fantástica temporada. Enorme defensor, su envergadura y rapidez le permiten defender a jugadores de muy distinto perfil, poseyendo además una especial habilidad para la defensa colectiva. En ataque marca perfectamente el ritmo de su equipo, guarda el equilibrio interior y es capaz de generar ventajas al poste bajo. Por si fuera poco el de Kastoria ha mantenido su imparable progresión en el tiro exterior. Aunque sus porcentaje siempre habían sido más que correctos (gran 51% hace dos temporadas) el aumento en el rango, la velocidad de ejecución y la confianza con la que se esta levantando han supuesto un nuevo paso adelante en su repertorio ofensivo (de los 31 triples intentados en euroliga hace dos año, paso a 92 la anterior, y a un gran 44/100 en esta). Segundo en número de asistencias del torneo (solo una menos que el líder Teodosic), su casi 88% en el tiro libre es otra de sus garantías dada su facilidad para sacar faltas. Coincidiendo de inicio con el zurdo, Nick Calathes esta viviendo una temporada de pleno reconocimiento. Tras un año en el que se repartía los minutos casi a partes iguales con Tepic, la eliminatoria ante el Barcelona y su gran defensa a Navarro, catapulto al ex de Florida en la rotación de Obradovic, terminando de certificar su confianza con una buena final four y una espectacular final del torneo heleno. Extremadamente rápido de piernas, Calathes se muestra sólido en defensa y sobrio en el ataque, donde a su capacidad de jugar en transición ha añadido una facilidad pasmosa para generarse canastas en el 1+1, en especial a mano cambiada. Su falta de confianza en el tiro exterior, mucho mejor a pies parados, es quizás su único gran condicionante pues en ocasiones le lleva a un acaparamiento excesivo del balón. En su vuelta a Atenas, Sarunas Jasikevicius esta reviviendo las sensaciones que ya encontrara en el comienzo de su anterior etapa. De menos a más a lo largo del torneo (anoto 54 puntos en toda la primera fase y 50 solo en la serie de cuartos), Jasikevicius es otro de los beneficiados de la excelente optimización/compresión hacia sus jugadores de Zeljko Obradovic. Limitado en lo físico, Obradovic le esconde en defensa siempre acompañado de otro base, mientras que en el ataque el lituano goza de un rol preponderante y aparentemente impropio de un jugador de tan limitado minutaje. Genial y creativo como nadie en Europa en la última década, el de Kaunas desatasca el juego ofensivo del Pao con su capacidad de tiro, bien exterior o bien de la media distancia amen de seguir siendo un mago del pick n ´roll.



Llegado para ocupar el rol de desatascador que ofrecía Drew Nicholas, el ex baskonista David Logan no ha conseguido hacerse un sitio de manera regular. Buen manejador de balón y con ciertas dotes para la creación de juego, su escaso papel limita su impacto a su tiro exterior donde no ha estado especialmente brillante. Más activo en defensa de lo que en él era habitual, el “polaco” esta destacando como estilete de los contraataques. De extenso bagaje por la liga griega (Aris, Maroussi, Papagou, Paok, Kavala…) el fichaje de Alexandros Krytsis fue una de las sorpresas estivales en el seno del Panathinaikos. De perfil más anotador que tirador, Kyritsis es un buen defensor y un más que aceptable pasador, pese a lo cual su presencia en la final four parece quimérica ( de 5 partidos disputados en la primera fase, ha pasado a 14 segundos entre el top 16 y los cuartos). En el puesto de alero, Romain Sato esta completando de nuevo una temporada muy seria, siendo el tercer jugador mejor valorado entre los de Obradovic. Muy potente físicamente, Sato, es un buen defensor que ayuda de manera fundamental a los pivots y que contribuye a controlar el rebote defensivo. Ofensivamente es muy potente al atacar el aro y puede anotar de tres si dispone de espacio. Junto al centroafricano, Stratos Perperoglou ha recuperado el nivel tras un comienzo de temporada marcado por las lesiones. Jugador sobrio como pocos, Perperoglou es un todoterreno tan capaz de ayudar en defensa y en rebote, como de aportar a nivel ofensivo. Inteligente sin balón y con buena capacidad de lectura del juego, ha mejorado su tiro, en especial desde las esquinas, aunque debería cuidar más la puntera de sus zapatillas (hasta siete canastas de 2 por pisar la línea del triple en la serie ante el Maccabi). Tras un año en el que a su buen papel en la liga griega, le correspondía otro de mero espectador en la euroliga, Kostas Kaimakoglou esta demostrando que la paciencia y el trabajo son importantes avales cuando se esta a las ordenes de Zeljko Obradovic. Como 3 durante la lesión de Perperoglou o como 4, en los últimos partidos, el ex del Maroussi sigue haciendo gala de su sentido del juego, su capacidad de atacar el aro de fuera adentro y de su peligrosidad en el tiro exterior cuando dispone de tiempo para armar el brazo. Perjudicado por la sobrepoblación de aleros y 4´s del Pao, Pat Calathes apenas esta gozando de oportunidades con las que intentar refrendar a este nivel todo lo ofrecido en la temporada pasada con el Kolossos. Más activo en el tiro exterior de lo que solía acostumbrar, tiene complicado entrar entre los 12 para Istambul. De más a menos durante el año, pero titular igualmente, Steven Smith esta pagando en forma de reducción de minutos, sus habituales despistes defensivos. Partiendo como 4 abierto, Smith es una de las principales amenazas en el triple de los de Atenas (buen 20/46) siendo a su vez muy capaz de atacar el aro a través del bote. Con problemas para leer el juego, en su debe queda su propensión a cargarse de faltas, y su escasa capacidad de rebote y pase. Contrariamente a Smith, Kostas Tsartsaris esta gozando de más importancia en el juego del Panathinaikos a modo que la temporada avanza. De carrera peculiar (su estreno profesional tuvo lugar en el Grindavik islandés), Tsartsaris es otro de los jugadores que mantiene el aspecto granítico de la rotación ateniense. Capaz de abrirse para tirar o de poner el balón en el suelo, su experiencia le permite aportar en pocos minutos en pista e incluso ocupar en ocasiones posiciones teóricas de pivot puro. Definitivamente asentado como 5, Mike Batiste es otro de los jugadores fetiche de Obradovic y una vez más esta justificando su status. Duro en el juego, Batiste interpreta como nadie el pick n´roll con Diamantidis o Jasikevicius, bien para completar alley-hoops o para abrirse y lanzar a 4-5 metros. Buen conocedor del juego, Batiste hace gala además de una gran intensidad y un excelente uso del cuerpo que junto a su potencia le permiten postear y generarse espacios en el poste bajo como pocos jugadores en Europa. En el relevo del americano, Ian Vougioukas parece haber conseguido adelantar de nuevo a Aleks Maric en la rotación y en el rendimiento. Formado en St Louis, el ex de Olympiacos posee ciertas cualidades ofensivas en forma de semigancho o de contundencia al recibir en ventaja, pero sigue adoleciendo de manos blandas y de momentos en que sus excesivamente mecanizados movimientos le hacen perder la situación del juego. Buen reboteador ofensivo, en defensa le falta contundencia pero a cambio aplica buenas dosis de actividad. Por su parte, el australiano sigue sin encontrar su sitio en el Panathinaikos quedando reducido a un papel en muchas ocasiones de especialista cuando enfrente hay un pivot puro. Algo lento y falto de explosividad, Maric sufre con el dinámico ritmo de juego griego, aunque sin embargo es capaz de hacerse valer en el rebote así como en ataque si el equipo le busca de manera reiterada.



EL ENTRENADOR: Intentar explicar con números o datos una carrera suele ser tan injusto como incompleto, pero en el caso de Zeljko Obradovic las cifras son tan desbordantes que dibujan una idea de la trascendencia del personaje. Presente con la de este año en 13 final four con cinco equipos distintos (Partizan, Joventut, Madrid, Benetton y Panathinaikos), ha ganado 8 de ellas con cuatro conjuntos distintos. Entre medias sus dos únicos años fuera de la primera competición continental se saldan con otros tantos triunfos (R.Madrid 97 y Benetton 99), mientras que con la selección yugoslava suma un oro y un bronce europeo, un oro mundialista y una plata olímpica. Ajeno a la gloria domestica en su paso por la acb o la lega, en Grecia ha subsanado el desliz con 11 títulos ligueros y 7 de copa que se unen a los conseguidos con el Partizan en 1992…



EL PERFIL: PELEANDO A LA CONTRA



Exigente, vehemente y excelso preparador de partidos, Obradovic ha entrado por meritos propios en el olimpo de entrenadores europeos con la que es probablemente la carrera más exitosa de la historia. Puestos a buscar otra de sus características, habría que apuntar a su capacidad de cambiar el guión cuando menos se lo espera o a una especial habilidad para vencer en las situaciones más adversas.

Título de una de las mejores compilaciones de textos de Bukowski o de un disco de Quique Gonzalez , el peleando a la contra podría aplicarse a buena parte de las temporadas en las que Obradovic ha triunfado en Europa y es que, como tan bien hacia notar Juanan Hinojo en su análisis de la serie ante el Barcelona de la temporada pasada, el serbio se llevo de soslayo la copa de Europa del 92, la del 94, en buena parte del 95…por no hablar de la enorme sorpresa que supuso su triunfo en la final de 2002 en Bolonia. Pero más allá de esos triunfos, el de Cakac

siempre se ha mostrado con otro rasgo raramente igualado…el de la imprevisibilidad. Tanto en su actual etapa de estabilidad en Atenas, como en las anteriores donde sus relaciones con los jugadores fluctuaban por momentos, Obradovic siempre ha sido capaz de sacar lo mejor en las grandes citas y hacerlo además por donde menos se espera.

Etiquetado como un entrenador amante del basket control, en 2002 o 2009 fue capaz de desarbolar a equipos de Ettore Messina bien jugando con cuatro pequeños o apostando por la velocidad…rasgo poco reconocido pero por el que su Panathinaikos apostó claramente en el periodo 2003-2006 (suyas son las mayores anotaciones de la historia de la euroliga) o en el pasado 2009. Tras una nueva demostración de inteligencia táctica en la serie de cuartos de final de la temporada pasada, Obradovic volvió a mostrar su carácter ganador en la cita barcelonesa, llegándose el título con una autoridad incuestionable. Con las bajas de Fotsis o Nicholas, muchos eran los que pensaban que este año el Panathinaikos volvería a caer victima de su peculiar maldición en los años pares, pero una vez más el gran Zeljko se guardaba un as en la manga y pugnara en Istambul por ser la figura más galardonada de la historia del basket europeo (de ganar superara al propio Real Madrid en numero de títulos)…y todo ello tras haber comenzado su carrera como técnico de manera muy peculiar:



http://www.kkborac.rs/en/index.php/abou ... story.html



Situada en la parte central de Serbia, Obradovic es natural de Cacak una ciudad muy relacionada con el baloncesto y cuyo principal equipo el KK Borac Cacak llega a ser cuarto en la temporada 72/73. Por el Borac llegan a pasar jugadores de la talla de Radmilo Misovic (cinco veces máximo anotador de la liga yugoslava), Dragan Kikanovic (que anteriormente había estado en el otro equipo de la ciudad el Zelznica), Goran Grbovic, Dejan Tomasevic, Milos Teodosic, Dragan Arcis, Sarancic, Dusko Savanovic, Zoran Erceg, Uros Tripkovic…o el propio Zeljko Obradovic.

Base cerebral de buen nivel defensivo y fiable en el tiro cuando se decide a ejecutarlo, Obradovic debuta en el Borac a las ordenes de Aza Nikolic (de nuevo recomendable acudir a la lectura del libro de Juanan Hinojo sobre el basket plavi, para acercarse a la figura de Nikolic) y permanece cuatro años más antes de dar el salto a, Partizan por entonces dirigido por Slavnic. Con el conjunto de Belgrado gana la liga de 1987, entra en la final four de 1988 y, aunque se pierde buena parte del año, forma parte de la plantilla que se lleva la copa y la Korac de 1989. Paralelamente, en 1988 Dusan Ivkovic que busca un veterano que de equilibrio a la selección llama a Obradovic para disputar el preolímpico. Obradovic se convierte así en un rara avis por su tardanza en debutar con la absoluta y más si se comprueba que su presencia en las categorías inferiores se limita al campeonato junior de los balcanes de 1979, donde Yugoslavia (Grbovic, Bilalovic, Radovic, Savovic, Mutpazic…) se lleva el oro ante Grecia por 90-63. Tras debutar en un amistoso ante Grecia en el que anota 8 puntos, Obradovic forma parte del equipo que logra la plata en Seúl 88 y el oro en el mundial de Argentina…un año antes de que su historia cambie, y quien sabe si la del baloncesto europeo en general también.

Concentrado con la selección que va a disputar el eurobasket de Roma, Obradovic recibe una llamada de Kikanovic, por entonces director deportivo del Partizan, que le ofrece hacerse cargo del primer equipo con la condición de que se incorpore de manera inmediata. Obradovic que esa temporada ha sido subcampeón liguero, acepta, deja la selección (es sustituido por un Sretenovic que realiza un gran torneo) y en una noche pasa de compañero a jefe de los Djordjevic o Danilovic que en apenas unas semanas se cuelgan el ultimo oro de la Yugoslavia unida.

Aquel Partizan del 92 haría historia logrando un insospechado triplete y cosechando una sola derrota en la YUBA, ante el Bosna en Sarajevo. Dicen que al acabar ese partido, Mirza Delibasic, técnico del conjunto bosnio por entonces, afirmo seguro que el Partizan sería el próximo campeón de Europa ante la incredulidad de un Obradovic al que pronto la historia abriría la mayor de sus paginas.



LOS NÚMEROS (entre paréntesis los jugadores más destacados)



PUNTOS: 80´4 (Diamantidis 11´3, Batiste 10, 7´9 Kaimakoglou)

REBOTES: 34´6 (Sato 5, Batiste 5, Diamantidis 3´7)

ASISTENCIAS: 15´6 (Diamantidis 4´9, Jasikevicius 2´9, Calathes 2´9)

TAPONES: 2´7 (Vougioukas 0´7, Diamantidis 0´6, Sato 0´4)

VALORACION: 89´85 (Diamantidis 17, Batiste 10´6, Kaimakoglou 9´2)

TIROS DE 2 %: 51´9%

TIROS DE 3 %: 38´4 %

TIROS LIBRES: 72´1 %










EL JUEGO



ATAQUE



PICK N´ROLL: Con Diamantidis y Jasikevicius al frente el pick n ´roll aporta una buena dosis de soluciones al ataque ateniense



TIRO EXTERIOR: Más allá de los porcentajes, el Panathinaikos necesita de su amenaza en el tiro exterior y para ello ha de apelar a la decisión. En ocasiones, el exceso de amagos redunda en un juego de excesivos pases extras que atasca sus opciones.



EQUILIBRIO: Si bien solo Diamantidis y Batiste llegan a los 10 puntos de media (ojo con Jasikevicius que si los alcanzo en la serie de cuartos), hasta otros 7 jugadores se mueven entre los 6´5 de Logan y los 7´9 de Kaimakoglou.



RITMO: El Panathinaikos es uno de los equipos más versátiles del torneo, pero no ha sido raro verles en numerosos partidos con un afán claro de contraatacar o al menos cruzar la pista rápidamente buscando explotar las ventajas creadas en transición.



DEFENSA



AGRESIVIDAD: Con una plantilla larga y útil, Obradovic busca un buen grado de agresividad sobre la línea del balón, muy especialmente en el exterior.



FACTOR DIAMANTIDIS: Intenso, rápido e inteligente, su envergadura además le permite ayudar en situaciones cercanas al aro. Pero más allá de sus condiciones, la labor del base heleno crece al ver su influencia en el entramado defensivo ateniense, no siendo extraño que Obradovic le situé sobre alguno de los jugadores de menos mordiente ofensiva para así cerrar huecos al resto de compañeros con su inusitada facilidad para las ayudas. El año pasado Ricky o este Ohayon son una muestra de lo que puede sufrir Gordon en los minutos que este en pista.



ROTACIONES: Aunque la rotación básica este bastante delimitada, no es raro ver a Obradovic introducir a jugadores para unos pocos minutos y en distintas fases, asegurando la máxima intensidad sin miedo a las faltas.



CONCENTRACCIÓN: Una de las máximas del Panathinaikos, seriedad y plena conciencia de lo que se quiere en cada momento.



AYUDAS: En especial cuando están en pista jugadores como Jasikevicius o Logan, las ayudas se multiplican escondiendo a los eslabones más débiles de la cadena ateniense.





DATOS, CLAVES, CURIOSIDADES…



LA EXPERIENCIA ES UN GRADO (PARTICIPACIONES EN UNA FINAL FOUR):



PANATHINAIKOS



Dimitris Diamantidis: 4 final four (Campeón 2007 ,09 y 11, sf 2005 con Panathinaikos).

Nick Calathes: 1 final four (Campeón 2011 con Panathinaikos)

Sarunas Jasikevicius: 4 final four (campeón 2003 con Barcelona, 04 y 05 con Maccabi y 09 con Panathinaikos)

Romain Sato: 2 final four (campeón 2011 con PAO, sf 2008 con Siena)

Stratos Perperoglou: 2 final four (campeón 2009 y 11con Panathinaikos)

Kostas Kaimakoglou: 1 final four (Campeón 2011 Panathinaikos)

Mike Batiste: 4final four (campeón 2007, 09 y 11 con Panathinaikos y sf 2005)

Kostas Tsartsaris: 4ª final four (campeón 2007 , 09 y 11 y sf 2005 con Panathinaikos)

Aleks Maric: 2 final four (campeón 2011 con Panathinaikos, Sf Partizan 2010)

Ian Vougioukas: 2 final four (campeón 2011 con Panathinaikos, Sf Olympiacos 2009)

Zeljko Obradovic: 13 final four (campeón 2000, 02 , 07 09 y 11 con Panathinaikos, 1992 con Partizan, 1994 con Joventut y 1995 con Real Madrid; subcampeón 2001 con Panathinaikos y sf 2005 con Panathinaikos, 1998 con Bennetton y 1996 con Real Madrid) * Como jugador, Zeljko Obradovic fue semifinalista de la final four de 1988 con el Partizan.



CSKA MOSCÚ



Milos Teodosic: 2 final four (Finalista 2010 y sf 09 con Olympiacos)

Anton Ponkrashov: 2 final four (sf 2007 y 2010 con Cska)

Ramunas Siskauskas: 4 final four (campeón 2007 con Panathinaikos y 08 con Cska, finalista 09 y sf 2010 con Cska)

Andrei Kirilenko: 1 final four (sf 2001 con Cska)

Nikita Kourbanov: 3 final four (campeón 2006, finalista 07 y sf 10 con Cska)

Viktor Khryapa: 6 final four (campeón 2008, subcampeón 09 y sf 2003,04,05 y 10 con Cska).

Andrei Vorontsevitch : 3 final four (campeón 2008 ,subcampeón 09 y sf 2010 con CSKA)

Sasha Kaun 2 final four (subcampeón 2009 y sf 2010 cska)

Jonas Kazlauskas: 1final four (campeón 1999 con Zalgiris)



MEDALLISTAS



Dimitris Diamantidis: (Oro eurobasket 2005, plata mundial 06 con Grecia)

Nick Calathes (Bronce eurobasket 2009 con Grecia)

Sarunas Jasikevicius (oro eurobasket 2003, bronce JJOO 2000 y eurobasket 07 con Lituania)

Stratos Perperoglou: (Bronce eurobasket 2009 con Grecia)

Kostas Kaimakoglou: Bronce en el eurobasket 2009 con Grecia

Kostas Tsartsaris: Oro en el eurobasket 2005 y plata en el mundial 2006 con Grecia

Zeljko Obradovic: Oro en el mundial de 1998, oro en el eurobasket 1997, plata en los JJOO de 1996 y bronce en el eurobasket de 1999 con Yugoslavia (serbomontenegrina). Como jugador, oro en el mundial de 1990 y plata en los JJOO de 1988 con Yugoslavia.



Milos Teodosic: Plata eurobasket 2009 con Serbia

Anton Ponkrashov: Oro eurobasket 2007 y bronce 11 con Rusia

Andrei Kirilenko: Oro eurobasket 2007 y bronce 11 con Rusia

Ramunas Siskauskas: oro eurobasket 2003, bronce JJOO 2000 y eurobasket 07 con Lituania)

Viktor Khryapa: Oro eurobasket 2007 y bronce 11 con Rusia.

Andrei Vorontsevith: Bronce eurobasket 2011 con Rusia

Nenad Krstic: Plata eurobasket 2009 con Serbia

Darjus Lavrinovic: Bronce eurobasket 2007 con Lituania

Jonas Kazlauskas: Bronce JJOO 2000 con Lituania



THE KKK: De todas las anécdotas que conforman la historia de “The Ramones”, una de las más curiosas sin duda, gira en torno a la canción “The KKK took my baby away”. Compuesta por Joey Ramone e incluida en su disco de 1981 “Pleasant Dreams”, en ella el cantante de los Ramones se toma su particular venganza respecto al guitarrista de la banda, un Johnny Ramone, famoso por su ideología extremadamente conservadora y que poco antes de la grabación del disco se había casado con la ex novia de Joey. Lo más curioso del caso es que el guitarrista no solo grabo la canción, sino que tardo más de tres meses en captar el significado de la misma, momento en el cual, en pleno concierto, opto por golpear con su guitarra al bueno de Joey, pese a lo cual el grupo siguió tocando el tema durante muchos años.

No es este el lugar para hablar de las ideologías de los Kirilenko, Khryapa, Krstic o Kaun…pero cuando se juntan las tres K del Cska, los espacios se reducen y no sería nada extraño que los moscovitas se llevaran a la chica/balón en más de una ocasión.









INFALIBLE JASIKEVICIUS: Tras comenzar la temporada pasada parado, la carrera de Sarunas Jasikevicius ha vuelto al primer plano para mayor deleite de los amantes del talento. Tras ayudar al Lietuvos a colarse en el top 16, ser clave en la final liguera de la Tbl con el Fenerbahce y completar un buen eurobasket, el base lituano ha conseguido volver a hacerse un hueco importante en la rotación de un Panathinaikos con el que va a disputar la que es su quinta final four (en la que por cierto se medirá a un Jonas Kazlauskas bajo cuya dirección se llevo el europeo junior de 1994 y debuto en la absoluta). Más allá de tan respetable cifra, llaman la atención un par de datos: la solvencia del de Kaunas en las grandes citas con 4 títulos en otras tantas presencias (en el lado opuesto se hallaría el 0/5 de Andrés Jiménez) y el hecho de haberlo conseguido hasta con 3 equipos distintos, algo que nadie más ha podido repetir.



NÚMERO DE EQUIPOS DISTINTOS GANANDO EUROLIGA (RANKING)



3



Sarunas Jasikevicius (Barcelona, Maccabi, Panathinaikos)



2



Dejan Bodiroga (Panathinaikos, Barcelona)

Zoran Savic (Jugoplastika, Kinder)

Matjas Smodis (Kinder, Cska)

David Andersen (Kinder, Cska)

Zeljko Rebraca (Partizan, Panathinaikos)

Ivo Nakic (Cibona, Partizan)

Predrag Danilovic (Partizan, Kinder)

Dino Meneghin (Varese, Milán)

Fausto Bargna (Cantu, Milán)

Ramunas Siskauskas (Panathinaikos, Cska)

Dimitris Papanikolau (Olympiacos, Panathinaikos)

Velibor Radovic (Jugoplastika, Maccabi)

Aleksey Savrasenko (Olympiacos, Cska)



Sin embargo, en participar con el mayor número de equipos distintos en final four, Jasikevicius debe conformarse con compartir la segunda plaza:



4



David Andersen (Kinder, Siena, Cska, Barcelona)



3



Sarunas Jasikevicius (Barcelona, Maccabi, Panathinaikos)

Zeljko Rebraca (Partizan, Benetton, Panathinaikos)

Zarko Paspalj (Partizan, Olympiacos, Panathinaikos) *

Matjas Smodis (Kinder, Skipper, Cska)

Zoran Savic (Jugoplastika, Real Madrid, Kinder)

Mihalis Kakiouzis (Aek, Siena, Barcelona)

Mirsad Turckan (Efes, Siena, Cska)

Marko Jaric (Teamsystem, Kinder, Siena)

Johny Rogers (Milán, Olympiacos, Panathinaikos)

Predrag Drobnjak (Partizan, Efes, Tau)

Erazem Lorbek (Skipper, Cska, Barcelona) **

Damir Mulaomerovic (Teamsystem, Efes, Panathinaikos)

Terence Morris (Maccabi, Cska, Barcelona)





* En la 97/98 Paspalj llego a disputar algunos partidos con la Kinder Bolonia, pero no llego a disputar la final four.



** En la 06/07 disputo la euroliga con el Unicaja, pero regreso a la lega antes de la disputa de la final four.



Por los pelos se queda fuera Ken Barlow, que fue campeón de Europa con el Tracer en la última final pre-final four y luego llego a disputarla con Maccabi y Paok.





RITMO: Clave como siempre en este tipo de encuentros, el ritmo de juego puede ser uno de los grandes caballos de batalla del partido. Aunque el Panathinaikos de esta temporada no se ha caracterizado por especular, la fluidez habitual del Cska invita a pensar que los atenienses trataran de que el partido no sea tan abierto.



TIRO EXTERIOR: Uno de los puntos clave para un Cska, que se prodiga con mucha asiduidad desde el 6´75 y que ha alternado exhibiciones en el tiro con rachas preocupantes.



DUREZA: A los moscovitas les ha costado cambiar en ocasiones el chip dentro de los partidos, por lo que una de las bazas del Panathinaikos puede ser apostar por la dureza exterior.



CONCENTRACCIÓN: Resulta evidente que es clave, pero más para un Cska al que le ha costado meterse en determinados partidos. Temibles en los terceros cuartos, la experiencia de la final four de 2009 debería despertar a los de Kazlauskas de inicio.



TALENTO VS PROFUNDIDAD: La primera variable parece favorable para el Cska, pero no tanto la segunda con un Panathinaikos donde Obradovic consigue invulcrar a sus 12 jugadores. Con 9 jugadores de rotación efectiva de manera habitual, si Lavrinovic, Mejia, Voronov o Ponkrashov pudieran agarrarse al partido, el Cska ganaría enteros de cara a lo que se prevé como una cerrada lucha.



ASES EN LA MANGA: ¿Habrá sorpresas? Para nada descartables, la presunta debilidad defensiva de Teodosic o Jasikevicius, la posibilidad de que Obradovic vuelva a juntar a Sato y Perperoglou buscado físico en el perímetro, la polivalencia de jugadores como Smith, Kaimakoglou, Khryapa o Kirilenko…muchas variables para un partido antológico.



DUELO DE PIZARRAS: Con dos excelentes preparadores de partido en ambos banquillos, el aparente favoritismo que se le ha otorgado al Cska, coloca a Zeljko Obradovic en una de las situaciones en la que más cómodo se siente. Con casi mes y medio para preparar el partido, las trampas tácticas pueden estar al orden del día en un duelo que cuenta con algún sabroso precedente:



Dejando de lado la semifinal de los juegos de Atlanta, donde el lituano ejercía como asistente, el primer cara a cara entre Kazlauskas y Obradovic tenía lugar en los cuartos de final del eurobasket 97 saldándose con un claro triunfo yugoslavo. Dos años más tarde, el Panathinaikos comenzaba la senda de su segundo título europeo, venciendo en el arranque de la temporada por 66-82 en Kaunas en un gran partido de Johny Rogers y hacia lo propio en la segunda fase como local de manera más ajustada (86-82 con 26 puntos de Bodiroga y 27 de Mindaugas Zukauskas). El primer triunfo del técnico lituano, llegaría unos meses después, sorprendiendo a una Yugoslavia sin Danilovic en los cuartos de final de Sydney, endosando así una de las derrotas más duras de la carrera del técnico de Cacak.

Ya en su etapa helena, Kazlauskas debutaba en el derby ateniense venciendo por 81-74 a un Panathinaikos en el que destacaba Kostas Tsartsaris con 17 tantos. Con una plantilla hecha de retales, los del Pireo se desfondaban en la segunda mitad de temporada cayendo en la cancha del Panathinaikos por un contundente 86-55 (16 de Alvertis) y terminando como octavos…lo que les llevaba a un cruce de cuartos con los verdes. En el primer acto, el Olympiacos dominaba tres cuartas partes de partido pero terminaba cayendo por 74-77 gracias en buena parte al acierto exterior de un Jaka Lakovic que terminaba con 19 puntos. En el segundo acto, el Panathinaikos se ahorraba complicaciones certificando su pase a semifinales con un claro 95-77 (11 puntos, 5 rebotes y 7 asistencias de Diamantidis). Una temporada más tarde, el Olympiacos repetía triunfo inicial en la fase regular (84-77 con 17 puntos de Quina Lewis), mientras que el Panathinaikos devolvía la moneda en la segunda vuelta con un holgado 90-71 en un encuentro en el que Diamantidis deslumbraba con 22 puntos y 13 rebotes. Tras eliminar a Maroussi y Aris, Panathinaikos y Olympiacos se encontraban en la final, deparando un nuevo título para Obradovic con un claro 3-0 global (82-76 en el último con 19 puntos de un Lakovic que era elegido como MVp de la final). El ultimo enfrentamiento entre Kazlauskas y Obradovic lo encontrábamos esta misma temporada con doble triunfo para el moscovita, destacando lo holgado del segundo pese a la ausencia de Kirilenko en el mismo.